HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA
CÉSAR INCA.
En esta ocasión presentamos “Soli”, el
nuevo trabajo solista del maestro estadounidense DAVE NEWHOUSE, multi-instrumentista
y compositor veterano que siempre aprovecha cada momento para dar cuenta de las
amplias dosis de creatividad y vigor que existen en su espíritu. Todavía no se cumple el aniversario de “Natura Morta”, su magnífico disco anterior, y ahora llega el turno de esta nueva obra fonográfica, la cual salió al mercado el pasado 4 de abril por vía del sello independiente New House Music (se deduce por el nombre que es una iniciativa del propio DAVE). El buen Sr. NEWHOUSE siempre da
todo de sí en sus discos solistas, así como en grupos y proyectos colectivos,
siempre ha sido así, incluso en aquellos viejos tiempos de THE MUFFINS, el primer gran
grupo dentro de su amplio currículum vitae. Y qué decir de MANNA / MIRAGE, el
proyecto con el que realizó una especie de continuación del legado de THE
MUFFINS. En el caso de “Soli”, tenemos un repertorio donde él es el ejecutante exclusivo de todos los instrumentos (saxofones, clarinetes, flauta, pícolo, teclados, bajo, guitarra, acordeón, batería y percusión) y de todas las programaciones. Veamos ahora el repertorio mismo del disco.
Ocupando un espacio de poco más de 2
minutos, ‘Oh What A Day’ abre el álbum con luminosa sobriedad. Su swing jazzero tiene un groove lo suficientemente rico como para llamarse extrovertido, pero su vitalismo patente se reviste de una elegancia razonablemente contenida que permite al centro melódico lucirse de manera natural. Ostentando el
peculiar título de ‘Jumpin’ Pissoff’, la segunda pieza del repertorio exhibe un dinamismo más acrecentado que el de la pieza de apertura, gestando un esquema sonoro que combina fulgor y densidad con exquisita distinción. Lo que suena es como un híbrido entre los SOFT MACHINE de los álbumes cuarto y quinto y el FRANK ZAPPA de 1969-72. Una especial mención merecen los efluvios de los diversos saxofones que entran a tallar, y otra va para los extravagantes saltos de las guitarras en el pasaje epilogar. Un primer cénit del álbum al cual sigue ‘Fewer
Heads’, otra pieza vivaz que, en esta ocasión específica, se centra en una remodelación avant-progresiva del estándar de los ensambles de vientos propios de los orígenes del jazz en ciertas zonas de la Costa Este de los EE.UU. La meticulosidad de la orquestación global es simplemente fenomenal, la simple razón de ser de esta composición, la composición de un arreglo masivo a partir de un motif estructuralmente sencillo. ‘Two-Spirit People’ es un nuevo ejercicio de vibraciones Canterburyanas (por llamarlas de una forma comúnmente aceptada) con inspiración tomada de SOFT MACHINE, aunque también hay alguna influencia de la delicadeza sistemática de GILGAMESH. Las ocasionales capas de acordeón ayudan a reforzar la tersa base armónica. Otro momento decisivamente culminante del disco. ‘3 Easy Pieces’ es un collage que comienza con un breve preludio en clave de big band, para luego virar hacia un motivo tribal que sustenta algunas leves incidencias del paradigma de SUN RA y otras de la faceta más vivaz de ZAPPA; su espíritu festivo revela una vivacidad ágil y llamativa. El tránsito final es hacia un motivo flotante donde rige la ley de las libres formas en clave etérea: las notas predominantes del teclado aletean con una suavidad que se asume con certera seguridad. Ya que mencionamos a ZAPPA, también sacamos a colación las confluencias con esa lógica del pastiche dadaísta al que es tan adepto el legendario dúo connacional RASCAL REPORTERS.
Cuando llega el turno de ‘Bande
Noire’, se abre campo al desarrollo de climas misteriosos donde el sutil fulgor
sónico en curso se deja envolver bajo un manto otoñal que algo tiene de introspectivo. Hay, en efecto, una espiritualidad un tanto lánguida que atraviesa a las múltiples capas de teclados, vientos y acordeón, una ambientación cinematográfica que se explaya en la manifestación de una inquietud tan cierta como arcana. Es una exposición pura de la interioridad atravesada por la técnica del arte del sonido articulado. ‘Precious Eye’ tiene en su título una
alusión a una metáfora solar del inmortal WILLIAM SHAKESPEARE. Ese referente literario se traduce a un groove jazz-progresivo semejante al del tema #1 sobre el que se desarrolla una exhibición de claridades melódicas que nos remiten a las del tema #4. He aquí un grácil encuentro entre los legados de HATFIELD AND THE NORTH y HAPPY THE MAN a través del lente de la faceta más serena de THE MUFFINS: una forma suntuosa de animar un bloque melódico de por sí bastante hermoso. Con la secuencia de estos dos temas, hemos transitado de la última bruma de la noche a las primeras luces matutinas. ‘Dr. Hepcat’ regresa a la vertiente más vanguardista de la amplia visión musical de NEWHOUSE por vía de una agitación Zappiana de algunos estándares herederos del jazz experimental de los 60 y 70. Apoyándose en un swing de Latin jazz, ‘The
Man In The Skin-Painted Suit’ da otra vuelta de tuerca a la calidez melódica que ya apreciamos en algunas piezas precedentes. ‘Not
Enough Time, Billy’ es una elegía en memoria del recientemente desaparecido
Billy Swann, quien fue bajista-guitarrista de THE MUFFINS, el primer gran grupo
dentro del amplio currículum vitae de NEWHOUSE. Su triste fallecimiento tuvo lugar en agosto de 2024. La pieza en cuestión ostenta una atmósfera grisácea que se va explayando con un aura intrigante; unas torsiones deconstructivas se manifiestan en las líneas del saxo mientras los teclados van plasmando una bruma absorbente. Hasta aquí llega el repertorio
oficial del disco, pero todavía queda una versión de ‘The Man In The
Skin-Painted Suit’ donde NEWHOUSE recibe la colaboración de Michael Bass, su
colega en SWELL BROTHERS. Aunque el espíritu melódico de la composición es apropiadamente respetado, es natural que el esquema sonoro se sienta más lleno, suponiendo ello un realce de las motivaciones progresivas en curso. Muy eficaz este bonus track para terminar las cosas con una aureola de color sónico.
Toda esta fue la experiencia de “Soli”, el nuevo álbum solista del noble orfebre de múltiples instrumentos DAVE NEWHOUSE, una autoridad irrefutable de la vanguardia estadounidense de ayer y hoy. Su infatigable asertividad musical no sólo añade réditos a su inmenso currículum vitae, sino que también perpetúa la dignidad artística del ideal de la música vanguardista estadounidense de nuestros días. Como prácticamente todo lo que hace este maestro, se trata de un disco muy recomendable para cualquier buena fonoteca.
Jumpin’ Pissoff: https://davenewhouse.bandcamp.com/track/jumpin-pissoff
Two-Spirit People: https://davenewhouse.bandcamp.com/track/two-spirit-people
Bande Noire: https://davenewhouse.bandcamp.com/track/bande-noire
Precious Eye: https://davenewhouse.bandcamp.com/track/precious-eye
Two-Spirit People: https://davenewhouse.bandcamp.com/track/two-spirit-people
Bande Noire: https://davenewhouse.bandcamp.com/track/bande-noire
Precious Eye: https://davenewhouse.bandcamp.com/track/precious-eye