HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
El grupo belga QUANTUM
FANTAY vuelve a la carga con una nueva gema del prog psicodélico contemporáneo:
“Terragaia”. Ya estamos a 10 años del momento de su formación y con este nuevo disco
ya suma cinco discos de estudio hasta el momento dentro de una carrera que
también incluye dos discos en vivo. Actualmente, QUANTUM FANTAY consta de Pete
Mush [sintetizadores y efectos], Jaro [bajo, djembé, didgeridoo y canto], Gino
Bartolini [batería, djembé y otras percusiones] y Dario Frodo [guitarras
eléctricas y acústica], contando con las colaboraciones ocasionales de Anaisy
Gómez (integrante del grupo cubano ANIMA MUNDI) a la gaita y de Nele Casneuf al
arpa. La deserción del flautista Charles de la alineación oficial de QUANTUM
FANTAY no ha impedido que aporte algunas líneas de flauta a ciertos temas del
disco: por lo demás, la riqueza sonora que el grupo siempre ha sabido generar
desde su propuesta space-rockera ampliamente inspirada en los paradigmas de
OZRIC TENTACLES, GONG y HAWKWIND noestá menguada en lo absoluto. Claro está, en
los cuarteles de QUANTUM FANTAY se ha gestado y madurado algo más que una labor
de clonación de influencias precedentes, y la misión de “Terragaia” es la de
seguir asentando esta personalidad propia dentro de la continua renovación de
tradiciones progresivas específicas. Vayamos al disco en sí, ¿vale?
‘Journey To Earth’ da
inicio al disco con un vigor llamativo desde donde se da un punche decisivo al
muy exótico motivo del jam central; el viraje hacia cadencias reggae que se da
en algún momento ayuda a darle un giro nuevo al colorido vigente. Con ‘Azu Kéné
Dékké Leppé’, la banda experimenta con una mayor complejidad rítmica a través
de los sucesivos empleos de elementos tribales, factores sinfónicos,
incursiones en el space-rock de inspiración Tentacular y simpáticos interludios
latino-tropicales: un collage genialmente armado, sin duda. ‘Desert Rush’, el
tercer tema, se encarga de elaborar una arquitectura rítmica trepidante sobre
la cual las intervenciones de la guitarra y los sintetizadores se dan mucho
abasto para reflejar vigor a flor de piel… y de paso, darle un nuevo giro de
tuerca al paradigma de OZRIC TENTACLES. ‘Aargh’ ofrece un cambio de registro al
insertarse en aires célticos: parece casi un remanente del disco solista de IAN
ANDERSON “Divinities” debidamente sazonado con ornamentos psicodélicos de
sintetizador y con un nervio más directo en la labor del baterista. Las
presencias de la gaita de Anaisy Gómez y el arpa de Nele Casneuf son oportunas
en pasajes estratégicos, y lo mismo vale para la flauta de Charles. Durando
casi 11 minutos, ‘Instant Karma’es la pieza más larga del álbum. Siguiendo por
un sendero conocido pero añadiendo elementos de sinfonismo y jazz-rock al
asunto, la banda sabe cómo manejar y sostener el gancho de los jams sucesivos y
mantener genuinamente la atención del oyente. Cabe hacer una mención especial a
Frodo, quien elabora magníficos solos de guitarra – acústica y eléctrica – en
varios pasajes de este tema. ‘Chipsticks And Gongs’ vuelve a la entusiasta
trepidación rítmica de ‘Desert Rush’ pero con una mayor riqueza típicamente
progresiva en el desarrollo de sus motivos melódicos: incluso las partes de
flauta y algunas intervenciones de la guitarra suenan muy a lo JETHRO TULL.
Hasta ahora el álbum
va muy bien, no apartándose mucho de lo que aprendimos a esperar de un álbum de
QUANTUM FANTAY pero con un estupendo despliegue de ingenio en cada ítem del
repertorio, y cuando llega el turno ‘Indigofera’ no nos decepcionamos porque
nos ofrece un interesante ejercicio de medios tiempos etno-psicodélicos con un
correcto manejo de cadencias tribales a través de un razonablemente sofisticado
esquema rítmico; incluye también algunos pasajes de didgeridoo. ‘Yah Roste
Fooroap’ empieza como un dub-reggae de talante psicodélico (un truco utilizado
por lo menos una vez en cada disco de OZRIC TENTACLES), y así se establece el
cuerpo central de la pieza. Un interludio reflexivo abre campo para que se
desarrolle un hermoso solo de sintetizador cuya serena vibración volverá a
emerger más tarde durante el segundo momento del pasaje reggae. Para el
momentum final, el grupo se explaya por un momento en un frenesí que parece un
HAWKWIND “tecnificado” antes de replantear el reggae en clave de ska cósmico
sazonado con aires arábigos. ‘Cowdians’ es la segunda pieza más extensa del
álbum durando poco más de 10 minutos. Tras un prólogo expectante que resuena un
poco al prototipo del VANGELIS de los 70s, el grupo se enfila hacia un motivo
country-rock que nos toma de sorpresa de una forma agradable. Los posteriores
desarrollos hard-rockeros y jazz-rockeros sirven para darle una sólida
prestancia progresiva al asunto mientras se sigue desplegando en su ambicioso
espectro temporal. El final consiste en un reprise del prólogo seguido de un
último aliento rockero basado en uno de los riffs que antes habían hecho acto
de presencia. En fin, ‘Journey From Earth’ cierra el disco con una magnífica
entrada al mundo del sinfonismo puro (se notan ribetes de YES y CAMEL en el
espíritu musical que ilustra el cuerpo central) mientras conserva el groove
intenso del space-rock estandarizado: de hecho, esta preservación sirve de
acicate para que el grupo elabore un ejercicio de furia rockera en el crescendo
crucial. El breve pasaje final de sintetizador supone una coda muy agradable.
Fueron alrededor de 70
minutos de música progresiva cósmica y la verdad que ningún minuto ha sido
desperdiciado en cuanto a grandeza sónica… ni siquiera un segundo: QUANTUM
FANTAY se sigue afianzando como una figura líder del prog psicodélico europeo y
no da indicio alguno de decadencia creativa en el presente o el futuro próximo.
“Terragaia” es un deleite altamente recomendable para los coleccionistas
progresivos de todo el mundo.
Muestra de
“Terragaia”.-
Desert Rush: https://www.youtube.com/watch?v=RVF6mGdUjeo
Yah Roste Fooroap: http://www.youtube.com/watch?v=vjyGIgl5D5Q