Monday, June 30, 2025

Un nuevo orden monolítico para ICONOCLASTA, legendaria voz del rock progresivo mexicano


 
HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
En esta ocasión presentamos el nuevo trabajo fonográfico de la legendaria entidad progresiva mexicana ICONOCLASTA, el cual se titula “Orden En El Caos” y tiene la misión de instaurar un nuevo orden monolítico dentro de la vigencia de este proyecto que ya tiene más de 40 años de existencia. Tal como dijimos, este nuevo régimen de ICONOCLASTA es monolítico porque, además de ser el autor exclusivo de todo el nuevo material, Ricardo Moreno (fundador y único integrante permanente de la banda desde los tiempos de ese estupendo álbum homónimo de debut del año 1983) se hizo cargo de tocar todos los instrumentos: guitarras, teclados, bajo, percusiones y programaciones. El único invitado es Luis Arturo Castellanos, quien funge como cantante de uno de los temas contenidos en el álbum que hoy nos ocupa. Revisemos por ahora algunos detalles del pasado reciente de este ensamble. Entre los años 2009 y 2023, ICONOCLASTA publicó tres discos de estudio, siendo el último de ellos un trabajo a dúo de Moreno con la bajista-cantante Greta Moreno (
“Alter Ego”). Antes de eso, el año 2022 vio la publicación del doble álbum en vivo “Concierto De Aniversario 35 Años”, el cual recogió un glorioso evento del 5 de diciembre de 2015 en el Parque Hundido de la Ciudad de México. La presencia de la teclista Rosa Flora Moreno le dio un toque de evocación y despedida a un largo legado, tras el cual había que abrirse a nuevos horizontes. Y volviendo nuestra mirada al presente, advertimos con mayor lucidez lo que implica la peculiaridad de que Moreno sea el guerrero solitario de ICONOCLASTA. El material contenido en “Orden En El Caos” fue grabado en el Iconostudio de Querétaro; Ricardo Moreno se encargó de la ingeniería de sonido y el proceso de mezcla, mientras que el de remasterización estuvo en manos de Jorge Orozco. La ilustración de la portada es de la autoría del maestro Carlos Tello Nielsen*, siendo Rafael Junior González el realizador del diseño gráfico. Veamos ahora el disco mismo.
 
Todo comienza con ‘Dominio Etéreo’, tema que dura casi 6 minutos. Las escalas iniciales de piano, acompañadas por cristalinas orquestaciones, evocan una aristocrática aureola contemplativa que, de a pocos, se asienta dentro de una envolvente atmósfera donde lo romántico y lo impresionista se dan la mano. Siendo el protagonista el piano, éste ejerce su mando sobre el desarrollo temático con un talante etéreo, justo como lo indica el título mismo. Muy sugerente inicio del disco. Acto seguido, emerge ‘Recuerdos De La Ceiba’, una pieza explícitamente vivaz donde el refinamiento melódico del prog sinfónico y la soltura señorial del jazz-prog se fusionan dentro de un ambiente celebratorio que despliega distinción a raudales. Algunos ornamentos psicodélicos de sintetizador y algún quiebre rítmico que emerge a mitad de camino añaden una peculiar extravagancia al asunto. ‘El Poder De La Convicción’ es la pieza más extensa del disco con su espacio de cerca de 6 ½ minutos. Aquí opera inicialmente un predominio de aires fusionescos dentro de un tratamiento progresivo. Las bases de las guitarras acústicas están adecuadamente complementadas por el intenso groove de las percusiones (reales y programadas), siendo así que el sintetizador y la guitarra eléctrica se disponen a reforzar las melodías básicas. Éstas portan, en sí mismas, el factor rockero que atraviesa al bloque global, un factor que se torna predominante poco antes de traspasar la frontera del cuarto minuto. De esta manera, la extroversión inherente a la ilación multi-temática se enfila decididamente hacia una musculatura distinguida. Hemos disfrutado de dos cénit consecutivos del álbum. ‘Preludio En La Menor (Am)’ vira totalmente de rumbo. Se trata de un ejercicio de cristalino barroquismo donde el puro refinamiento de las escalas de las guitarras clásicas avivan la gentil llama de una vela que ilumina parcialmente los rincones melancólicos del espíritu humano. Es posible encontrar nexos estilísticos con los patrones pastorales de Steve Hackett y Anthony Phillips en la bien perfilada delicadeza del cuadro sonoro aquí plasmado. Como sea, se trata de una composición bella y cautivadora que nos invita a dejarnos llevar por la magia de la contemplación serena. ‘Vive Por Algo O Morirás Por Nada’ es una pieza de piano cuyos aires académicos están sistemáticamente empapados por aires folclóricos; de hecho, las intervenciones armónicas del bajo y la guitarra ayudan a reforzar las coquetas cadencias de la composición. 

‘La Purificación De Las Almas Por Las Indulgencias’ se centra en un área progresiva donde confluyen grácilmente las influencias más prístinas de los viejos paradigmas de GENESIS y GENTLE GIANT, no estando exento el esquema sonoro de ciertos pliegues jazz-rockeros mientras el groove se deja llevar por su propia soltura. Los fraseos y ritmos de los múltiples guitarreos se mueven con suprema elegancia, permitiendo que el desarrollo temático exhiba liberalmente su intrínseca calidez. Tal vez podemos ver aquí algunas resonancias de lo que se hizo en el laboratorio musical de ICONOCLASTA en sus discos de inicios de los 90, aunque con unos inevitables matices aggiornados. Otro momento culminante del disco. ‘Canto Primitivo Al Lobo’ se centra básicamente en un ejercicio de rock psicodélico sobre un groove cuasi-bluesero, siendo así que los efectos vocales que van surgiendo a lo largo del camino añaden un matiz teatral al asunto. Se trata de una pieza bastante aguerrida en espíritu a pesar de que la ingeniería sónica concreta no es demasiado agresiva. Cuando llega el turno de ‘Tiranicidio’, Moreno retoma el enfoque sonoro de la pieza precedente para elevarla hacia una instanciación jazz-progresiva bastante ágil. El despliegue de sofisticación musical es goza de suficiente solvencia como para instalar una nuevo ejercicio de convincente jolgorio musical. ‘Francotirador’ prosigue por esta senda de gracilidad expresiva, incluso acentuándola más para que se resalte el talante amargamente irónico de la letra. “¿Cuántos huérfanos quedan cuando por fin ya te vas? / Despreciable es tu oficio, pero orgulloso estás. / Con talento ejerces tu terrible habilidad. / La inconsciencia te ayuda para nunca cuestionar, / eso aceptar, / porque no quieres fallar.” ‘Ciencia Y Consciencia’ juega con un animado swing en 6/8 para establecer un nuevo ejercicio de coloridas cruzas entre sinfonismo y jazz-fusión: lo primero se centra en el centro melódico y sus orquestaciones; lo segundo, en las vibraciones rítmicas tan llenas de calidez. 

Con ‘La Ilusión Del Rostro Hueco’, la intensidad expresionista persiste pero cambia de lugar: si en la pieza precedente se trataba de una celebración de las agitaciones del tiempo de la vida, esta vez se trata de una ambientación inquietante claramente marcada por una aureola neurótica. Algunos coqueteos con el avant-prog y el Crimsonismo hay, aunque la infraestructura sonora sigue estando enraizada en el sinfonismo. La dupla de ‘Benditos Paganos’ y ‘Barbarie Y Sacrificio’ refuerza la diversidad de recursos sonoros. El primero de estos temas mencionados exhibe una vivacidad alegre, muy celebratoria de hecho, una especie de retorno a los momentos más extrovertidos de los dos primeros discos de ICONOCLASTA a través del filtro de los CAMEL de fines de los 70 e inicios de los 80. Las intrincadas líneas del bajo ayudan mucho a cimentar la festiva solidez del encuadre rítmico, aunque, claro está, es la guitarra quien lidera el enclave melódico específico. ‘Barbarie Y Sacrificio’, por su parte, instaura un enclave cuasi-barroco para organizar inicialmente el enmarañamiento de las armonías de las guitarras actuantes. A partir de allí, se gestiona una claridad melódica que no tarda mucho en incorporar estilizadas cadencias folclóricas. La idea central queda completa y se aferra a su cálida gracilidad hasta el momento final. El cierre del álbum llega de la mano de ‘Don Juan Matus’, una pieza que regresa a senda de evocaciones orquestales con protagonismo del piano que ya se había trazado en el primer tema del disco. El armazón instrumental se revela más suntuoso merced a la presencia de ornamentos percusivos y a un manejo más resuelto de las escalas de piano sobre las que se edifica el centro melódico. Un luminoso momento de estilizada asertividad para concluir las cosas. “Orden En El Caos” es, a fin de cuentas, un muy inspirado testimonio del nuevo orden que define a la actual vigencia de ICONOCLASTA. Gracias al maestro Ricardo Moreno por haber sabido plasmar su nueva explosión de creatividad progresiva y ecléctica en este disco que nos deja con deseos de más: han sido más de 54 minutos de grandeza musical. ¡Un disco realmente muy recomendable!


Muestras de “Orden En El Caos”.-
La Purificación De Las Almas Por Las Indulgencias: https://www.youtube.com/watch?v=kwyMnUUzrf4  
 

* Él hizo portadas para otros discos de ICONOCLASTA a lo largo de los años, y también para el único disco de PRAXIS.

Friday, June 27, 2025

El desafío de KARFAGEN para el año 2025



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

“Omni” es el nuevo disco del proyecto del músico y compositor Antony Kalugin KARFAGEN, el mismo que fue publicado en CD y doble vinilo a inicios del pasado mes de marzo. Kalugin nació el 11 de febrero de 1981 y comenzó su carrera musical como solista, iniciándose en el área de la new age y luego pasando al prog sinfónico con ciertos aires retro. Más adelante, formó los proyectos KARFAGEN (en 1997, siendo reformado en 2005) y SUNCHILD (en 2008) para seguir explorando las facetas más épicas del ideal sinfónico. El primero de estos colectivos es el que más renombre ha obtenido dentro de los círculos virtuales de apreciación de la música progresiva: “Spektra” (2016), “Echoes From Within Dragon Island” (2019) “Birds Of Passage” (2020) son tres de las obras más celebradas dentro de un amplio catálogo que ya contiene la friolera de 21 ítems. Siendo como es una de las figuras más trabajólicas dentro de la escena progresiva internacional de las dos últimas décadas, no nos sorprende que Kalugin quiera hacerse presente también en el año 2025, y “Omni” es su apuesta actual. Desde su actual residencia en Alemania (país a donde se mudó apenas iniciado el todavía vigente conflicto bélico entre Rusia y Ucrania), nos ofrece una suite en dos partes que empezó a componer en agosto de 2024. En ella, confluyen lo retro y lo moderno, siempre manteniendo un colorido meticuloso y preciosista; además, se añaden rudimentos etéreos en ciertos pasajes estratégicos. Kalugin se hace cargo de todos los instrumentos de teclado y algunas partes de percusión y de bajo. La cantidad de instrumentistas colaboradores es enorme: John Hackett (flauta), Richard Sinclair (canto y bajo sin trastes), Michel St-Pere (guitarras), Per Malmberg (guitarras, bajo y voz), Aleksandr Murenko (batería), Max Velychko (guitarras), Daniel Ilyin (violín eléctrico), Viktor Syrotin (percusión) y Sergi Kovalov (acordeón). También hay varios participantes al canto: Jean Pageau, Marco Glühmann, Bartosz Kossowicz y Olga Rostovska. Los cuadros del arte gráfica de este álbum son de la autoría de Krzysztof Wiśniewski.


Comenzamos nuestro repaso del disco que hoy nos ocupa con la primera parte de la gran suite ‘Omni’, la misma que dura 23 minutos y pico y contiene las secciones ‘Omni Overture’, ‘Storyteller (Part 1)’, ‘Whispers From The Past’, ‘The Spark’, ‘Masterplan’ y ‘Mirror Of Souls’. La fastuosidad frontal con la que se exhibe el primer motif apunta hacia un esplendor explícitamente señorial donde el matrimonio de guitarra y teclados empuja al bloque global a dejarse llevar por su propia agilidad, agilidad marcada por una estilización meticulosa donde confluyen los paradigmas de YES y del PÄR LINDH PROJECT. Una vez calmadas un poco las cosas, el canto de Sinclair anuncia la primera instancia de luminosa ceremoniosidad de la suite: la persistente suntuosidad desciende hacia un oportuno recurso de sutileza donde los aires evocadores del momento pueden ser plasmados de forma convincente. Ya más adelante, tras un breve puente bastante saltarín, el asunto se torna más flotante, impulsando la emergencia de una sección cargada de matices pastorales que se dejan envolver por una atmósfera razonablemente cósmica. Tras todos los diversos despliegues de fulguroso vitalismo que tuvieron lugar, ahora estamos ubicados en un lugar de sosiego contemplativo que se toma su tiempo para preparar el terreno de alzamiento del próximo momento extrovertido, el cual tiene designado un lugar poco antes de la frontera del undécimo minuto para instaurar su mandato expresivo. En medio de esta remodelada exaltación emerge unos de los más hermosos solos de guitarra y de sintetizador de toda la suite; mientras tanto, se nos viene a la memoria SPOCK’S BEARD cuando apreciamos el patrón de los arreglos vocales. Con un desarrollo temático bien delineado, el ensamble se encarga de incorporar algunas ligeras variantes al groove central sin retocar demasiado el swing de base. Dándose una notoria atenuación del swing prevalente en los últimos momentos de la penúltima sección, la última se afianza firmemente en atmósferas cinematográficas donde predomina el romanticismo con comedidos aires bucólicos.

Vamos ahora a ‘Omni Part 2’: dura cerca de 22 ¾ minutos y contiene las cuatro secciones ‘Unchained’, ‘The Cards We Play’, ‘You And I’ y ‘Storyteller (Part 2)’. La primera de ellas comienza con un ambiente calmado que va en perfecta consonancia con el espíritu de la sección final de la Parte 1, aunque pronto se impulsa hacia una suntuosidad propia de una balada progresiva diseñada para exhibir recursos de pasión introspectiva. El masivo preciosismo melódico que otrora marcó al esplendor extrovertido predominante de la Parte 1 es ahora la logística con la que se arma la senda conectiva de las secciones de la Parte 2. En el caso específico de ‘The Cards We Play’, el espíritu expresivo ostenta una aureola aristocrática mientras el esquema instrumental elabora una ingeniería melódica sobria sobre el cual puede el canto explayarse en su propio encanto vulnerable. Más adelante, la inserción de un groove más animado permite la emanación de algunos ornamentos signados por una efímera soltura sofisticada donde el antes mencionado encanto concreta una intensidad cuidadosamente incrementada. Algo hay aquí que nos hace recordar a esos tiempos de TRANSATLANTIC. ‘You And I’ tiene como misión principal la de reforzar por enésima vez los aires solemnes de la Parte 2, mientras que ‘Storyteller (Part 2)’ nos devuelve a la sutileza reflexiva del primer ‘Storyteller’ mientras los fraseos de la guitarra eléctrica operan como evocaciones inmediatas de lo que ha sucedido en esta segunda mitad del disco. El canto de Sinclair está oportunamente acomodado en medio de los ornamentos del violín y las escalas del piano y otros teclados, un recurso estilístico muy eficaz a la hora de resaltar las vibraciones ceremoniosas de este momento. Todo esto fue lo que se nos brindó en “Omni”, un disco que refuerza eficientemente el lugar de KARFAGEN como entidad sobresaliente dentro del prog sinfónico de nuestro días. Muy recomendable.


Muestras de “Omni”.-  

Tuesday, June 24, 2025

Los contrastes fraternalmente progresivos entre JORDSJØ y BREIDABLIK



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
Hoy tenemos en nuestras manos un disco muy especial: se trata de “Kontraster”, un trabajo fonográfico repartido entre las dos bandas noruegas JORDSJØ y BREIDABLIK. Ellas tienen en común que tienen 10 años de trayectoria y también que el multi-instrumentista y compositor Hakon Oftung forma parte de ambas. Grabar una misma suite en sus propios estilos es la manera de celebrar la labor de tantos años que ambos ensambles han estado desarrollando en paralelo. La formación de JORDSJØ está conformada por Oftung [voz, guitarras, flauta y teclados] y Kristian Frøland [batería y percusión]; la de BREIDABLIK es el trío de Oftung [guitarras y flauta], Morten Birkeland Nielsen [sintetizadores y mellotrón] y Trond Gjellum [batería]. Conocemos a JORDSJØ por ser una de las bandas señeras de la escena retro-progresiva noruega desde su fundación en el año 2024. Por su parte, BREIDABLIK se centra en una propuesta de prog electrónico desde el año 2012, cuando Morten Birkeland Nielsen inició esta entidad como proyecto solista que, de a pocos, se convirtió en un grupo de hecho y derecho. El disco que hoy nos convoca fue publicado por Apollon Records tanto en CD como en vinilo el 25 de abril último, marcando la segunda colaboración entre ambos colectivos; cabe recordar que en el año 2016 se publicó Songs From The Northern Wasteland”, álbum que signó una cercanía definitiva para estas dos bandas tan dispares. De hecho, no tardó mucho tiempo Oftung en convertirse en colaborador permanente de Nielsen: fue en el año 2020, que fue el tiempo de la publicación de “Omicron”. Pero bueno, hoy es el día de “Kontraster”.
 
La suite de JORDJØ dura poco más de 19 ¾ minutos y comienza con una serenidad etérea y expectante apoyada en un reiterado motif tentativo que se articula con las gentiles confluencias entre piano eléctrico, guitarra acústica y percusión. Una vez instalado el primer cuerpo central, se nos revela un dinamismo creciente en base a la actuación de la instrumentación íntegra. La flauta y la guitarra alternan turnos en el desarrollo de la ilación de pasajes instrumentales, los mismos que van de lo grácil a lo tenso, y allí a unos matices bucólicos; éstos se proyectan hacia un clima de sobria contemplación. Alrededor de la frontera del séptimo minuto, un puente cósmico gesta una inquietud arcana y densa antes de que emerja otro puente que se enfila por una senda pastoral. Poco a poco, el ensamble vuelve a integrarse y se dedica a realizar un sólido viaje progresivo: los instrumentos hacen fluir sus aportes dentro de un entramado prog-sinfónico que, de a pocos, va ganando en suntuosidad dentro de los usuales cánones de la estilización melódica sinfónica. El continuo afianzamiento de la luminosidad sónica se eleva con un despliegue bien calculado de los matices inherentes al núcleo temático del momento. Las numerosas florituras de la flauta se apoderan del núcleo central orientado hacia conexiones con ÄNGLAGÅRD antes de que la guitarra corte la acción y motive una sección posterior donde predomina un talante bastante estilizado. Ahora ésta es la que dirige el nuevo centro melódico, el cual se sitúa en una cruza entre ELOY y GENESIS: con esta variante, el culmen expresivo de esta primera suite conquista su cénit decisivo. Un poco más adelante, con la guitarra acústica situándose en un papel rector mientras las percusiones tantean lo que será el groove final, el ensamble completa el retorno decisivo a la solemnidad aristocrática que ya advertimos en alguna sección precedente. El momento final está muy bien perfilado dentro de un lirismo envolvente y solemne: la clausura perfecta para este hermoso viaje musical.
 
La suite de BREIDABLIK ocupa un espacio de casi 20 ¼ minutos, y básicamente, la razón por la que se explaya un poco más es porque enfatiza los ambientes y bases armónicas de la composición protagónica. Y cuando lo hace, aplica una lógica musical propia de los TANGERINE DREAM de la fase 1974-76 más algunos toques del KLAUS SCHULZE de la etapa 1975-78. O sea, tenemos aquí vanguardia electrónica al estilo de la así llamada escuela de Berlín (o krautrock electrónico). Tras unos breves instantes iniciales de un vendaval cósmico, entra a tallar un armazón de secuencias armónicas sintetizadas y orquestaciones de mellotrón. Mientras avanza el desarrollo multitemático, irrumpen oníricos solos de guitarra y de flauta mientras los ornamentos de sintetizadores. Poco antes de llegar a la frontera del séptimo minuto, la guitarra pasa al frente con sus limpios fraseos que emanan unos efluvios amables. En una siguiente sección, tras un minúsculo puente flotante, emerge un ejercicio de calidez cibernética cuyos bien definidos índices melódicos permiten a la batería intervenir con el fin de reforzar la nueva sinergia de sintetizadores, guitarra y flauta. La sección epilogar se enfila al área de la serenidad contemplativa mientras deja entrar algunos aires de nocturnidad. En fin, ha resultado bastante interesante indagar en esta colaboración de JORDSJØ y BREIDABLIK, dos entidades musicales noruegas que, desde sus respectivas provincias estéticas, brindan nuevos bríos al ideal progresivo. “Kontraster” es bastante recomendable para cualquier buena fonoteca actualizada de rock artístico.
 
 
Las dos suites de “Kontraster”.-
La de JORDSJØ: https://jordsjo.bandcamp.com/track/kontraster

Sunday, June 22, 2025

Tercera etapa del reino musical de GASPARD



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy echamos un vistazo un poco tardío al tercer trabajo fonográfico del grupo franco-canadiense GASPARD: el disco en cuestión se llama “Le Roi Farfisa” y fue publicado el 4 de octubre del pasado año 2024. El colectivo conformado por Charles Le Pailleur [bajo y contrabajo], Olivier Turbide [batería, percusión y sintetizadores], William Parent-Senez [guitarras] y Romain Paquette [guitarras] ha decidido darle un giro más aguerrido y oscurantista a su propuesta híbrida de brutal prog, avant-prog y metal experimental con ocasionales tintes psicodélicos de base stoner. Tras sorprendernos gratamente con sus dos obras anteriores “La Forêt De Gaspard” y “Vertiges” (de 2019 y 2021, respectivamente), ahora con “Le Roi Farfisa”, la gente de GASPARD nos brinda un disco conceptual sobre la dimensión ficticia del título, un ámbito maldito habitado por gárgolas, vampiros y quimeras. El Rey Farfisa es el monarca, un ser impredecible y caprichoso que invita a sus súbditos a organizar fiestas, tiene encuentros con dignatarios infernales y devora desmedidamente banquetes inmundos. Al fin y al cabo, se trata de una alegoría simbolista-surrealista de la senil y decadente aristocracia con su banal vanidad que marca sus patéticos ideales existenciales. La cautivadora portada de Eric Braun evoca muy eficazmente esta imaginería. El material contenido en este nuevo disco fue registrado en el Studio Madame Wood en enero de 2024, siendo posteriormente masterizado por Harris Newman en el el estudio Grey Market Mastering. Repasemos ahora el material mismo.


Abre el disco ‘Chiroptera’, cuyo inicial empuje cuasi-tribal es manejado con refinadas vibraciones grisáceas de corte psicodélico. La presencia de elementos punk-jazz en el swing armado por la dupla rítmica permite a los guitarreos soltarse confiadamente en sus vuelos punzantes mientras el ensamble integral disfruta de su propia garra solemne. La subsiguiente díada de ‘Le Bal Des Réflexions’ y ‘L’infinie Collection De Masques Du Monstre Complexe’ permite al cuarteto explorar sus caminos de expresión con creciente intensidad. El primero de estos temas mencionados se arroja a un arquitectura rockera machacona que coquetea ligeramente con el stoner mientras recibe algunas herencias simultáneas de HAWKWIND y GURU GURU. Más exactamente, el vigor arrollador de los primeros y la musculatura señorial de los segundos. Mientras va avanzando, la majestuosidad sónica de la pieza va acrecentando su delirio estructural en rumbo hacia el drástico golpe final (y las ovaciones humorísticas). En cuanto al otro tema mencionado, que es el más extenso del disco con sus cerca de 7 minutos de duración, se trata de otro ejercicio de sofisticada grandilocuencia que se encuadra dentro de un refulgente poderío. Lo que suena aquí sigue resguardando recursos de space-rock progresivo, siendo así que el desarrollo musical se enriquece con factores del prog-metal y del jazz-rock. La función principal de ‘Symptômes De Terreur’ es la de situar algunas instancias de relativa sutileza en medio de un nuevo despliegue de aristocráticas ebulliciones rockeras a las que ya nos estamos acostumbrando. Las secciones más calmadas muestran unas texturas renovadoras en los entramados de los guitarreos; las más agitadas se emparentan con el legado de DON CABALLERO. ‘Entre Les Murs’ se articula prioritariamente sobre un esquema rítmico razonablemente lento, lo cual sirve al grupo para explorar y delinear cromatismos misteriosos y más densos que los desplegados en cualquiera de los temas precedentes. Un pasaje tensamente oscurantista plantea un clima inquietante desde donde se organiza el extenso epílogo. 
 
‘Le Chant Des Guillotines’ emerge desde los postreros desasosiegos cósmicos del tema anterior para enfilarse por una rotunda confluencia de brutal prog,  avant-metal y space-rock. Con apabullantes grooves y llamaradas sónicas bien enraizadas en una ingeniería intrépida, la fuerza colectiva, tan ácida como es, se erige como un fulgor extraterrenal que proclama su propia neurosis. Cuando llega el turno de ‘Dix Heures Trente-Quatre’ recibe gustosamente los ecos de los temas #3 y #4 mientras refuerza el uso de ciertos recursos math-rockeros en algunas instancias de la ilación multi-temática. La labor de la batería resulta especialmente significativa a la hora de sustentar el enclave orgánico en la confluencia de los otros instrumentos, así como en la necesidad de mantener consistentemente las expansiones luminosas en curso. El cierre del repertorio llega de la mano de ‘Corridor (Déjà-vu)’. Esta pieza se inicia con un talante solemne para poco después virar hacia una señorial mezcla de lo visceral y lo misterioso. Es como una caminata que sigue diversas cadencias mientras surca sendas dentro de un enclave cuánticamente post-metalero. Es encomiable la lucidez con la que el garbo colectivo maneja los incansables vericuetos que se van trazando dentro de un mapa complejo. Como apreciación final, “Le Roi Farfisa”, se trata de un estupendo manifiesto de lo que la banda GASPARD ha forjado dentro de ésta, su tercera etapa de reino musical. La manera tan potente y elegante que este cuarteto de Montreal es capaz de elaborar como eje central de su sonido particular hace de este disco un ítem bastante destacado dentro del rock experimental de 2025 a nivel mundial. Totalmente recomendable. 
 
 
Muestras de “Le Roi Farfisa”.-
Le Bal Des Réflexions: https://gaspardrockfantastique.bandcamp.com/track/le-bal-des-r-flexions
L’infinie Collection De Masques Du Monstre Complexe: https://gaspardrockfantastique.bandcamp.com/track/linfinie-collection-de-masques-du-monstre-complexe
Dix Heures Trente-Quatre: https://gaspardrockfantastique.bandcamp.com/track/dix-heures-trente-quatre

Thursday, June 19, 2025

STEPHAN THELEN: música para la colisión y la comunión

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy presentamos un disco muy especial, el nuevo álbum solista del maestro suizo STEPHAN THELEN que se titula “Worlds In Collision” y fue publicado a fines del pasado mes de mayo, tanto en CD como en doble vinilo (colores turquesa marmoleado y naranja transparente). El sello a cargo de la publicación es RareNoise Records. Aunque es un disco firmado como solista, la presencia de un ensamble de ilustres colaboradores resulta muy relevante para la concreción de la estrategia sónica. En efecto, THELEN aparece tocando la guitarra, el bajo, el piano eléctrico, el órgano, la marimba, el santur, la percusión, diversos efectos y programaciones. Pero también están sus amigos y colegas David Torn (guitarra eléctrica y live looping), Jon Durant (guitarras eléctrica y acústica, guitarra sin trastes, cloud guitar y VCS3 guitar), Fabio Anile (voces manipuladas, sintetizador Roland D 50, samples, pianos echoplex y glitch pianos, efectos electrónicos y percusión) y Yogev Gabay (batería). Además, hay participaciones ocasionales de los bajistas Ian Allison y Tim Harries, y de Manuel Pasquinelli a la percusión. Un ensamble genuinamente cosmopolita. La gestación de “Worlds In Collision” se inició en julio de 2023 y las sesiones de grabación se iniciaron unos meses después. Las partes de batería aportadas por Yogev Gabay y las de guitarra de David Torn fueron registradas en el Powerplay Studio A. THELEN es el autor de todo el material con excepción de un tema, que fue coescrito con el músico alemán J. Peter Schwalm. El buen STEPHAN se hizo cargo de las labores de edición y mezcla de los temas aquí contenidos, mientras que Alexandr Vatagin realizó la masterización. Infatigable como es, en estos dos últimos años, THELEN completó el segundo álbum del FRACTAL SEXTET además de realizar la trilogía de “Rothko Spaces”, un concepto musical centrado en la obra pictórica del torturado maestro letón-estadounidense MARK ROTHKO que se concretó con las participaciones de Markus Reuter y los anteriormente mencionados Durant y Torn. Repasemos ahora los detalles de “Worlds In Collision”.
 

Durando casi 6 ½ minutos, ‘Palermo’ abre el repertorio del álbum con un convincente despliegue de sobrio fulgor sobre una consistente cadencia rítmica en 6/8. Ésta sabe organizar sus agitaciones sólidamente tribales sin afectar a su meticulosa arquitectura; de esta manera, los demás instrumentos arman su maraña colectiva con suma naturalidad. ‘Bullet Train’ sigue a continuación para transportar sus propias vibraciones etéreas en clave ambient sobre un entusiasta swing de tenor space-rockero. Siendo así que el lenguaje fusionesco incorpora algunos colores dentro del elegante paisaje grupal que se va desarrollando, la ingeniería musical cuenta con suficientes recursos para implementar algunas variantes musculares al motif central. El tercer tema del disco es el que justamente le da título. ‘Worlds In Collision’ se orienta por una zona muy cercana al híbrido de psicodelia cibernética y math-rock progresivo al cual es tan adepto SONAR, a la vez que mantiene un dinamismo space-rockero conectado con el rock experimental contemporáneo. En varias instancias, los juegos de síncopas armados por las percusiones humanas y programadas delinean el empuje del ensamble global. Extroversión majestuosa con un enfoque preclaramente modernista, he aquí la clave principal de este tema en particular. Tomando a ‘Bullet Train’ y ‘Worlds In Collision’ como una secuencia específica, podemos decir que establece una renovadora exuberancia tras el aura gentil elaborada en el tema de apertura: por esta razón, los consideramos como dos momentos culminantes del disco que hoy nos ocupa. Las dos siguientes piezas duran 8 ¾ minutos cada una: ‘Atomic’ y ‘Kosmonaut’. El enfoque musical plasmado en ‘Atomic’ se enfila por una remodelación más explícitamente vitalista de la espiritualidad extrovertida que ya notamos en el tema #2. El enclave electrónico es mucho más absorbente, eso sí, lo cual significa que el factor mecanizado y las atmósferas cósmicas son elaboradas con pulcra meticulosidad.
 
  

En lo referente a ‘Kosmonaut’, se trata de una pieza con un esquema rítmico más intenso y un enfoque más filudo en la definición y el delineamiento de su parafernalia electrónica. El aspecto ambient es menos pronunciado que en el tema anterior, por lo que centra la mayor dosis de sus energías expresivas en el reforzamiento de estrategias cibernéticas bajo una atmósfera de plena agilidad space-rockera. El nervio de la batería hace uso de una soltura comedida que resulta suficientemente eficaz para realzar el elemento rockero; mientras tanto, el flujo de samples, solos de sintetizador y  guitarras filtradas transcurre llamativamente sin perder de vista el núcleo del jam en curso. La lóbregamente arcana coda cierra el asunto de una manera sugerente, completando lo que resuena como un nuevo cénit del disco. Cuando llega el turno de ‘Voices From The Ether’, el ensamble regresa a su faceta más propiamente sutil, volviendo a realizar un cálido ejercicio de encantamientos progresivos donde se fusionan el prog ambient y el jazz-rock contemporáneo. El evocador lirismo de la composición básica se nutre eficientemente de los refinados aportes brindados por los instrumentos actuantes. El señorío reinante goza de un crescendo exquisito hasta el ceremonioso golpe final. La pieza apropiadamente titulada ‘Coda’ se encarga de cerrar el repertorio oficial de “Worlds In Collision”: lo hace con una expresión de vibraciones introspectivas en base a un minimalismo electrónico cercano a lo que hacían TANGERINE DREAM y CLUSTER a fines de los 70. Pero aún hay más: el bonus track consistente en la remezcla que hizo Bill Laswell de ‘Atomic’, la cual intensifica el elemento electrónico con punzante acidez. La sistematicidad mecánica de la versión original  se torna un poco más machacona. Todo esto fue lo que se nos brindó en “Worlds In Collision” desde los cuarteles del maestro STEPHAN THELEN en compañía de sus excelsos colegas del momento, una obra muy inspirada que evoca colisiones de comuniones perfectamente organizadas. He aquí una estupenda muestra de música progresiva dinámica y moderna que fortalece por enésima vez el renombre de este maestro suizo dentro de la vanguardia rockera de nuestros tiempos. ¡¡Totalmente recomendable!!
 
 
Muestras de “Worlds In Collision”.-
Bullet Train: https://stephanthelen.bandcamp.com/track/bullet-train
Worlds In Collision: https://stephanthelen.bandcamp.com/track/worlds-in-collision
Kosmonaut: https://stephanthelen.bandcamp.com/track/kosmonaut

Monday, June 16, 2025

GÖSTA BERLINGS SAGA, ahora y siempre



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Buenas noticias desde la escena progresiva sueca: se acaba de publicar “Forever Now”, el nuevo trabajo fonográfico de GÖSTA BERLINGS SAGA. Más exactamente, este disco salió al mercado el 6 de junio pasado por vía del sello Pelagic Records, tanto en CD como en vinilo naranja. Habiendo funcionado como cuarteto desde sus primeros pasos a inicios del milenio, la alineación actual de GÖSTA BERLINGS SAGA consta del quinteto de Rasmus Booberg [guitarras], David Lundberg [teclados], Gabriel Tapper [bajo], Alexander Skepp [batería y percusión] y Jesper Skarin [percusión]. Son cinco los años que han pasado desde la publicación de “Konkret Musik”, su anterior disco de larga duración, pero poco antes del nuevo disco que hoy nos convoca, el grupo publicó el largo tema ‘Fragment I’ (dura 19 minutos y pico) en su blog de Bandcamp. Ciñéndonos al material contenido en “Forever Now”, e lgrupo se encargó colectivamente de organizar el proceso de grabación (en varias sesiones entre agosto de 2020 y noviembre de 2024) y realizar las ulteriores labores de mezcla. El quinteto contó con la ocasional colaboración de Isak Hedtjarn al clarinete y el saxofón. Alar Suurna se hizo cargo de la masterización en el estudio Shortlist Analogue. Antes de centrar nuestra atención en el disco protagonista de hoy, repasamos la larga pieza ‘Fragment I’ mencionada más arriba. No es tanto una suite como un extenso jam a medio tiempo que se ubica dentro de las coordenadas del heavy prog con inquietudes space-rockeras mientras la dupla de batería y percusión se encarga de insuflar ciertos aires avant-jazzeros al asunto. Es como si una idea perdida de los OZRIC TENTACLES de inicios de los 90 hubiese sido redescubierta y modificada por la gente de JAGA JAZZIST para darle un aura más sobria y, a partir de allí, el colectivo de la FIRE! ORCHESTRA le hubiese dado su toque final bajo la inspiración de los SUN RA de fines de los 70. La instancia inaugural de parsimoniosas capas adustas de sintetizador no nos avisa sobre el peculiar despliegue de densa luminosidad que está a punto de abordarnos y captar nuestra atención. De por sí, este ítem brinda algo novedoso al cosmos musical de GÖSTA BERLINGS SAGA, tal vez un indicio de nuevas orientaciones estilísticas para el futuro próximo. ¿Qué será lo que ocurra en adelante? Como sea, ahora es el momento de repasar los detalles de “Forever Now”. 


‘Full Release’ es la pieza encargada de poner el rumbo inicial a las cosas al modo de una fanfarria cósmica que se sitúa muy cerca de una cruza entre el paradigma de los TANGERINE DREAM de la etapa 1973-75 y el patrón de los KING CRIMSON de 1974. Teniendo como tiene un carácter de anuncio, su fastuosa aureola de expectativa conforma un motif poderoso por sí mismo. ‘Through The Arches’ se abre paso de inmediato para exhibir una excelente muestra de robustez prog-psicodélica donde opera una muy eficaz complementación entre el space-rock y el jazz-rock. Las vibraciones patentemente entusiastas del exultante groove (en clave de motorik muchas veces) hacen que la ilación de los diversos jams en curso pueda lucir su fulgor inherente mientras la fuerza de carácter colectiva instaura un vitalismo llamativo y aristocrático. La miniatura ‘Arrangements’ exhibe un evocador espíritu cinematográfico donde predomina lo melancólico. De este modo, emerge el cuarto tema, que es justamente el que le da título y también es el más largo del mismo con sus cerca de 8 ¼ minutos de duración. ‘Forever Now’ comienza con un talante grisáceo que roza con lo lúgubre, algo que nos remite en parte al legado de los dos primeros álbumes de la banda. Mientras se va instalando el armazón de batería y percusión, la banda articula el desarrollo de la pieza dentro de un bien delineado diagrama de sonoridades solemnes que parecen guiarse hacia un área de dulce nostalgia; más adelante, el asunto vira a una especie de misteriosa ansiedad con ribetes oscurantistas. La persistencia de una secuencia sintetizada baja y los ornamentos del mellotrón sirven de cobertura para la muscular intervención de un bajo sumamente distorsionado a mitad de camino, una intervención que guía el surgimiento de esa sección misteriosa a la que aludimos antes. El crescendo de majestuosidad refuerza continuamente los cimientos y la orientación del motif final dentro de un enclave sonoro donde se asocian luminiscencia y zozobra emocional. Un gran tema que se erige como un cénit decisivo del álbum y, de paso, pone en claro cómo funciona la esencia fundamental del bloque grupal en este momento actual de su trayectoria. ‘The Sprig And The Birch’ y ‘Fragment II’ son otros dos temas cortos que expanden la estrategia musical de la banda. El primero de ellos se centra en una figura de piano bastante introspectiva que se explaya sobre un trasfondo etéreo marcado por una onírica nocturnidad.


El caso de ‘Fragment II’ es totalmente diferente: se trata de un viaje al jolgorio étnico remodelado a través del filtro del space-rock con elementos cibernéticos que parecen asentar conexiones estilísticas con la línea de trabajo de JAGA JAZZIST. El terreno está preparado para el inmediato arribo de ‘Ascension’, una pieza compuesta para perpetuar y capitalizar los aires de festiva agitación que signaron a la pieza precedente, pero esta vez, dejando atrás lo étnico y concentrándose en la logística típica del discurso prog-psicodélico. De esta manera, los recursos saltarines diseñados para la ocasión pueden dinamizarse dentro de una musicalidad ígnea que está marcada por una convincente contundencia. Imaginemos que los HAWKWIND de 1975 dejaron atrás una idea anotada en un papel encontrado por los OZRIC TENTACLES de 1989 para que, al final, los GÖSTA BERLINGS SAGA de “Glue Works” y “Sersephone” le dieran su toque definitivo. ‘Dog Years’ comienza con unos calmados fraseos de guitarra que no tardan mucho en abrir paso a agitaciones fraguadas con una señorial inquietud que algo tienen de misteriosas. Un poco más adelante, las cosas se enfilan por un vitalismo contundente cuyos traqueteos sistemáticos se insertan dentro de una inteligente arquitectura donde confluyen lo tenso del heavy prog y lo vaporoso del jazz-prog. Tampoco faltan algunos ribetes grisáceos que coquetean levemente con lo lóbrego. ‘Make Of Your Heart A Stone’ es una pieza meditabunda que se apoya inicialmente en el mando de una guitarra acústica que despliega un aura reflexiva mientras se deja acompañar por los discretos acordes de un piano eléctrico. A mitad de camino, éste se queda solo, asumiendo la misión de elevar la nocturnidad hacia una dimensión celestial mientras se asocia con capas envolventes de sintetizador. Todo culmina con ‘Ceremonial’, otro tema que nos remite a esa época de los álbumes tercero al cuarto de GBS. Es como si las vibraciones melancólicas de la penúltima pieza hubiese asumido una robustez renovadora gracias a la activación de un groove jazz-rockero en medio de una suntuosidad mesurada. La fastuosidad evocadora inherente al sencillo motif central está adecuadamente ornamentado por los músicos mientras lo refuerzan consistentemente, siendo así que en sus instancias finales se remodela con un esquema rítmico intenso y machacón; mientras tanto, los teclados van gestando variantes al motif central, lo cual realza eficientemente la aureola aristocrática del esquema musical en curso. Muy sugerente fin de álbum que tiende puentes entre revisionismo y modernismo.   

 

Todo esto fue lo que se nos brindó en “Forever Now”, la nueva obra fonográfica de los veteranos GÖSTA BERLINGS SAGA, quienes logran confirmar por enésima vez su posicionamiento privilegiado dentro de la élite progresiva sueca del siglo XXI. Desde sus primeros pasos y a través de todos los cambios acaecidos hasta el presente año 2025, GÖSTA BERLINGS SAGA ha prevalecido como una de las expresiones más augustas de la creatividad progresiva dentro de la avanzada rockera sueca del nuevo milenio: siempre lo fue y, según lo que se advierte en el disco de ahora, siempre lo será. De lo mejor del año. 


Muestras de “Forever Now”.- 

Friday, June 13, 2025

La persistente trascendencia de los argentinos AKENATHON

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hay novedades bastante interesantes en la escena progresiva argentina del momento: el grupo AKENATHON ha sacado al mercado su nuevo disco “Crónicas Intrascendentes”. Se trata de un trabajo que ha tenido un tiempo largo de gestación: con una primera mitad terminada en el año 2024, ahora, en el ecuador del 2025, está completo. Por vía del sello connacional Viajero Inmóvil, este trabajo está disponible en edición digital; sucede por cinco años a “Como Hormigas”, el último realizado con la alineación histórica de trío. Convertido ahora en cuarteto, AKENATHON tiene la siguiente formación: Guillermo Rocca [batería y voz], Fernando Chávez González [bajo y sintetizador], Marcela Crusat [teclados y voz] y Aníbal Acuaro [guitarras y voz]. El material contenido en “Crónicas Intrascendentes” fue grabado en los Estudios Picciola de La Plata, entre diciembre del año 2023 y diciembre del siguiente año, estando los ulteriores procesos de mezcla y masterización en manos de Matías Paya González en los Estudios Argot. El cuarteto en bloque se acredita la autoría de los siete temas del repertorio. La intención central del disco consiste en narrar historias de íntima significación humana, una focalización en las vidas concretas de las personas, a contrapelo del frenesí impersonal de “un mundo atiborrado de información, superpoblado de noticias urgentes, masificado y absurdamente globalizado, un mundo lleno de mensajes que nublan los sentidos y anestesian los sentimientos”, en propias palabras del grupo. Laura Boassi se encargó del arte gráfica. Bueno, repasemos ahora los detalles estrictamente musicales de este nuevo disco de AKENATHON.
 
Durando casi 8 minutos, 
Queja De Un Bufón es la pieza encargada de abrir el disco y lo hace con una aureola muy distinguida. Con unas solemnes escalas de teclado se inicia el camino de una canción poderosamente emotiva donde se afilian drama y sarcasmo. Teniendo predominancia un esquema rítmico a medio tiempo, hay espacios ocasionales para algunas variantes más intensas; también cabe destacar un fabuloso solo de guitarra que hace gala de una electrizada fogosidad, además del excelso solo de sintetizador que le sigue. Acto seguido emerge ‘Irresistible Tic’, nueva versión del segundo tema del disco anterior: es una pieza enérgica que pone sus cartas de sofisticación jazz- progresiva sobre la mesa desde el punto de arranque. En su masivo despliegue de refinado vitalismo, las elegantes vibraciones melódicas de la guitarra y la furiosa algarabía de la batería se dejan complementar por las virguerías del bajo. Un breve interludio más calmado incorpora un oportuno recurso de variedad al asunto. ¡Ya nos ofrecen AKENATHON un cénit de ésta, su nueva obra! ‘Emma Va Al Kiosco’ comienza con un nervio rabioso que se deja moldear por una estilizada mezcla de jazz-prog y blues-rock.* Mientras va avanzando el cuerpo central, aparecen ornamentos ácidos propios del discurso del rock psicodélico, lo cual ayuda mucho a incrementar la garra expresiva. El macizo epílogo instrumental, apoyado sobre unas punzantes escalas de bajo, se encamina por un señorial delirio donde se fusionan lo Spinettiano y lo Crimsoniano: algo realmente grandioso que se sostiene sobre una ingeniería rítmica razonablemente compleja. Tiene algo de siniestro, añádase de paso, y además, encarna otro culmen del disco que hoy nos ocupa. ‘El Increíble Mundo De Los Hermanos Morosky regresa de lleno al área del jazz-prog, esta vez con un enfoque más cadencioso.** Hay una oportunidad de disfrutar de un evocador solo de piano en medio del bien definido lirismo de la pieza, el cual se enraíza decisivamente en el armado del entramado grupal. Hasta el momento, hemos apreciado más de 24 minutos y medio de excelente rock progresivo ecléctico y aún queda más por degustar placenteramente.

Cuando llega el turno de ‘Vincent Y Los Cuervos’, regresamos al nervio señorial de la canción inaugural con una mayor dosis de nervio tanto en la expresividad nuclear del ensamble como en la vivacidad de la ingeniería rítmica. Se siente algo de neurosis en el esquema musical de esta canción, pero más neurosis aún se desarrolla en el tema siguiente, el cual se titula ‘La Muerte Del Zapatero (Nostalgia De Una Mediasuela)’. Su prestancia grandilocuente basada en la confluencia de psicodelia tenebrosa y prog sinfónico rutilante despliega un vitalismo eficaz y versátil. El bajo cuenta con varios momentos de protagonismo en medio de las contundentes agitaciones sónicas que marcan la integral labor del ensamble. ‘Huellas’ ocupa un espacio de poco más de 8 ¼ minutos: es el tema más largo del disco y justamente es también el que lo cierra. Tras un prólogo marcado por una confluencia de percusiones exóticas y capas minimalistas de sintetizador, se instala un aristocrático enclave jazz-rockero donde los vuelos de la guitarra y los comedidos arreglos armónicos del bajo impulsan los índices temáticos del solemne jam en curso. En el último tercio, los recursos de majestuosidad se incrementan para remodelar la fastuosidad esencial de la pieza, lo cual perfila definitivamente un cierre grandilocuente para un álbum ciertamente grande. Impactante, incandescente, y sobre todo, trascendente es lo que nos han brindado AKENATHON con este nuevo disco. Lo que se muestra en el catálogo contenido en “Crónicas Intrascendentes” es una certificación inapelable de que el ahora cuarteto se mantiene en la cresta de la ola de la música progresiva argentina del nuevo milenio. ¡¡¡¡Totalmente recomendable!!!! (Un signo de admiración por cada integrante.)
 

Muestras de “Crónicas Intrascendentes”.-


* Esta pieza tiene una letra que evoca metafóricamente los miedos inculcados por la larga dictadura militar y sus terrorismo de estado sobre la conciencia de la sociedad civil argentina “y esa nena de 12 años que se atreve a dar el paso a pesar de lo que le dicen”, según testimonia el propio Aníbal Acuaro.

** Este canción está inspirada principalmente en la película El imaginario mundo del Dr. Parnassus de TERRY GILLIAM, pero también se conecta con el álbum del grupo 2112 “El Maravilloso Circo De Los Hermanos Lombardi”. También añadimos que la canción que inició el álbum, Queja De Un Bufón’, está temáticamente vinculado a ‘El Rey’, uno de los temas del homónimo álbum debut de JINETES NEGROS.

Wednesday, June 11, 2025

La mística como impulso musical para el trío multinacional CHAKRA VIMANA

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy presentamos al trío multinacional CHAKRA VIMANA, el cual está conformado por Shane Beck [voz], Mark Cook [Warr Guitars con y sin trastes, guitarra, bajo sin trastes, teclados, sitar eléctrico, percusión y efectos electrónicos] y Santtu Laakso [sintetizadores, bajo y voz]: dos estadounidenses y un finlandés. “Feed My Soul” es el nombre del primer disco creado por este colectivo, el cual fue lanzado al mercado el pasado 23 de mayo por el sello Tonzonen Records, estando Cargo Records a cargo de su distribución. El material contenido en “Feed My Soul” fue registrado en varias sesiones individuales realizadas en California, Texas y Finlandia a lo largo del año 2024. El sintetista canadiense Steven Leak colaboró con algunos soundscapes. La labor de masterización estuvo en manos de Jonathan Segel. Conocemos a Cook por HERD OF INSTINCT, GAYLE ELLETT & THE ELECTROMAGS, THE FOREVER MOMENT, LIQUID SOUND COMPANY, SPOKE OF SHADOWS, etc. Beck es un literato con inquietudes musicales que tiene membrecías en ASTRAL MAGIC, TALKING CLOUDS y otros proyectos. En el primero de ellos también está Laakso, quien también tiene un currículum amplio en las áreas del thrash metal (EXITUS) y el space-rock (DARK SUN). La propuesta musical de CHAKRA VIMANA se orienta principalmente por las vertientes de la psicodelia progresiva y el ambient con varios elementos de fusión contemporánea y jazz-rock: “Feed My Soul” es una obra focalizada en apreciaciones místicas sobre el mundo interior del ser humano y el vínculo de éste con el mundo exterior. Pasemos ahora a los detalles estrictamente musicales del disco que hoy nos ocupa. 


El repertorio de “Feed My Soul” se inicia con ‘I Anoint Thee’, un tema bien enmarcado dentro del estándar del ambient progresivo con un fuerte entramado electrónico y una cualidad flotante muy propia de la fusión contemporánea. El uso destacado del sitar eléctrico y el tenor tribal de las percusiones programadas aseguran la presencia  de vibraciones telúricas en medio del evidente despliegue modernista. El tema que sigue a continuación se titula ‘Oblivious’ y dura cerca de 11 minutos: a la sazón, el más extenso del disco que hoy nos ocupa. Aquí tenemos una pieza bastante animada que se centra en el paradigma del space-rock progresivo con un toque  extra de estilización. El enfoque patentemente sofisticado de los guitarreos y la ágil labor del bajo se combinan muy bien con los ornamentos cósmicos de los sintetizadores y los diversos samples que van surgiendo a lo largo del camino. Algo muy a lo HAWKWIND con los OZRIC TENTACLES tempranos. Poco antes de llegar a la frontera del quinto minuto, el esquema musical vira hacia algo más solemne, lo cual significa que el bloque sonoro se torna más sofisticado, y además de eso, también más muscular. La nueva sección emergente se solidifica con un vigor más denso y un acento más pesado. La sección epilogar regresa al terreno del ambient para abrir campo a la recitación. ‘Time To Sigh’ realiza una grácil combinación de prog y jazz-rock dentro de un cálido enclave espacial. Hay un cercano parentesco con el espíritu del tema inaugural, pero su esquema de trabajo es más fulguroso, abierto a colores genuinamente extrovertidos. ‘Striving To Connect’ es el segundo tema más largo del repertorio con su espacio de 9 ¾ minutos. Siguiendo la senda de la pieza anterior, su talante es un poco más otoñal, portando una soltura razonablemente vivaz mientras la base armónica exhibe índices evocadores. La articulación del entramado instrumental es compacta y fluida, haciendo gala de una fuerza de carácter contenida a fin de resaltar el motif mismo. Hay un encanto especial en la etérea altivez de los pasajes más directamente cósmicos. 
 
Cuando llega el turno de ‘Do You Listen To The Wind?’, el ensamble se dispone a crear un espacio intermedio entre los aspectos más extrovertidos y los más evocadores de lo que ha venido haciendo hasta ahora. De paso, explora nuevos recursos de sofisticación progresiva mientras gestiona la ilación multi-temática. El fastuoso epílogo brinda un destello expresionista muy revelador que, de alguna manera, muestra al ensamble estableciendo simultáneas cercanías estilísticas con HERD OF INSTINCT y con bandas como VESPERO y MAAT LANDER. En general, se evidencia en esta pieza un despliegue muy peculiar de riqueza musical. La sexta pieza del álbum es la que justamente le da título. ‘Feed My Soul’ se enfoca en un swing de talante fusionesco para elaborar atmósferas envolventes; una vez más, se abre campo a la expansión de masivas sonoridades electrónicas dentro de un gentil encuadre space-rockero.  Una mención especial va para el hermoso solo de guitarra que emerge a mitad del camino. Todavía queda el bonus track ‘Waving At The Stars’, un sobrio viaje marcado por un embrujo ensoñador sobre los cimientos de un exótico ritmo programado. Los aires jazzeros del bajo y los vuelos Frippianos de la guitarra se hermanan muy fluidamente. Toda esta fue la experiencia de “Feed My Soul”, el disco de debut del trío multinacional CHAKRA VIMANA. Tratándose de una muestra tan inspirada de orfebrería sónica con un talante progresivo contemporáneo, esperamos que no se trate de su única obra. Muy recomendable. 
 
 
Muestras de “Feed My Soul”.-

Sunday, June 08, 2025

Plenitud del ensamble italiano DAAL para el año 2025



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy se da la ocasión de presentar “Decoding The Emptiness”, el nuevo trabajo fonográfico del otrora dúo italiano DAAL y ahora cuarteto compuesto de Alfio Costa [pianos clásico y eléctrico Fender Rhodes, órgano Hammond, sintetizadores Moog, Roli Seaboard, mellotrón y otros sintetizadores], Davide Guidoni [batería, percusiones, samples y efectos de sonido], Ettori Salati [guitarras] y Bobo Aiolfi [bajos]. Como siempre, Guidoni y Costa son los autores del material contenido en este nuevo álbum. También fueron ellos quienes fungieron de productores del disco que hoy nos ocupa, habiendo sido el material contenido en él grabado en el Morgana Studio de Calcio (Bérgamo) entre enero y octubre del año 2024. Las partes de batería fueron grabados en el estudio romano Elefante Bianco en marzo de ese mismo año. El ulterior proceso de masterización estuvo a cargo de Costa en el estudio más arriba mencionado de Calcio. Guidoni, por su parte, se hizo cargo del arte gráfico y el diseño artístico. El concepto recurrente de “Decoding The Emptiness” es el análisis de todos los matices inherentes a la noción de vacío en varios niveles: introspectivo, exterior y psicológico. El cuarteto contó con las colaboraciones ocasionales de Joe Sal (canto en el primer tema) y Alphabeard (voz en el tercero). 

Ocupando un espacio de casi 9 minutos, la pieza homónima abre el álbum con convincente expresividad. ‘Decoding The Emptiness’ comienza con un talante ceremonioso que se expande bajo una atmósfera densamente lánguida. A partir de allí, se siembra el terreno para los cimientos de un cuerpo central lento cuya fuerza expresiva refleja un señorío mesuradamente dramático. Es como si la gente de GOBLIN hubiese remodelado una pieza perdida de los PINK FLOYD de 1975. La sección epilogar exhibe unos mágicos destellos etéreos sobre un mecanismo de caja musical. ‘Attic Clouds’ sigue a continuación para virar hacia una zona sónica un poco más majestuosa. En ella prevalece una tensión relativamente contenida donde el grupo realiza una sólida excursión prog-psicodélica mientras reitera parcialmente la languidez sistemática que antes había definido al groove introspectivo de la canción de apertura. Siendo así que el swing de la batería exuda una mayor dosis de sofisticación desde las que coquetea con el jazz-rock, no es de extrañar que en algún pasaje tras las frontera del cuarto minuto y medio se suelte con razonable viveza. Un estupendo cénit del repertorio. ‘Twilight’ es básicamente una balada sinfónica con base de piano y orquestaciones de teclados, algo muy evocador con un talante romántico. A mitad de camino, se edifica un interludio solemne que marca un recurso fulguroso para la canción antes de regresar a la estructura inaugural. Cuando llega el turno de ‘Horror Vacui’, pieza que comienza con un viaje impresionista en 6/8 donde la banda realiza una inspección de climas cinematográficos, virando poco después hacia un ambiente más denso signado por una vivacidad suntuosa. Éste se asienta en un esquema de alternancias con instancias misteriosas de musique concrète. El epílogo es sereno y ensoñador, eficaz resucitador del remanso inicial. ‘Simulacea’ recibe simultáneamente los ecos del señorío de la pieza #2 y las agitaciones arcanas del tema precedente, lo cual permite al ensamble jugar con lo lóbrego bajo un manto sumamente estilizado. Una vez más, el ensamble hace gala de su peculiar sentido de la estilización progresiva mientras maneja sabiamente los mesurados niveles de expresionismo por los que quiere orientar el foco compositivo. Otro cénit del disco. 

‘Mademoiselle X’ da un nuevo giro de tuerca a la faceta más explícitamente lírica del grupo. Los fraseos y texturas de guitarra (muy a lo Hackett, dicho sea de paso) ocupan un lugar muy prominente dentro de la instauración del motif central. El empleo de ocasionales efectos cósmicos acentúan el aura de distante ensimismamiento a la que alude el esquema melódico. Los dos últimos temas del repertorio son los más extensos del mismo: ‘D.O.O.M. (Mortuarii Octavarii Obscuri Declamatio)’, que dura 13 minutos y pico, y ‘Return From The Spiral Mind’, que dura cerca de 9 ½ minutos. El primero de ellos comienza con unos ornamentos space-rockeros que pronto abren la puerta a un dinamismo voraz y entusiasta: es lo más explosivo que hemos escuchado hasta ahora. La cosa no dura mucho, porque no tarda mucho en emerger un motif totalmente diferente donde el piano instaura un cuerpo melódico sedoso e introspectivo que sirve de impulso para un breve ejercicio de lánguida densidad. Como la huella del vigor rockero ya estuvo impresa por la primera sección, una tercera sección emerge como una implosión de energías ígneas delineadas por una majestuosidad envolvente y contundente. No es muy frenética, pero sí es suficientemente maciza como para llenar espacios de forma consistente, incluyendo algunas variantes más sutiles dentro de un ingenioso puzle multivalente. La sección final está más inclinada hacia lo celebratorio, casi coqueteando con lo circense, aunque las agitaciones prog-psicodélicas siguen siendo predominantes dentro de la ingeniería sónica. Momento culminante del disco. En cuanto a ‘Return From The Spiral Mind’, cabe aclarar de inicio que se trata de un bonus track. Dando preferencia a un enfoque psicodélico con ribetes electrónicos de tendencia space-rockera, la pieza asume una intensidad expresiva que algo tiene de flotante a través de su patente señorío rockero. Las variaciones temáticas que van emergiendo se hilan fluidamente hasta llegar a uno de esos pasajes solemnes que tan bien se le da al ensamble armar. De esta manera, la pieza completa su estructuración por vía de una evocación arcana y gentil. 

Todo esto fue lo que se nos brindó en “Decoding The Emptiness” desde los cuarteles de DAAL, un grupo italiano que tiene firmemente enraizados los fundamentos de su voz propia dentro del gran escenario progresivo de su país. Este disco muestra claramente que el esquema de trabajo de la banda no ha perdido nada de frescura a lo largo de los años. Totalmente recomendable. 
 
 
Muestras de “Decoding The Emptiness”.-
Attic Clouds: https://daal.bandcamp.com/track/attic-clouds
Simulacea: https://maracashrecords.bandcamp.com/track/simulacea
D.O.O.M. (Mortuarii Octavarii Obscuri Declamatio): https://maracashrecords.bandcamp.com/track/d-o-o-m