Wednesday, July 31, 2013

PTF nos trae una renovada percepción de la escena prog-sinfónica japonesa



HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy prestamos atención al grupo instrumental japonés PTF, articulado en torno a un esquema de violín-teclado-bajo-batería: Keisuke Takashima, Takeya Kito, Hiroyuki Ito y Yusuke Sekison son los integrantes sucesivamente encargados de este arsenal instrumental. La referencia de KBB es la primera que se nos viene a la cabeza con estos datos, y en buena medida, dicha referencia es aclaradora respecto a la propuesta que PTF aporta a la escena progresiva actual, pero en el caso de PTF tenemos un caso de énfasis sistemático en la vertiente sinfónica del progresivo y una perpetua focalización en las facetas más preciosistas de los desarrollos melódicos diseñados para cada pieza del repertorio. Así pues, sus paisanos de FANTASMAGORIA y THE EARTH EXPLORER, y en menor medida, el QUATERNA REQUIEM de “O Arquiteto” son también referentes para entender la degustación de la propuesta musical de este cuarteto. En líneas generales, este grupo merece un lugar central de nuestra atención cuando aprendemos a apreciar a la nueva generación de música progresiva sinfónica en el País del Sol Naciente. “Percept From…” es el título del disco debut de PTF, publicado por Musea Records en febrero último. 

  

 
‘Arc Taylor’ abre el álbum ocupando un espacio de más de 9 ½ minutos. El esquema rítmico predominante es de 6/8 pero a veces se intercala con interludios en 5/8: el lirismo es contundente, portando un gancho muy grácil. ‘Nightscape’ sigue a continuación para proseguir por una atmósfera similar pero con una actitud explícitamente más calmada, ciertamente orientada a reflejar una actitud contemplativa. A contrapelo de todo esto, ‘Fair Wind’ se explaya en una manifestación de extroversión pura: con un Hammond Emersoniano, una vibración rítmica al estilo del UK de su época de trío y unas bien logradas cadencias jazz-rockeras insertadas para darle una magia especial al swing, el grupo logra

alimentar solventemente la mecha sónica del álbum. Con el arribo de ‘Chromatic Rays’ – tema que dura 11 minutos, nada menos – el grupo explora su dimensión más intimista a través de la minuciosa elaboración de un motivo central bastante dado a ambientes calmos, al modo de un vals sinfónico penetrado por algunas cadencias inspiradas en la vieja usanza del jazz-fusion de las mejores épocas de JEAN-LUC PONTY. Hay un momento en que el grupo desarrolla un recuro de moderado ensalzamiento, un factor muy útil a la hora de generar una atmósfera de diversidad pero sustentando una muy cuidada preservación del índice temático en curso, y de hecho, el ensamble redondea la faena con un articulado reprise del motivo inicial. ‘Firefly Effect’ empieza con un prólogo desconcertantemente tenso, pero en realidad solo se trata de una engañifa, pues una vez insertado y desarrollado el motivo central, nos topamos con una recuperación de la atmósfera central de ‘Nightscape’. Juntando ambas piezas, podemos disponer de ejemplos perfectos de la faceta más delicada de PTF… y para reforzar aún más la cosa, ‘Purple Mist’ despliega un conmovedor ambiente intimista a través de su estilizado dúo de violín y teclado.
 

Los últimos casi 23 minutos del álbum están ocupados por la dupla de ‘Ephemeral Sign’ y ‘Seaward Meteor’. ‘Ephemeral Sign’ da cabal muestra de la capacidad que tiene PTF para crear atractivos climas musicales sobre gráciles estructuras rítmicas y a través de ideas melódicas inspiradas. En fin, ‘Seaward Meteor’ cierra el álbum reiterando una vez más estas cualidades, pero esta vez incorporando pasajes musculares en medio de la ilación de motivos, pasajes que nos recuerdan en parte a lo mostrado anteriormente en ‘Fair Wind’, aunque en realidad, es este tema que acabamos de mencionar el que encarna la cima de expresividad rockera dentro del álbum. A propósito, algunos juegos armónicos del violín nos recuerdan fácilmente al riff inicial del himno de KANSAS ‘Carry On Wayward Son’ – ¡coincidencias de la vida! 

  



“Percept From…” es, para decirlo de forma sencilla, una gozada de disco donde el deleite melódico no tiene dónde parar desde su inicio hasta el final. PTF es una sorpresa sumamente agradable y una referencia para proyectar nuestras fantasías de música progresiva futura.



Muestras de “Percept From…”.-
Arc Taylor [en vivo, marzo de 2013]: http://www.youtube.com/watch?v=cdMjSkqQkhE   

Sunday, July 28, 2013

RAPA NUI: a por todo con “Rigel Kentaur”


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RAPA NUI vuelve al ataque: este dúo conformado por un integrante de MERCÌ BABOON y un integrante de CHOLO VISCERAL vuelve a proponer una obra valiente dentro la actual movida psicodélica peruana que parece no agotar su creatividad en el underground limeño:“Rigel Kentaur”. La dupla de Israel Tenor [batería y bajo] y Arturo Quispe [guitarra y saxofón alto] solidifica varias de las coordenadas free-form sobre las cuales había forjado su voz propia en sus trabajos precedentes, a la par que amplifica su gama de recursos sonoros con miras a nutrir una dinámica más filuda dentro del discurso del rock vanguardista. No solo está este disco disponible en la página de Bandcamp del grupo; también goza de su edición física a cargo del sello Necio Records desde fines de julio… casualmente, temporada de Fiestas Patrias de la República del Perú. Una interesante peculiaridad del diseño de la tapa es que ésta está abierta por el lado izquierdo. En fin, vayamos a la misma música.


‘Ciclón De Nebulosas’ ocupa un espacio de más de 24 minutos, iniciando su travesía sónica con una lánguida escala de guitarra en 14/8 que sirve como base para la paulatina elaboración de una armadura donde la tensión se va desarrollando desde lo latente hasta lo patente. Lo que parecía iniciarse como un ejercicio de post-rock termina derivando realmente en una sonoridad cálidamente oscura de insignia stoner con matices del GURU GURU 1971-2 (y algún que otro dejo Crimsoniano que también se hace notar “como quien no quiere la cosa”). Este cuerpo central se desarrolla liberalmente hasta poco antes de la frontera del minuto 17, nunca dejando que la tensión reinante se escape de las manos del dúo: los inacabables fraseos de la guitarra ocupan un inapelable rol protagónico, mientras que el saxo entra a tallar con ornamentos densos al modo de exabruptos fantasmales. Los últimos minutos están focalizados en ornamentos abstractos al estilo del legado Floydiano de “Ummagumma”: en efecto, hay un aura grisácea de deconstrucciones cósmicas que irrumpe para borrar las huellas dejadas por el jam central. La otra pieza del disco es ‘Sacrilegio Cósmico’ y dura 17 ¼ minutos. El primer motivo impone de entrada un jam blues-rockero de inspiración Sabbathiana para el lucimiento del saxofón. Una breve interrupción caótica antes de la frontera del quinto minuto sirve de nexo para el siguiente motivo, el cual se focaliza en una osada aventura free-jazz-rockera donde la ansiedad arrolladora de la psicodelia de siempre marca la pauta de las sonoridades inesperadas. A partir de este posmoderno diálogo de desafíos amorfos entre guitarra y percusión, el ensamble vuelve a armar una arquitectura reconocible, esta vez con un ritmo intensamente trepidante y un protagonismo compartido entre la guitarra y el saxofón. Así las cosas, cabe señalar que las marcas de ASH RA TEMPEL y GURU GURU son fáciles de notar dentro del siempre refrescante esquema estético de RAPA NUI. El golpe final viene otra vez de la mano de una actitud deconstructiva, centrada en arrolladores efectos de guitarra que se sienten rockeramente filudos a despecho de su iniciativa abstracta.  

 

“Rigel Kentaur” es, a fin de cuentas, una obra estupenda que confirma sólidamente a RAPA NUI como un referente importante para lo más destacado de la vanguardia rockera peruana de los últimos años. ¡Bien por ellos y por quienes les prestamos nuestros oídos!


Muestra de “Rigel Kentaur”.-
Sacrilegio Cósmico: http://rapanuiperu.bandcamp.com/track/sacrilegio-c-smico

Friday, July 26, 2013

ALLAN HOLDSWORTH: una revisión de "FLATTire"


HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

De la mano de Leonardo Pavkovic, el sello MoonJune Records vuelve a celebrar la obra del incombustible maestro guitarrista ALLAN HOLDSWORTH, esta vez con la segunda re-edición de su álbum de 2001 “FLATTire: Music For A Non-Existent Movie” (más exactamente, diciembre de 2001 por vía de Megazoidal Records, con una primera re-edición realizada por Eidolon Efformation en 2007). MoonJune continúa así con una misión retrospectiva que en años anteriores ha incluido a discos como “Hard Hat Area” y “None Too Soon”. El caso de “FLATTire: Music For A Non-Existent Movie” es bastante único, pues es un trabajo donde HOLDSWORTH se focaliza concienzudamente en crear atmósferas y dar vueltas sobre ellas para motivar texturas introspectivas que sirvan de ropaje sofisticado para las ideas concentradas en cada pieza. Tal como confiesa HOLDSWORTH, él siempre soñó con que se le propusiera hacer una banda sonora de una película, y este disco sirvió para reivindicar esta ansia por componer material diseñado para llenar ambientes de escenas y situaciones dramáticas; a su vez, HOLDSWORTH, como persona, estaba viviendo un momento dramático con su divorcio, así que la inspiración para exorcizar emociones y asentar paisajes sónicos para situaciones estaba muy a flor de piel. Solo falta el factor genio, el cual este maestro lleva demostrando por décadas que tiene a raudales.     


La secuencia de ‘The Duplicate Man (Intro)’ y ‘The Duplicate Man’ ocupa los primeros 6 ½ minutos del álbum: la introducción crea una expectativa extravagante a punta de capas industriales de fondo y extraños arreglos percusivos mientras el maestro crea un punzante punteo, y ya con el tema central, HOLDSWORTH pone su logística al servicio de texturas etéreas y atmósferas flotantes, creando una mágica cruza de tumulto interior y placidez exterior. Por eso, cuando en la frontera del tercer minuto el esquema rítmico se torna más intenso, este viraje se siente naturalmente como el inicio de la extensión de lo que se había estado desarrollando previamente. Tras este estupendo inicio sigue a continuación ‘Eeny Meeny’, uno de los dos temas donde interviene el invitado especial Dave Carpenter al contrabajo: sin necesidad de recurrir a secuencias de ritmo, el groove de la pieza se siente magistralmente instalado, con una arquitectura que porta la fluidez idónea para sostener el buen humor implícito a la idea melódica en curso. ‘Bo Peep’ es el otro tema donde aparece Carpenter: la cadencia en el diálogo entre ambos músicos es similar, pero la dinámica creada en este último caso tiene una orientación más marcada hacia el free-jazz. ‘Please Hold On’. La dupla de ‘Curves’ y ‘So Long’ sirve para darle nueva frescura al repertorio: el primer tema es pura calidez sobre un ritmo sintetizado llamativo, mientras que ‘So Long’ es un sobrio retrato de la inmensa melancolía, enmarcado en el minimalismo durante varios pasajes.


Los temas más extensos del disco son ‘Snow Moon’ y ‘Don’t You Know’. ‘Snow Moon’ comienza con un breve preludio maquinista que tal vez nos invita a imaginar que se nos viene un ejercicio de travesuras abstractas, pero en realidad el desarrollo temático está diseñado para generar algunas de las atmósferas más cálidas del álbum, las cuales incorporan un neurótico interludio signado por un enérgico dinamismo Latin-jazzero que se edifica con una mezcla de jolgorio contagioso y futurismo cerebral. Por su parte, ‘Don’t You Know’ se explaya plácida y sólidamente en climas minimalistas inundados de solipsista vulnerabilidad – esta pieza cierra el disco al modo del reflejo de un soliloquio que HOLDSWORTH elabora para cerrar el telón del disco tomándose su tiempo en ello. Esta aureola de serena tristeza conforma el cierre perfecto para un disco hermoso en el que HOLDSWORTH explora rumbos inusitados para el peculiar paradigma jazz-rockero en torno al que ha girado toda su carrera musical: “FLATTire: Music For A Non-Existent Movie” conforma una variante interesante y cautivadora dentro de un estándar bien afianzado en el discurso del jazz-rock, un replanteamiento exitoso de ciertas pautas que han generado nuevos matices desde su propio seno, una cara nueva de ALLAN HOLDSWORTH.


Muestras de “FLATTire: Music For A Non-Existent Movie”.-

Tuesday, July 23, 2013

Los susurros nocturnos retro-psicodélicos de THE DEAD-END ALLEY BAND


HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy les presentamos a THE DEAD-END VALLEY BAND, dúo peruano de rock experimental psicodélico conformado por Sebastián Sánchez-Botta [teclados, sintetizadores, batería, percusión, sitar y voz] y Javier Kou [guitarras, bajo, sitar y coros]. Este dúo ha causado un revuelo en el mundillo de coleccionistas de vinilos europeos con la edición de su álbum debut “Whispers Of The Night” por el sello alemán Nasoni Records a inicios del presente año 2013 (versiones de vinilo negro y verde, respectivamente). Pero antes de eso ya estaba causando una interesante conmoción en el underground limeño desde su portal de Bandcamp y su página de Facebook (https://www.facebook.com/deabperu?fref=ts), con su propuesta retro-psicodélica que tantas afinidades sólidas exhibe con el ideal de la música progresiva. Sánchez-Botta y Kou formaron THE DEAD-END VALLEY BAND como un proyecto estrictamente personal donde, como tándem, explorarían sus deseos y sueños de experimentación con el lenguaje del rock mientras iban tanteando empíricamente en los diversos modelos de expansiones psicodélicas aventureras que habían emergido en la etapa dorada de fines de los 60s e inicios de los 70s: lo que se plasma en este disco es un real proceso de auto-aprendizaje y de re-descubrimiento… ¡y vaya si no se reflejan raudales de talento creativo mientras el dúo se empeña en esta empresa! Vayamos a continuación a los detalles del repertorio del álbum, ¿vale?


La tríada inicial de ‘Mirrors And Seagulls’, ‘Whispers Of The Night’ y ‘Lizards And Snakes’ nos pone en camino a la compenetración con el mundo estético donde habitan Sánchez-Botta y Kou. ‘Mirrors And Seagulls’ se centra en un candoroso clima contemplativo que bebe directamente del legado de languidez contemplativa del PINK FLOYD 69-71, mientras que la pieza homónima se focaliza en un esquema de balada progresiva donde la patente sencillez de la base melódica se recubre de una fastuosidad envolvente, nunca llegando a lo hiperbólico, siempre manteniendo un nivel de autocontrol en su inherente esplendor. ‘Lizards And Snakes’ completa la vía de entrada con la inserción de factores acid-folk merced a la presencia del sitar y percusiones: con ciertos retazos de AMON DÜÜL II, esta pieza nos muestra una faceta relajante de THE DEAD-END ALLEY BAND. Con el arribo de ‘Centuries’, el grupo le da a su constante aura reflexiva un dinamismo un poco más enérgico, siempre cuidando que el vigor no sea utilizado en contra de las inquietudes introspectivas en torno a las que se focaliza el núcleo temático. El sonido del órgano resulta muy peculiar pues asume cadencias habituales de una película de horror “B”, y con la superposición de varias narraciones se crea un clima de atiborramiento psicológico. La primera mitad del disco se cierra con ‘Bring Me Back Home’, pieza armada en clave de blues-rock con tendencia de garage rock, la cual incluye un soliloquio ceremonioso en el breve interludio: hay una encantadora desfachatez en esta travesura musical.


La segunda mitad del álbum se inicia con un regreso al estándar Floydiano de la mano de ‘Nightmare Time’, alimentado con una aureola tétrica bastante efectiva. ‘Soul Sucker Blues’ instaura unas vibraciones extrovertidas a fin de aportar interesantes variantes en el espectro de colores musicales que se han venido expresando hasta ahora (y de hecho nos recuerda al primer álbum de HAWKWIND), pero no tardamos mucho en volver a encararnos ante lo tétrico al emerger ‘Trapped Inside A Lava Lamp’, una pieza que vuelve al esquema de trabajo antes plasmado en ‘Nightmare Time’ y ‘Centuries’. ‘It’s Too Late’ aprovecha las expansiones del ritmo a medio tiempo que lo sustenta para explayarse en una especie de remodelación de la faceta onírica de THE DOORS. La última canción ‘This Trip Is Over (Time To Get Home)’ sirve como epílogo cósmico de ‘It’s Too Late’, armado con un canto desesperado y flotantes capas de sintetizador que emulan al correr del viento: la sensación de desolación funciona como retrato del yo que se encierra en su ciudadela interior.

 

Vale la pena seguir la pista de THE DEAD-END ALLEY BAND, especialmente ahora que va rumbo a la gestación de un próximo disco, proyectándose con sonoridades más llenas por obra y gracia de la participación adicional de otros músicos que llevan al grupo a operar como quinteto. En su momento veremos a dónde llevará esta remodelación expandida de su propuesta retro-psicodélica: ciertamente, queda la sensación de que piezas como ‘Nightmare Time’ o la que da título al disco pudieron beneficiarse de arreglos más extendidos, pero por lo pronto, “Whispers Of The Night” resulta siendo una joya que merece ser atesorada por los fans del rock vanguardista de ayer y de siempre.


Muestras de “Whispers Of The Night”.-

Saturday, July 20, 2013

NOT A GOOD SIGN - una buena señal de creatividad en el ámbito progresivo italiano de hoy


HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy presentamos a NOT A GOOD SIGN, una especie de súper-grupo del prog italiano contemporáneo que congrega la asociación de Paolo “Ske” Botta a los teclados, Francesco Zago a las guitarras, Alessio Calandriello a la voz, Gabriele Guidi Colombi al bajo y Martino Malacrida a la batería y las percusiones: los dos primero son integrantes de YUGEN y SKE, mientras que los dos segundos son miembros de LA COSCIENZA DI ZENO. Su homónimo disco debut, publicado a inicios de junio por vía de la asociación de los sellos AltrOck y Fading Records, es un enérgico muestrario de sonoridades rockeras muy al estilo de la vertiente pesada de la vieja escuela progresiva de los 70s, además de mostrar afinidades inocultables por varios trucos y recursos de la tradición psicodélica: la importante presencia de teclados vintage en el esquema instrumental de la banda refuerza cabalmente la concreción de este esquema de trabajo. De hecho, la intención originaria de la dupla Botta-Zago al poner en marcha este proyecto era la de rescatar algunas viejas sonoridades dentro de composiciones progresivas que tengan una estructura menos controlada que la de sus habituales labores creativas en YUGEN y SKE, a la par de una motivación de nuevas estilizaciones que se sientan contemporáneas más allá de las inevitables influencias añejas. El quinteto se hace acompañar, en ciertos momentos del disco, del pianista Maurizio Fasoli (también de YUGEN), la vocalista Sharron Fortnan (integrante de NORTH SEA RADIO ORCHESTRA) y la cellista Bianca Fervidi.


Dando inicio al repertorio a través de la sucesión de sus dos partes, ‘Almost’ instala una buena carta de presentación: la primera parte dura 6 ½ minutos y es enteramente instrumental, exhibiendo una ilación de motivos que portan una expresividad muy efectiva; la segunda parte es cantada, y es básicamente una balada ornamentada con atmósferas cósmicas. La canción titulada precisamente como el grupo y el álbum sigue a continuación: con un esquema rítmico mesurado pero plasmado con buen pulso, el grupo exhibe un apasionamiento razonablemente feroz, a la par que vulnerable. La importante presencia de fuertes riffs guitarreros e ingeniosas orquestaciones de órgano Hammond y mellotrón no quitan espacio a la posibilidad de que en algún momento emerja un breve interludio lánguido en base a la articulación de arpegios de piano y guitarra acústica (muy a lo GENESIS). La secuencia de ‘Making Stills’ y ‘Wichcraft By A Picture’ se hace cargo de mantener el momentum genialmente elaborado por ‘Not A Good Sign’. ‘Making Stills’ es otro viaje instrumental extenso que da campo al grupo para explorar una deliciosa combinación de jazz-rock y sinfonismo de vieja escuela (casi como una encrucijada entre el primer CAMEL, ALPHATAURUS y CARAVAN), alternando momentos de espléndida vitalidad con otros de grisácea espiritualidad. Por su parte, ‘Wichcraft By A Picture’ se explaya en etéreas atmósferas que transitan fluidamente entre lo introvertido y lo tétrico: suena un poco a WHITE WILLOW con aires añadidos de ARIES, y es posiblemente el hecho de que Sharron Fortnan se haga cargo del canto lo que ayude a reforzar este paralelo. La letra está tomada de un poema de John Donne. ‘Coming Back Home’ porta un aura distinta, lírica y mayormente relajada, aunque no exenta de ciertos momentos en los que el grupo se explaya en arreglos razonablemente complejos en aras de realzar la densidad de algunos momentos – la influencia de LA MASCHERA DI CERA se siente.  


‘Flow On’ expone una dinámica y estructura melódica claramente definidas pero convenientemente contenida en el desarrollo de su expresividad: en muchos aspectos, hereda el impacto estilístico de ‘Coming Back Home’ junto con el aura de vitalidad que ya disfrutamos en la primera parte de ‘Almost’. ‘The Deafening Sound Of The Moon’ sí crea campo para que la expresividad rockera se explaye de manera sólida: no sería injusto señalar los aires de familia con LA COSCENZA DI ZENO y con AREKNAMÉS, especialmente en lo que se refiere al ágil empleo de ornamentos oscuros en los arreglos musicales diseñados para mostrar los momentos de mayor intensidad emocional. Es una pea que ‘The Deafening Sound Of The Moon’ no se extienda más allá de su espacio de 4 ½ minutos, pero ya llega el momento de que ‘Afraid To Ask’ cierre el álbum con una ceremoniosidad otoñal donde la sensación de melancolía marca la pauta de las vibraciones emocionales delicadamente plasmadas en la instrumentación.

 

NOT A GOOD SIGN y su disco homónimo son unos ítems que vale la pena anotar en nuestras listas de próximas investigaciones progresivas: la intensa dinámica musical que se muestra a rebosar en este disco es imposible de ignorar. ¡Disco altamente recomendable!


Muestras de “Not A Good Sign”.-

Wednesday, July 17, 2013

LIZARD vuelve con nuevos bríos y su maestría intacta


HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

¿Qué novedad tenemos ahora? Pues que tras largos años de letargo y más letargo, el grupo polaco LIZARD (responsable de varios de los momentos más notables del revival prog polaco durante la segunda mitad de los 90s y los inicios del nuevo milenio) regresa con un nuevo disco conceptual: “Master & M”. El frontman y guitarrista Damian Bydliński vuelve a unir fuerzas con el bajista Janusz Tanistra mientras se asocian a ellos los recién ingresantes Daniel Kurtyka [guitarras eléctrica y acústica], Paweł Frabowicz [teclados] y Aleksander Szałajko [batería y percusión].


Durando casi 14 minutos, ‘Chapter I’, da inicio al disco ofreciendo un testimonio directo e inconfundible de la expresividad electrizante que la banda nos ofrece en esta nueva etapa de su carrera. La pieza comienza con un preludio signado por un aura de misteriosa levedad, con Bydlinski que susurra la letra casi como queriendo ocultar algo tras una cortina… y así pasan cuatro minutos hasta que irrumpe todo el vigor rockero que el ensamble pone a disposición del oyente. El cuerpo central emerge sobre un medio tiempo llenando espacios con rotundos riffs y luminosas armazones de teclado. Hay un aire de PORCUPINE TREE de la época de “Fear Of A Blank Planet” así como del primer RIVERSIDE, e incluso también hay una especie de retoma de lo que los mismos LIZARD nos mostraban en los tiempos de su segunda obra “Psychopuls”. Fastuosidad y musculatura sobran en esta impresionante canción de entrada – en cuanto a la segunda de estas cualidades, es necesario mencionar el mérito específico de Kurtyka por regalarnos un par de solos explosivos en los que su guitarra se convierte en una auténtica fuerza de la naturaleza. ‘Chapter II’ se hace eco del halo de fortaleza muscular que inundó a ‘Chapter I’ y lo dosifica de una manera más sofisticada: así, las variantes que tienen lugar en las ilaciones de ambientes y motivos generan contrastes más dramáticos y una acrecentada dosis de complejidad. Las semejanzas con la etapa de “Psychopuls” todavía son válidas a la hora de racionalizar lo que estamos escuchando; también se mantiene eso de que el estándar del prog-metal es el centro neurálgico de las armazones de las partes más enérgicas.

 

‘Chapter III’ está más cerca a la época de “Spam”: explícitamente, la canción parece un híbrido entre el DREAM THEATER 92-94 y el SAGA histórico, y realmente se luce la dupla rítmica con su manera tan firme de instalar un groove jazz-rockero para sustentar la dinámica de la canción. ‘Chapter IV’ es el ítem más sereno del álbum: la dupla rítmica retoma, e incluso enfatiza  la dinámica jazz-rockera que había operado en el capítulo anterior y motiva al bloque instrumental a articularse orgánicamente en un manejo razonablemente sutil del desarrollo temático en curso. El solo de piano eléctrico elaborado en el intermedio es simplemente fabuloso. ‘Chapter V’ cierra el álbum completando el círculo de forma cabal: este capítulo final condensa fluidamente la fastuosa vitalidad de ‘Chapter I’ y la sofisticada ingeniería de ‘Chapter II’, y cómo no, ofreciendo un punche electrizante en las armazones de los riffs y golpes de gracia impactantes con los solos de guitarra y sintetizador que van teniendo lugar. Un broche de oro contundente e inapelable.


“Master & M” es un disco que destila grandiosidad de manera tremendamente explícita, y las dosis de imaginación musical desplegadas en las estructuras temáticas de cada pieza son generosas. LIZARD ha vuelto al ruedo para seguir ocupando un lugar notablemente destacado en el actual ideario progresivo de Polonia. ¡LIZARD ha vuelto con toda su maestría intacta!


Muestras de “Master & M”.-

Sunday, July 14, 2013

Las nuevas fanfarrias progresivas de FICCIÓN: una furia reformulada para el año 2013


HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy traemos a colación un nuevo disco de una banda veterana: “Sobre La Ira De Dios” de FICCIÓN. Contando con una carrera muy larga cuyos orígenes se remontan a la segunda mitad de los 70s, FICCIÓN se ha mantenido como una leyenda importante de la experimentación progresiva venezolana. Recién en la época de la fonografía digital ha podido este grupo liderado por el creativo y diestro teclista José Ignacio Lares mantener una productividad musical que más o menos se puede calificar como lenta y sostenida. 2013 es el año de su tercer disco “Sobre La Ira De Dios”. Históricamente, FICCIÓN casi siempre ha funcionado como un power-trío centrado en los teclados de Lares: hoy por hoy, el núcleo del grupo lo conforma la dupla de Lares y el baterista Édgar de Sola. Los invitados especiales para esta ocasión han sido el guitarrista Joseíto Romero, el violinista Ismael Vázquez y el vocalista Joseíto Benmaman. 


Los primeros 5 minutos del álbum están ocupados por ‘Castigador De Media Noche’, canción que se engalana con estilizaciones manieristas propias de lo que usualmente cabe esperar del legado prog-sinfónico italiano. La arquitectura melódica está diseñada con una precisión pulcra que los instrumentistas cuidan religiosamente durante sus enérgicas interacciones. Luego sigue la secuencia de ‘Cinco Vientos Malignos’ y ‘El Guano’ con el propósito firme de prolongar el aura de vitalidad sónica que se inició con el primer tema. ‘Cinco Vientos Malignos’ es un efectivo ejercicio de hibridación de sinfonismo pomposo a lo ELP y progresivo jazzeado a lo REFUGEE, un modelo de musicalidad con el que FICCIÓN siempre se ha sentido cómodo desde sus primeros días de existencia. Por su parte, ‘El Guano’ – que con sus poco menos de 8 ½ minutos de duración se erige en la pieza más larga del álbum – se focaliza en un lirismo sereno que es llevado con soltura y templada gracilidad: el factor fusionesco es el elemento predominante a la hora de organizar los arreglos y expansiones de los motivos en curso, y así, FICCIÓN abandona un poco la fuerza de carácter a favor de la actitud contemplativa. Con estos primeros 20 minutos del disco ya tenemos un disfrute especial, y lo que acto seguido nos brinda ‘Fanfarria Para Un Hombre Progresivo’ aspira a ser una prueba de la capacidad del grupo de mantener el momentum. ¡Y vaya si lo hace! El tema se caracteriza por centrarse en una escalada de pasiones orquestales donde los teclados de Lares navegan cómodamente a través de la compleja red de bloques armónicos exquisitos y alucinantes solos psicodélicos. ‘Tango Metamórfico’ también porta un evidente tenor orquestal, aunque esta vez el camino de la pomposidad es transitado con un paso más cadencioso, una dinámica menos ostentosa: se trata, tal como indica el título, de una composición inspirada en el esquema del tango-fusión y alimentada con fuertes cantidades de sazones sinfónicas, algo así como una versión tanguera del estándar de QUATERNA REQUIEM.


Con ‘Microllage’ y ‘Suite Y Obertura Del Jokilín’, el grupo se explaya en sus propios poderes de expresividad y sofisticación, luciendo toda su luminosidad sónica dentro de ingenierías melódicas siempre abiertas a explorar recursos sorpresivos en medio de sus definidos núcleos temáticos. En la mutua comparación, resulta que ‘Microllage’ se destaca por su mayor punche y ‘Suite’ hace resaltar una dinámica un poco más mesurada que termina enfatizando los desarrollos melódicos diseñados para la ocasión. ‘Abu-Simbel’ se proyecta sobre el impulso recibido por la dupla precedente a la vez que recupera muchos elementos del lirismo vibrante que había caracterizado a las pautas centrales de ‘El Guano’. La frenética vitalidad expresada en‘Microllage’ y ‘Suite Y Obertura Del Jokilín’ y la recarga sofisticada de esa misma vitalidad en ‘Abu-Simbel’  hacen de esta tríada el clímax decisivo del disco. El momento final llega con ‘Castigo Del Calderón’, pieza que reformula la colorida estilización de ‘Castigador De Media Noche’ aunque no concretiza un nivel de energía expresiva semejante al de cualquiera de los tres temas precedentes, y por eso no nos parece el cierre ideal del álbum. A despecho de este reparo específico, pequeño por lo demás, es justo resaltar su lirismo bien articulado como un gran punto a su favor.

 

Llegando a un balance general, afirmamos con convicción que “Sobre La Ira De Dios”, en boque, resulta un estupendo disco que corrobora la noción de que el paradigma sinfónico del rock motiva muchas manifestaciones de gran calidad en la escena sudamericana. FICCIÓN se ha lucido con su nuevo disco, y con ello, ha hecho relucir sus medallas de veteranía y buen oficio de música progresiva creada y desarrollada durante varias décadas. ¡Disco recomendado!       


Muestras de “Sobre La Ira De Dios”.-

Thursday, July 11, 2013

Las continuas investigaciones sinfónicas de TAURUS


HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy volcamos nuestros ojos y oídos a la escena progresiva chilena para concentrarnos en TAURUS, proyecto solista del multi-instrumentista Claudio Momberg. Este proyecto emergió a partir de la efervescencia creativa de Momberg que tenía lugar en su cabeza en la segunda mitad de 2009 mientras el disco de SETI “Discoveries” aún no salía del proceso de post-producción. TAURUS fue el vehículo que tuvo que nacer para que este nuevo flujo de creatividad no se perdiera en la nada… y así él fue creando música y ejecutándola sin ayuda de músicos adicionales, llevando ideas inicialmente concebidas como piezas de cámara a un desarrollo cabalmente progresivo. De hecho, TAURUS comenzó definiéndose como una “Búsqueda relacionada con SETI”, pero tras completar una primera trilogía de obras fonográficas, es justo decir que TAURUS tiene un lugar propio y autónomo. El primer disco “Opus 1 – Dimensions” fue publicado en 2012, el segundo “Opus 2 - Impressions” en 2011, y ahora en 2013 nos llega “Opus 3 – Research”.  Grabado y mezclado en Tauridstudios entre diciembre de 2012 y enero de 2013, “Research” refleja un camino intermedio entre la esencia estilizadamente contemplativa del primer álbum y la estructura explícitamente pomposa del segundo: en todo caso, los tres discos tienen el común denominador de mostrarnos, en diversos ambientes y modalidades, el aspecto más reflexivo de la ambiciosa visión musical de Momberg. Vayamos ahora a los detalles del repertorio de este disco, ¿vale?


El primer movimiento se titula ‘Tranquility’ y su esquema musical refleja cabalmente el espíritu de la palabra titular: alternando pasajes dominados por el piano y otros donde se hilan etéreas orquestaciones de sintetizador, la pieza explora una espiritualidad calma con estilizada solemnidad. El segundo movimiento es el más extenso: ‘Pacific’ dura más de 13 minutos, y de hecho, fue la primera pieza compuesta para el álbum, y debido a su esquema tan intrincado, Momberg se vio en la necesidad de escribir un movimiento precedente, que resultó ser ‘Tranquility’. Pero enfoquémonos ahora en ‘Pacific’. Sus núcleos temáticos elaboran una serie de motivos en base a ambientaciones que oscilan entre el WAKEMAN cláisco y el PETER BARDENS de “Seen One Earth”, con algunos elementos extra del RICHARD WRIGHT de “Broken China” y del JEAN-MICHEL JARRE de la etapa “Concerts In China”. Aunque las distinciones entre los diversos pasajes individuales son bien marcadas, éstas no son chocantes ni forzadas: se hilan bastante bien cuales diferentes escenas que juntas completan una sola acción dramática en una película. El clímax conclusivo, en base a una envolvente secuencia ensoñadora que desemboca en un hermoso epílogo sobrio de piano, es simplemente hermoso. ‘Nord’, el siguiente movimiento, parece diseñado para rendir homenaje al VANGELIS de “Anctartica” con su toque de BARDENS modernizado, mientras que por su parte, el cuarto movimiento ‘Mediterranean’ vira hacia esquemas sonoros poderosamente coloridos, enmarcados en una elegante pomposidad clásica sobre un secuencia rítmica de carácter tribal. ‘Tuamotu’, el quinto movimiento, se centra en el aspecto rockero del concepto del rock progresivo, con una vitalidad alegre y preciosista encapsula solventemente los estándares de GENESIS y CAMEL. El giro temático proporcionado por un breve interludio que surge antes de llegar a la frontera del segundo minuto sirve para añadir un sutil toque de extravagancia al asunto, reducir un poco lo gentil y meterse por ambientaciones un poco más tensas. Pero esto dura poco: el motivo inicial regresa para completar el círculo con su inicial colorido primaveral.

El sexto movimiento se titula ‘Empedocles’ y se centra en una atmósfera muy a lo JARRE pero como si se tratara de arreglar una idea surgida en los cuarteles de THE ALAN PARSONS PROJECT, dándole vueltas al motivo central para explorar el gancho de su estilizada vibración cósmica mientras las capas y secuencias sintetizadas generan ciertas variantes ocasionales en el camino a fin de asegurar la consistencia del viaje musical en curso. Por su parte, ‘Tyrrhenian’ ofrece una ambientación palaciega, sonando a una cruza entre ANTHONY PHILLIPS y el TANGERINE DREAM de la etapa 80-83: la presencia de la guitarra clásica en medidas secuencias de acordes sirve principalmente para acentuar el desarrollo de las imponentes orquestaciones de los teclados, pero en algún momento asume un rol co-protagónico junto al piano, un momento en el que el factor sinfónico se afianza como recurso de serenidad musical. ‘Serenitatis’ elabora un sano equilibrio entre ambas estrategias, resultando en una pieza que es majestuosa y relajante a la vez. ‘Kermadec’ ocupa los últimos 3 ¾ minutos del álbum brindando una orquestación de varios motivos que aparecieron en temas anteriores, condensados en una ilación muy compacta.    


“Opus 3 – Research” es un estupendo testimonio de la vitalidad musical que Claudio Momberg aún es capaz de generar para el proyecto TAURUS: el sueño del rock sinfónico sigue vivo y coleando en la escena progresiva sudamericana, y desde Chile TAURUS nos abre antes nuestros oídos una vía particular muy interesante.




Monday, July 08, 2013

Los sonidos paradisíacos de DEWA BUDJANA


HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA. 

Hoy prestamos nuestros ojos y oídos a Indonesia para toparnos con DEWA BUDJANA, virtuoso guitarrista y prolífico compositor que se explaya con igual solvencia en la eléctrica, la acústica y la sintetizada. El año 2013 es el de su disco solista “Dawai In Paradise”, el quinto de su carrera y publicado a inicios de año por el sello MoonJune Records. DEWA es considerado un maestro en su país natal… ¡y con toda razón! – él sabe conjugar las influencias de PAT METHENY, AL DI MEOLA y BILL FRISELL dentro de una vitalidad propia encuadrada equitativamente por las coordenadas de estilizado virtuosismo y candorosa sensibilidad melódica. Contando con una pléyade de invitados/as en la dupla rítmica, así como los teclados, la flauta de bambú, cuerdas y canto DEWA se asegura de fundamentar y motivar sonoridades plenas y efectivas para cada uno de los temas contenidos en el repertorio de este disco: hay un extenso lapso de 11 años entre 2000 y 2011 para el repertorio total encapsulado en “Dawai In Paradise”. De hecho, es todo un lujo contar con invitados de lujo como Peter Erskine (cuyo CV incluye a WEATHER REPORT) y el ya fallecidos bajista Dave Carpenter.


‘Lalu Lintas’ abre el álbum con un groove tan comedido como llamativo, muy a lo WEATHER REPORT pero una sonoridad apropiadamente aggiornada. ‘Gangga’ sigue a continuación para llevarnos por un cálido sendero de sereno lirismo: jazz-pop con gráciles matices fusionescos. La dupla de ‘Masa Kecil’ y ‘Kromatik Lagi’ se encarga de generar nuevos matices y cadencias para enriquecer nuestras primeras experiencias melómanas con DEWA. ‘Masa Kecil’ va por un camino amable, en cierto modo parecido al espíritu de ‘Gangga’ pero con un exotismo más pronunciado en el desarrollo melódico del cuerpo central y un mayor explayamiento de la pirotecnia guitarrera, muy a lo AL DI MEOLA. La adición de una doble coral femenina también ayuda a fortalecer el clima diseñado para la pieza en cuestión. Por su parte, ‘Kromatik Lagi’ es todo un tributo exquisito al jazz-rock de la vieja escuela 70era y 8ra, casi como una cruza entre WEATHER REPORT y PAT METHENY GROUP. Shadu Rasjii se luce en un impresionante solo de bajo que permite a DEWA tomarse un respiro en medio de sus momentos de pulcro lucimiento en dos solos de guitarra bárbaros. Llegamos acto seguido a  ‘Back Home’, tema que retoma los aires estilizadamente folclóricos de ‘Masa Kecil’ pero con un candor envolvente que se complace en explorar fehacientemente la magia sencilla del motivo central. Durando alrededor de 10 ½ minutos, la siguiente pieza, titulada ‘Malacca Bay’, se erige como el tema más largo del disco. Su dinámica en el desarrollo temático bien puede definirse como una mezcla de PAT METHENY y el CHICK COREA de los 90s en adelante: lirismo bien sostenido, aura contemplativa, pulcritud alegre a la hora de “hacer cantar” a la guitarra y el piano. 


‘Kunang Kunang’ prosigue por la senda de melodías y atmósferas amables, y en este caso, se trata de una bonita mixtura de elementos latinos y extremo orientales elaborada con un envolvente candor. ‘Caka 1922’, por su parte, es una pieza que irradia melancolía pura, trazando senderos bucólicos al paso de su andar introspectivo: en su arquitectura sónica podemos notar semejanzas con el lado intimista de MIKE OLDFIELD y la elegancia imponente de una banda sonora de MAURICE JARRE. ‘Rerad Rerod’ suena como una cruza de ‘Gangga’ y ‘Masa Kecil’: la armónica del invitado Howard Levy, que se luce en un bien definido rol protagónico, aporta aires mágicos al desarrollo temático. ‘On The Way Home’ regresa a un groove más intenso en cuanto a la armazón rítmica, aunque en lo estrictamente melódico, DEWA y sus colaboradores de turno siguen focalizados en atmósferas exóticas de tenor amable; algunos ocasionales pasajes signados por un riff de guitarra aplican ornamentos enérgicos muy bien llevados por el ensamble. Recurriendo a atmósferas arabescas con añadidos tufos flamencos, ‘Dancing Tears’ recupera las esencias predominantes del álbum antes de que la breve pieza ‘Devananda’ concluya el repertorio con una entrañable atmósfera lúdica en base a relajadas escalas de guitarra acústica.   

 

Bueno, todo esto fue “Dawai In Paradise”, un disco muy bonito, pletórico de diversas estilizaciones en varios discursos del jazz bajo el denominador común de la transparencia melódica y la calidez sonora – DEWA BUDJANA es un excelente descubrimiento de nuestra parte.


Muestras de “Dawai In Paradise”.-
Dancing Tears: http://moonjunerecords.bandcamp.com/track/dancing-tears

Saturday, July 06, 2013

MERCÌ BABOON - la multiforme avanzada progresiva peruana de nuestros días


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La vanguardia peruana está que arde con una llama que parece arder perpetuamente, o al menos, eso parece a quienes atestiguamos lo prolífica que es la escena psicodélica undeground limeña: MERCÌ BABOON es el grupo al cual prestamos atención en esta ocasión. El grupo está conformado por Mööl [guitarra, bajo y efectos], Kike Baboon [bajo, guitarra y efectos] y Mademoiselle [batería, percusión y glockenspiel].


Los cuatro primeros temas se titulan sucesivamente ‘I’, ‘II’, ‘III’ y ‘IV’. ‘I’ se proyecta hacia un escenario onírico filudo en su ilación de dos motivos diferentes, mostrando así una osadía ingeniosa; por su parte, ‘II’, tras un preludio en clave acid-folk, desarrolla un punzante esquema donde confluyen el no-wave y el paradigma de NEU! con algunas medidas sazones de math-rock incluidas en el potaje psicodélico. ‘III’ es la primera pieza del álbum que dura más de 3 minutos: en un espacio de 5 minutos, la banda explora entusiastamente recursos varios de ruda visceralidad y dinamismo celebratorio en lo que parece ser un homenaje múltiple a HELLA, PRIMUS y BATTLES. ‘IV’ cierra la secuencia cuatripartita inicial con un breve ejercicio de cadencias de bossa nova: un momento de relax exótico después de tanta neurosis seguida. ‘Elephant Stomp’, que dura 5 ¾ minutos, elabora la ilación más variada de intensidades extravagantes de todo el álbum: tras un prólogo marcado por sonoridades frontalmente cortantes de tenor punk, la pieza se concentra en desarrollar un ejercicio de stoner de vieja escuela a partir de un crescendo que se inicia con una solemnidad cósmica (¿tal vez tendiendo puentes con los legados del PINK FLOYD de los últimos 60s y JMI HENDRIX?). ‘Habitación’ reitera la lógica de enredos temáticos elaborados con vigor y juguetona desfachatez que habían signado la estructura de ‘I’ pero con una vibración sofisticada más cercana a las pautas math-rockeras de ‘III’.


Hay dos bonus tracks en este disco. El primero se titula ‘Los Sanguinarios Del Cono Norte’, y se puede describir como un reveladora síntesis de las diversas expresiones de frescura neurótica que han venido prevaleciendo a lo largo de todo el repertorio precedente; el segundo consiste en una versión antigua de ‘IV’, la cual muestra un colorido musical más desbocado y expansivo que en la versión definitiva que escuchamos anteriormente. MERCÌ BABOON se revela, en conclusión, como una vigorosa fuente de energía sónica para la vanguardia peruana de nuestros días: fuerza de carácter, eclecticismo osado y descaro son los tres ingredientes básicos de esta propuesta progresiva tan peculiar a la que vale la pena seguir la pista, claro que sí. 


Muestras de “Mercì Baboon”.-
Elephant Stomp: http://mercibaboon.bandcamp.com/track/elephant-stomp

Wednesday, July 03, 2013

Nadando por las aguas de la vanguardia jazz-progresiva estadounidense con BLUE CRANES


HOLA AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy traemos a colación a la banda estadounidense BLUE CRANES, formada en la localidad de Portland en 2007. En los últimos cuatro años, BLUE CRANES ha publicado tres CDs y un EP: el último de los CDs se titula “Swim” y ha sido publicado recientemente por Cuneiform Records. El grupo está conformado por los saxofonistas Reed Wallsmith y Joe Cunningham (alto y tenor, respectivamente), la teclista Rebecca Sanborn, el contrabajista Keith Brush y el baterista Ji Tanzer. El bloque instrumental no se queda allí, pues a lo largo del álbum hace acto de presencia numerosos invitados aportando más vientos y cuerdas: además, para el último tema ‘Goldfinches’, quienes tocan la batería, el contrabajo y el teclado son otros músicos (Eric Redpath, Sam Howard y Jessica Cooke), además de contar con el guitarrista Kevin DeMarco. Los músicos siempre se mantienen ocupados dentro del grupo así como en proyectos externos, por lo que el grupo ha debido tomarse su tiempo para terminar de grabar y producir este segundo disco, el cual sucede por casi tres años al muy elogiado “Observatories”: ahora “Swim” se encarga de afianzar a BLUE CRANES como fuerza líder de su zona musical. 


Comencemos ahora con el repertorio del disco. Durando casi 3 ½ minutos, ‘Beautiful Winners’ instaura un espectro sonoro elegante signado por una arquitectura melódica limpia. El rol de la batería se torna esencial para aportar variantes a la dinámica general de la pieza por causa de algunos estupendos percusivos en el swing. Acto seguido, ‘Everything Is Going To Be Okay’ empieza con aires crepusculares exquisitamente arropados de sobrios arreglos de metales, para luego remontarse hacia un esquema rítmico ágil y llamativo: es aquí cuando el gancho del motivo central se explota sabiamente a través de los alternados solos de los dos saxos. El momento de ‘Cass Corridor’ es uno de moderada densidad, pues se focaliza en una serie de pulsaciones minimalistas (desarrolladas en un amenazante crescendo) sobre las que los saxos dibujan retazos grisáceos, creando así una atmósfera de inquietud que convenientemente culmina con un cierre abrupto: evidentemente, la banda se ha puesto a explorar áreas del rock-in-opposition al estilo de ART BEARS y el primer ART ZOYD. Como anécdota, cabe mencionar que el invitado al saxo barítono en este tema es Steve Berlin, de LOS LOBOS. ‘Polarnatt’ prosigue por estas aventuras de conceptualismo vanguardista, comenzando con un preludio envuelto bajo un manto relajado que evoca un ambiente funerario, y luego elaborando un cuerpo central bastante dinámico donde el ambiente varía hacia algo etéreo, trabajando con un colorido otoñal que traslada la languidez previa hacia una posición latente. En ‘Great Dane Small Horse’, BLUE CRANES hacen una perfecta síntesis entre la elegancia contemplativa de ‘Beautiful Winners’ y la sofisticación otoñal de ‘Polarnatt’ mientras desarrolla nuevos rumbos de fastuosidad dentro de su esencia estilística (al modo de los momentos más explícitamente esplendorosos del legado de COLTRANE). El rol que cumple el ensamble de cuerdas durante la primera sección de la pieza es crucial a la hora de crear recursos de plenitud y exaltación antes de que llegue una sección más reposada, aunque igualmente signada por una inocultable fuerza de carácter.

 

La dupla evocativa de ‘Soldier’ y ‘For Chris’ inicia el tránsito hacia la segunda mitad del disco. ‘Soldier’ refleja una espiritualidad elegíaca y también romántica: la banda trabaja las orquestaciones de fondo haciéndolas resaltar no para hacerse del rol protagónico sino para realzar el momentum indicado por la base compositiva. La mezcla de chamber-rock y avant-jazz funciona muy bien como fórmula de capitalización de la musicalidad introvertida, y esto se aplica también al caso de ‘For Chris’, una bella composición cuya serenidad inmanente refleja una impactante aura de vulnerabilidad emocional. Con sus casi 9 minutos de duración, ‘Painted Birds’ resulta la pieza más extensa del álbum: se trata de un ejercicio vitalistamente expansivo de un jam muy al estilo de la vieja escuela del jazz-fusion y la tradición del free-jazz: contando con amplias alusiones al modelo del WEATHER REPORT pre-Pastorius en varios de sus pasajes, además de algunas incursiones en chocantes orquestaciones caóticas a lo ZAPPA y algunas leves tendencias R.I.O., pero quitando la habitual tendencia siniestra. El eje central de la pieza es crear sucesivas variantes de colorido bizarro. ‘Goldfinches’ cierra el álbum con un aire sutilmente intenso revestido de una calma casi minimalista: se hace sentir la influencia de TORTOISE un poco, en efecto, se ajusta bastante al estándar del post-jazz. Siendo la última pieza del álbum, se siente como una despedida de buenas noches.  


“Swim” es un discazo, pongamos con palabras breves y directas nuestro balance final: es un gusto para nosotros descubrir a BLUE CRANES a través de ésta, su obra más reciente, y sentirnos consecuentemente motivados a seguir hurgando en las maravillas escondidas que existen en el underground actual del jazz vanguardista estadounidense.


Muestra de “Swim”.-