Monday, December 15, 2025

El nuevo octaedro progresivo de los noruegos GAZPACHO para fines del año 2025



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
En esta ocasión presentamos el nuevo disco del grupo de rock progresivo moderno GAZPACHO, el cual fue publicado por el sello Kscope en el último día del pasado mes de octubre, tanto en CD como en vinilo. El título del disco que hoy nos ocupa es 
“Magic 8-Ball” y la autoría del repertorio contenido en él es compartida por el personal de GAZPACHO en su integridad. El ensamble noruego conformado por Jan Henrik Ohme [voz], Thomas Alexander Andersen [teclados y programaciones], Jon Arne Vilbo [guitarras], Mikael Krømer [violín,  mandolina y guitarras], Kristian “Fido” Torp [bajo] y Robert Risberget Johansen [batería y percusión] despliega en éste, su decimosegundo disco de estudio. Una hinchada bastante numerosa ha conquistado a lo largo de los años esta banda fundada en Oslo en el año 1996, la cual tuvo que esperar hasta el año 2003 para debutar fonográficamente con “Bravo”. Sus discos más celebrados suelen ser “Night”, “Tick Tock”, “Demon” y “Molok” (de los años 2007, 2009, 2013 y 2015, respectivamente). pero su nuevo álbum puede muy bien sumarse a esta lista. En líneas generales, se trata de una nueva exhibición de sinfonismo melódico armado con meticulosas orquestaciones y una buena cantidad de atmósferas amables que establecen nexos entre el (así llamado) neo-prog y el art-pop cristalino del nuevo milenio. Para este disco, Thomas Juth se hizo cargo de la mezcla y Hans Olsson hizo lo propio con la masterización. Veamos ahora los detalles de su contenido.
 

‘Starling’ abre el álbum y es la canción extensa del mismo con su espacio de casi 9 ¼ minutos. Todo empieza con una aureola flotante que va floreciendo de forma sostenida, algo eficazmente concretado por el envolvente protagonismo de los teclados y los muy sutiles desenvolvimientos de los demás instrumentos. Es como si la introspección cósmica y el candor folclórico se fusionasen dentro de un encantador enclave cinematográfico
. Recién en los últimos minutos se deja sentir la energía de la dupla rítmica y los riffs de guitarra, un pico al modo de una balada de PORCUPINE TREE filtrado por el patrón de los PENDRAGON de 1991-2001. Acto seguido llega el turno de ‘We Are Strangers’, cuyas instancias iniciales de sintetizador y vocoder marcan una senda de cándida agilidad que ya conocemos de discos anteriores de GAZPACHO. El desarrollo  melódico  es suficientemente llamativo. Las conexiones estilísticas con FROST, NO-MAN y COLDPLAY van fluyendo a través de un dinamismo instalado sobre un esquema rítmico moderadamente sofisticado; las síncopas están armadas con precisión milimétrica a fin de realzar el encanto propio del núcleo temático. ‘Sky King’ ostenta una espiritualidad semejante a la de la canción precedente, pero los arreglos están más cercanos a las proyecciones cinematográficas de la canción inaugural. Las vibraciones evocadoras de la composición se hacen notar con fluidez y claridad impolutas. ‘Ceres’ exhibe desde el primer instante una gracilidad renovadora en su esquema compositivo, siendo así que el foco rítmico sosegado ayuda a dicho esquema a centrarse en una gentileza envolvente. Esta canción está muy imparentada con el paradigma de los MARILLION de inicios del milenio y, una vez más, también con FROST. ‘Gingerbread Men’ vira totalmente de registro para encauzarse por una ambientación ceremoniosa que, una vez más, nos remite a los ecos de la primera canción. Eso sí, la dupla rítmica se encarga de proveer un elemento propiamente rockero al asunto, algo bastante oportuno para el realce de los aspectos psicodélicos que emergen en ciertos pasajes estratégicos: éstos son los más aguerridos del repertorio del disco que hoy nos ocupa. 
 
  

Durando poco más de 3 minutos, ‘8-Ball’ se dedica a exhibir una fluida mezcla de grooves circenses y aires de cabaret. De esta manera,  la banda perpetra un recurso de color travieso que aporta variedad al esquema integral del disco. Algunas comedidas florituras del bajo se asocian perfectamente con ciertas armonías del teclado. La dupla final de ‘Immerwahr’ y ‘The Unrisen’ sirve para que el grupo eleve el nivel de colorido musical dentro de su armazón sónico. La primera de estas piezas mencionadas se erige como una solemne balada sinfónica cuya aureola solemne se impone con debida delicadeza. En las instancias finales se da un controlado incremento de la musculatura rockera, lo cual permite a la canción elevarse a un clímax estilizadamente denso donde el centro melódico gana nuevos matices. La pieza conclusiva es aún más solemne e introspectiva: reabre espacios de explayamiento cinematográfico e incorpora algunas tonalidades folclóricas al galante esquema melódico diseñado para la ocasión. También hay un breve intermedio sinfónico que nos remite a THE ENID y GENESIS, un pasaje que, aunque breve, define el sendero hacia un atractivo epílogo suntuoso y evocador. Y... ¿si esta canción hubiese durado un poco más? Es lo que hay y no queda más por hacer; al gin y al cabo, el disco concluyó con su cénit decisivo. Todo esto fue lo que se nos brindó en 
“Magic 8-Ball” desde los cuarteles del sexteto GAZPACHO para fines de este año 2025. Puede que se trate de una de sus obras fonográficas más notables dentro de una trayectoria ya bastante amplia, tal como dijimos en el primer párrafo de la presente reseña. Un disco muy placentero, realmente. 
 
 
Muestras de “Magic 8-Ball”.-
Starling: https://www.youtube.com/watch?v=j0V_UfT1ZxE

Saturday, December 13, 2025

Las huellas que dejó la banda británica NEKTAR en su periplo suizo de 1973


 
HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

En esta ocasión echamos una mirada atrás a la historia del rock progresivo británico para detenernos en un periplo suizo que realizó el grupo NEKTAR en 1973, so pretexto de la publicación del doble CD + DVD “... Sounds Like Swiss”. Aquí se testimonia un momento de la trayectoria de su quinteto clásico de Roye Albrighton [guitarras y voz], Derek “Mo” Moore [bajo y coros], Allan “Taff” Freeman [órgano], Ron Howden [batería] y Mick Brockett [efectos visuales]. El centro de este ítem es un concierto registrado en The Palladium de Ginebra el 14 de febrero del susodicho año 1973, registrado para un programa televisivo, pues aparece tanto en el volumen 2 del doble CD como en el vídeo; pero también aparecen los contenidos de un concierto ulterior que tuvo lugar en el Pavilion des Sports de Lausana del 5 de mayo. Era un tiempo en que la banda estaba promocionando su doble álbum “Sounds Like This”, tercer ítem de estudio de su trayectoria, aunque ya estaba preparando nuevo material para el que habría de ser su célebre álbum conceptual de fines de ese mismo año 1973 “Remember The Future”, a la sazón, su obra más famosa (más detalles en un párrafo posterior). “... Sounds Like Swiss” fue publicado por el sello estadounidense Beyond Before a inicios de octubre del año 2021. Los Sres. Moore y Howden (este último todavía vivo en aquel entonces) se encargaron de escribir las anotaciones del libro que acompaña a la edición. Ellos anotan que el doble álbum “Sounds Like This” había sido grabado en la localidad alemana de Stommeln una semana antes del concierto de Ginebra, por lo que prácticamente se inauguró allí la temporada de promoción del mismo. Siendo un grupo británico fundado en Alemania, el país vecino Suiza era muy recurrente en sus giras europeas; recuerdan a Ginebra como una ciudad muy bella donde dieron algunos de sus mejores conciertos y donde gozaron de estupendos manjares locales. También fue allí donde se enteraron del fallecimiento del héroe guitarrista Jimi Hendrix, amigo de NEKTAR, el 18 de setiembre de 1970, cuando todavía estaba el grupo preparando su álbum debut “Journey To The Centre Of The Eye”. Fue en su honor que compusieron ‘Squeeze’ y ‘Jimi Jam (Mr. H)’, temas que luego se incorporaron a la suite ‘A Day In The Life Of A Preacher’, la pieza más épica del mencionado álbum doble. 


Repasemos los detalles del recital de Ginebra que aparece en el DVD, un programa televisivo emitido en blanco y negro, quedando así para la posteridad. Mientras los primeros efectos de luz crean un ambiente onírico, el grupo inicia el evento con una pieza tan ostensiblemente ceremoniosa como ‘Cast Your Fate’; la calmada ambientación inicial abre campo a un cuerpo central que es una balada existencialista que parece establecer nexos entre PINK FLOYD y GENESIS, siempre con esa energía propia de la banda que hoy nos ocupa. Las alegres vibraciones del epílogo no sólo tienen un encanto especial, sino que también prepara el terreno para la emergencia de ‘A Day In The Life Of A Preacher’, con sus secciones ‘Preacher’, ‘Squeeze’ y ‘Jimi Jam’; esta última varía su título original de Mr. H’ que aparece en “Sounds Like This”, y de hecho, tal como dijimos más arriba, es un tributo póstumo a Jimi Hendrix. Para nosotros, se trata del tema más logrado de ese tercer álbum de estudio y esta actuación es buen ejemplo de la solidez persistente y contundente que se desarrolla en cada uno de los centros temáticos que se van hilando. Los momentos más vitalistas son algunos de los más esplendorosos de esta actuación. ‘Good Day’ exhibe nostalgia y esperanza al unísono a través de su sencillo centro melódico, el cual se siente muy envolvente. Hay un aura pastoral en su espíritu aunque la instrumentación es ostensiblemente rockera. NEKTAR vuelve a enfatizar su faceta más épica con ‘Desolation Valley / Waves’: ampliamente centrada en un cuerpo central parsimonioso, el grupo encuentra espacios estratégicos para encender el pathos latente y llevarlo al frente. Los momentos en los que se luce el bajo sirven para enriquecer el núcleo melódico y los factores jazz-rockeros exudan una majestuosidad muy peculiar. ‘1-2-3-4’ transmite un mensaje antibelicista sobre un jam muy expansivo cuyas cadencias funk-rockeras predominantes bien nos pueden remitir a algunos aspectos de URIAH HEEP, LED ZEPPELIN y GRAND FUNK RAILROAD. Los diálogos entre guitarra y órgano se articulan con suficiente vigor mientras la dupla rítmica mantiene una solidez bastante solvente. 


La instancia final de este largo jam se encadena con el riff inicial de ‘Crying In The Dark / King Of Twilight’, un ítem bastante idóneo para remodelar los ecos de mágica extroversión de la canción precedente bajo una ingeniería musical mucho más señorial. Todo fluye naturalmente a través de una consistente combinación de garra rockera y estilización progresiva. Otro culmen del evento, es como si esta doble canción no pudiese fallar nunca. ‘Do-Da-Dum’ – parte de la extensa pieza ‘Odyssee’ de “Sounds Like This” – no llega a aparecer completa por el corte de la transmisión televisiva, de hecho, es muy poco lo que queda para la posteridad, aunque sí queda claro que se trata de una canción bastante pesada, casi a lo BLACK SABBATH. Ahora revisamos el material de audio, el cual se recoge en el primer volumen entero del CD doble y al inicio del segundo: su calidad de audio no es precisamente estupenda, pero se pueden apreciar rastros del vigor entregado en esta actuación por el grupo. Tras una breve presentación, el concierto de Lausana se pone en marcha con una síntesis de la primera mitad (y un poco más) de la tremenda suite conceptual ‘Journey To The Centre Of The Eye’, la obra que supuso el excelso debut fonográfico para NEKTAR. Desde ‘Prelude’ hasta ‘The Dream Nebula’, la senda musical es transitada con pulso firme: los músicos transmiten el diverso engranaje compositivo con una apropiada mezcla de musculatura y elevación lisérgica. El majestuoso dramatismo de ‘Astronaut’s Nightmare’ se completa más allá de su fin concreto con las sucesivas manifestaciones de en el romanticismo mayormente etéreo ‘Countenance’ y la gracilidad cuasi-barroca de ‘The Nine Lifeless Daughters Of The Sun’. Las excursiones aleatorias de ‘Warp Oversight’ preparan el terreno para una nueva emanación de vibraciones dramáticas a ser vertida en el cierre de esta síntesis. En sí mismo, este ítem es el elemento central del doble CD. ‘Desolation Valley / Waves’ se engarza con el final de ‘The Dream Nebula’, siendo ejecutada con dosis mayores de ímpetu, lo cual sirve para explicitar los aspectos más densos de la visión musical del grupo. Las cosas se ponen más aguerridas, como no podía ser de otra manera, con ‘A Day In The Life Of A Preacher / Squeeze / Jimi Jam’, una pieza arqutípicamente expansiva y poderosa dentro del canon histórico de la primera fase de NEKTAR. Habiendo conquistado un cénit de vigor expresivo, la banda lo perpetúa con ‘Crying In The Dark / King Of Twilight’. Cómo no, el público lo agradece con ovaciones emocionadas. 


Una agradable sorpresa es la aparición de ‘Let It Grow’, composición que pronto habría de constituir la última sección de la suite homónima de “Remember The Future”, una muestra de que la gente de NEKTAR seguía imparable con su llama creativa con miras a un disco sucesor. Recién en el mes de agosto se pondría el grupo a preparar el disco en cuestión; por lo pronto, esta pieza contaba ya con una extensión considerable de más de 10 minutos, una actitud expansiva que ulteriormente fue cortada en su definitiva versión de estudio. Hilándose con lo precedente por vía de una sólida excursión jazz-progresiva, la secuencia de ‘Odyssee’, el solo de batería ‘Ron’s On’ y ‘Never, Never, Never’ sirve para que los músicos sigan ejercitando sus hábitos de fraternidad rockera en jams de largo aliento con un filudo norte expresivo donde lo psicodélico y lo pesado se fusionan en una sola fuerza. Es prácticamente una pieza hermana de ‘A Day In The Life Of A Preacher’, casi igualándola en prestancia. El segundo tema del volumen 2 es ‘Do You Believe In Magic’, una canción extrovertida cuya entrañable calidez melódica que termina quebrada por un giro lisérgicamente explosivo guiado por la guitarra, cierra idóneamente el concierto de Lausana. El resto del volumen 2 está ocupado por casi todo lo que apareció en el DVD. Todo esto fue el testimonio aqueológico de ese periplo suizo de la legendaria banda NEKTAR en la primera mitad de ese año 1973: “... Sounds Like Swiss” es un ítem muy valioso no sólo para los fansa de la banda en todo el mundo sino para los coleccionistas e investigadores del desarrollo del rock progresivo europeo de primera generación. Roger Houdaille, quien descubrió ete registro televisivo que se creía perdido, también se hizo cargo de la masterización a partir de las mezclas originales realizadas por Vinnie Schmid. La portada y los diseños de los paneles son de Eddie Yesongs. Una de las fotos es de una reseña periodísica sobre un concierto de NEKTAR en Berna de inicios de marzo de ese año 1973, otro indicio histórico de ese tiempo mágico y prolífico. Bueno, aquí está este ítem para ser apreciado e integrado en cualquier buena fonoteca / videoteca de rock artístico de todos los tiempos y lugares.


Muestras de “... Sounds Like Swiss”.-
Cast Your Fate [en Ginebra]: https://www.youtube.com/watch?v=2PsF4QjgPDw

Thursday, December 11, 2025

GODSPEED YOU! BLACK EMPEROR: música sin nombre contra las guerras eternas



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA. 

Llega un poco tarde esta humilde reseña, pero, a fin de cuentas, llega: he aquí nuestro comentario sobre “"NoTitle As Of 13 February 2024 28,340 Dead"”, disco publicado a inicios de octubre del pasado año 2024 y que es el más reciente trabajo de estudio del ensamble canadiense GODSPEED YOU! BLACK EMPEROR. La publicación fue producida por el sello independiente Constellation tanto en CD como en doble vinilo. El copioso ensamble instrumental conformado por Thierry Amar [bajo y contrabajo], David Bryant [guitarra y efectos de cinta], Aidan Girt [batería], Timothy Herzog [batería y glockenspiel], Efrim Manuel Menuck [guitarra y efectos de cintas], Michael Moya [guitarra], Mauro Pezzente [bajo] y Sophie Trudeau [violín] completa su visión musical con las participaciones de Karl Lemieux y Philippe Léonard en las proyecciones fílmicas que tienen lugar en los conciertos. Jace Lasek se hizo cargo de la ingeniería de sonido y la mezcla del material aquí contenido, mientras que Harris Newman realizó la posterior masterización en el estudio Grey Market. El manifiesto conceptual de “"NoTitle As Of 13 February 2024 28,340 Dead"” es antibelicista del mismo modo que persiste en las percepciones anarquistas y antisistema que el grupo siempre ha proclamado con sus obras musicales, poniendo en su mira a las superpotencias de siempre: “NO TITLE = What gestures make sense while tiny bodies fall? / What context? What broken melody?”“The sun setting above beds of ash / while we sat together, arguing. The old world order barely pretended to care. / This new century will be crueler still.” La foto de la portada fue tomada por Stacy Lee. Considerados todos unos monarcas del post-rock mundial, los músicos de GODSEEPD YOU! BLACK EMPEROR se han vuelto a lucir en éste, su octavo trabajo fonográfico de estudio, pero mejor es que pasemos ahora a sus detalles estrictamente musicales.


El repertorio de “"NoTitle As Of 13 February 2024 28,340 Dead"” comienza con ‘Sun Is A Hole Sun Is Vapors’, una pieza que desde sus instancias iniciales revela recursos abstractos de tensión, lo cual facilita la ´pronta emergencia de robustos riffs de guitarra: de hecho, hay un vitalismo ínsito en su envolvente ceremoniosidad, la cual orienta sobriamente la expansión sónica a ser completada por los demás instrumentistas bajo una aureola cuasi-mística. Sigue a continuación ‘Baby’s In A Thundercloud’, tema que dura más de 13 ½ minutos y que se erige como el más extenso del disco. Tras un breve momento de ruidos de bombardeos, el grupo realiza un ejercicio de matices y ambientaciones avant-jazzeras en clave progresiva durante el transcurso de más de la mitad de la expansión temática. Hay un fulgor patente en el modo en que se conectan todos los instrumentos en su aristocrático entramado, algo que los conecta con el paradigma de los KAYO DOT de la fase 2008-12, pero con una garra añadida que se enraíza en la serie de los tres primeros álbumes de los propios GY!BE. Eso sí, esa luz sónica deja entrever una mezcla de rabia y tristeza que, a fin de cuentas, se muestra de forma desnuda durante un etéreo interludio. Desde este nuevo posicionamiento, el ensamble siembra el camino para la emergencia de un torrente rockero aún más aguerrido. El fulgor sigue allí, pero ya no es luz espiritual, es hoguera tanática donde la aflicción se deja arropar por la decadente majestuosidad de un palacio en ruinas que perdió todo el brillo áureo de antaño. Sólo cuando termina esta jornada nos damos cuenta de que hemos estado confrontados a una elegía. Gran cénit del álbum. También es la tercera pieza particularmente larga: dura 13 ¼ minutos y se titula ‘Raindrops Cast In Lead’. Todo comienza muy calmado, casi en silencio, mientras los iniciales retazos de cuerda y percusión, muy tenues ellos, revelan un extremo sigilo antes de que el ensamble íntegro irrumpa con solemne musculatura a poco de pasada la frontera del tercer minuto: en este despliegue de garra resuenan ciertos ecos de los ASH RA TEMPEL de primera generación. La artista plástica y curadora de arte portorriqueña Michele Fiedler Fuentes aporta una narración en español a unos de los relajados pasajes que siguen a continuación, una ilación de lirismos trágicos y, a la vez, vulnerables. Una vez que se agitan las cosas, la musculatura colectiva apela a una agilidad climática y machacona que más tiene de space-rock que del (consabido) post-rock. ¿Y esta especie de tributo a HAWKWIND? ¿Cómo surgió? Se elevó desde sus cimientos sin que el oyente lo viera venir a lo lejos. Sublime, simple y llanamente sublime. Otra pieza destacada del álbum.

‘Broken Spires At Dead Kapital’ es una contraparte total a las secuencias de destellos fastuosos que se manifestaron en los dos temas anteriores; su esquema consiste en una exploración minimalista de ambientes contemplativos con talante sombrío. El hermanamiento de las guitarras y el violín refleja una espiritualidad lúgubre mientras los efectos percusivos aportan un aire abstracto al asunto. ‘Pale Spectator Takes Photographs’ brota de esta atmósfera para elaborar otro despliegue de suntuosidad avant-rockera. Las vibraciones ritualísticas que marcan a la primera sección de este viaje instrumental hacen emanar una ansiedad tanática, y una vez que se instaura un esquema rítmico reconocible, el ensamble se dispone a articular un viaje psicodélico con aires fusionescos de tendencia asiática. En algún momento, se aprovecha la ocasión para que el grupo coquetee abiertamente con el stoner y el noise-rock en simultáneo, concretando una mezcla perfecta de nervio neurótico y densidad; el tempo en 7/8 renueva la situación con un enfoque más explícitamente arquitectónico, progresivamente emparentado con KING CRIMSON y AGITATION FREE. El remanso final revela una arcana expresión de nocturnidad. ‘Greu Rubble – Green Shots’ trae consigo el cierre del repertorio con una reiteración de las atmósferas predominantes en el tema #2, haciendo que el factor de solemnidad reflexiva se realce un poco más. La belleza de los últimos acordes de las guitarras es sumamente evocadora. Todo esto fue lo que se nos brindó en “"NoTitle As Of 13 February 2024 28,340 Dead"” desde los cuarteles de GODSPEED YOU! BLACK EMPEROR hace ya más de un año. Se nos pasó en su momento, pero mejor es tarde que nunca cuando se trata de seguir la pista de este veterano y siempre desafiante ensamble franco-canadiense que desde hace mucho tiempo reina como figura señera de la vanguardia rockera de América del Norte. Si la coyuntura mundial en términos de poder, sociedad y gestión pública es la sempiterna fuente de inspiración para este ensamble, entonces no está faltando motivación para sus expresiones de descontento y ansiedad cívica a través del lenguaje musical. En suma, la gente de GY!BE sigue en buena forma creativa y, como resultado de ello, este disco es bastante recomendable: posiblemente, se trate de una de sus obras más notables dentro de una larga historia cuyos orígenes se remontan a la primera mitad de los 1990. 


Muestras de “"NoTitle As Of 13 February 2024 28,340 Dead"”.- 

Monday, December 08, 2025

SPOCK’S BEARD: álbum #14, el número del optimismo para la escena progresiva estadounidense


 
HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.           
 
Ad portas del final del año 2025 llega “The Archaeoptimist”, el nuevo trabajo fonográfico de la veterana banda estadounidense SPOCK’S BEARD, una de las más notables y prolíficas dentro del ambiente progresivo nortemaericano desde la década de los 90. El disco en cuestión fue publicado por el sello Madfish tanto en CD como en doble vinilo (colores negro y rojo) el 21 de noviembre último. Afirmando su formato histórico de quinteto, la alineación actual de SPOCK’S BEARD consiste en Ted Leonard [voz y guitarra], Alan Morse [guitarras y coros], Ryo Okumoto [teclados], Dave Meros [bajo] y Nick Potters [batería y coros]. Se trata del debut de este último en las filas de la banda tras algunos años de estadía de Jimmy Keegan (de PATTERN-SEEKING ANIMALS) y un breve retorno de Nick D’Virgilio. Algunos aportes adicionales de guitarra acústica fueron hechos por Michael Whitman, colaborador performativo que también colaboró muy activamente en el proceso de composición del nuevo material junto a Okumoto. En este nuevo disco es el buen Ryo el principal instigador de este nuevo paso en la inmensa trayectoria de SPOCK’S BEARD pues, de hecho, las labores de producción de ”The Archaeoptimist” estuvieron en sus manos. Bien es verdad que Meros y Leonard se mantuvieron bastante ocupados con ”Friend Of All Creatures”, el disco que gestó PATTERN-SEEKING ANIMALS para el primer cuarto de este mismo año 2025. Volviendo a ”The Archaeoptimist”, Rich Mouser fue el encargado de la mezcla y la masterización; mientras tanto, Carl Glover es el autor del arte gráfica. Bueno, repasemos ahora los detalles de su contenido musical.  


‘Invisible’ ocupa los primeros 6 ½ minutos del repertorio. El cántico a capella introductorio abre camino a la irrupción de la escalada del órgano Hammond para que se instale un posicionamiento grupal fastuoso sobre una ingeniería rítmica sofisticada. Los bien perfilados vericuetos de la dupla rítmica ostentan una musculatura muy idónea para transmitir el vigor oportuno al esplendor progresivo que se va explayando. Los teclados son los principales proveedores de color musical a esta cumbre inaugural. Sigue a continuación ‘Electric Monk’, pieza que cumple con la meta de instalar un giro un poco más ágil a esa mezcla de extroversión y densidad que ya se hizo presente en el primer tema. De hecho, hay algún pasaje sereno que revela un lirismo bastante envolvente. Lo que suena aquí es como un regreso al estándar de los SB durante la etapa 1998-2000 y, muy verídicamente, se podría también decir algo muy similar sobre ‘Afourthoughts (Thoughts Part 4)’. Esta tercera canción del álbum desarrolla un bien articulado entramado de sinfonismo, jazz-prog y estilizadas atonalidades dentro de un dinamismo muy propio del paradigma de GENTLE GIANT. Es algo que se dio muy bien a los SB de los primeros años y que hoy en día vemos también en bandas como ADVENT, CICCADA y BUBBLEMATH. Okumoto sigue bastante suelto en su empoderamiento del núcleo central de los arreglos instrumentales colectivos. No puede faltar, claro está, el juego de vivaces contrapuntos vocales que aluden a las corrientes de conciencia.* Cuando llega el turno de ‘St. Jerome In The Wilderness’, el ensamble se dispone a sintetizar los grooves,  esquemas grupales y cadencias más fulgurosas de los dos primeros temas. También se nota una dosis incrementada de robustez en el momento del solo de guitarra y su encuadre circundante; esto, a su vez, impulsará un dinamismo renovada para el subsiguiente solo de Hammond. Muy emparentado con los DREAM THEATER de los 90, cabe resaltar. El talante un tanto ceremonioso de la sección epilogar obliga al esquema instrumental a apelar a un swing lento con un bien definido enclave Yessiano: aunque nos resulta demasiado breve, su resolución parece adecuada para el aterrizaje final de los suntuosos vuelos rockeros que se hilaron en el transcurso del segundo tercio y gran parte del último. El gozo místico es explícito: “Reunited, rejoined, reassembled, restored. / Icon that was quintisected / Is made whole once more.”

 

La suite homónima ocupa un espacio de casi 21 minutos y contiene las secciones ‘The Fates Have Spoken’, ‘The Adventurous Child’, ‘The Child Has Grown’, ‘The Leader’, ‘Voice Of Reason’, ‘The Successor’ y ‘The Acceptance Speech’.
‘The Archaeoptimist’ empieza con un golpe de guitarra y un enfilamiento sistemáticamente enérgico del resto de los instrumentos que se unen instantáneamente al efluvio emergente. Todo está armado para concretar un despliegue de fuego rockero donde los recursos más contundentes del sonido grupal se vuelven a activar. La primera sección cantada es serena y reflexiva, muy signada por influencias de las facetas más introspectivas de los paradigmas de YES y GENESIS de la primera mitad de los 70. Algunos acentos pastorales entran a tallar con delicada autoridad antes de que emerjan unos ornamentos de teclado ad portas de la frontera del quinto minuto y se active una nueva irrupción de estilizados dinamismos progresivos. De hecho, las dos secciones cantadas siguientes se instalan sobre sendos grooves ágiles, asumiendo un swing tirado al  jazz-pop. Más adelante, las cosas se ponen más pesadas, casi coqueteando con el paradigma de DREAM THEATER, terminando todo con un epílogo ceremonioso y rotundamente fastuoso. ‘Next Step’, que dura cerca de 11 minutos, trae consigo el cierre del disco. Tras un preludio de piano donde confluyen lo romántico y lo barroco más un interludio colectivo signado por agitaciones majestuosas al más puro estilo sinfónico, el enclave grupal instala un groove rockero bastante llamativo donde se alternan pasajes ágiles y solemnes con consistente fluidez. De hecho, se notan los ecos de la suite precedente, especialmente durante el extenso interludio intermedio que emerge con aristocrática autoridad entre las respectivas fronteras de los minutos sexto y noveno. 
 

Todo esto fue lo que se nos brindó desde los cuarteles de SPOCK’S BEARD con “The Arcaheoptimist” para estas instancias finales del año 2025. Siendo este álbum de estudio #14 tan rico en vigor expresivo y detalles melódicos, bien podría designarse al número catorce como el de la buena suerte para el rock progresivo estadounidense de nuestros días. SPOCK’S BEARD sigue siendo una presencia prominente en el rock artístico de su país a través del paso de las décadas y sus cambios de alineación. 



** Es el patrón inaugurado en ‘Thoughts’ del álbum “Beware Of Darkness”, del año 1996, y reiterado unos años después en el álbum “V” con ‘Thoughts (Part II)’, año 2000. El título de esta canción de “The Archaeoptimist” se vincula con ‘Afterthoughts’, canción del álbum “Brief Nocturnes And Dreamless Sleep”, el disco de 2013 que marcó el debut de Leonard en SPOCK’S BEARD.

Friday, December 05, 2025

La maestría resucitada del grupo noruego MAGIC PIE


 
HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy se da la ocasión de presentar el nuevo disco del grupo noruego MAGIC PIE, un auténtico disco de retorno tras un tiempo de silencio que duró 6 años, todo el tiempo que pasó desde la publicación de su quinto álbum de estudio Fragments Of The 5th Element ”“Maestro ” es el título del disco que ahora reseñamos: fue publicado por el sello Karisma Records tanto en CD como en vinilo, a mediados de marzo de 2025. El colectivo vigente de MAGIC PIE está conformado por Lasr Petter Holstad [bajo y coros], Martin Utby [batería], Kims Stenberg [guitarras y coros], Erling Henanger [teclados y coros] y Eiríkur Hauksson [primera voz]. Parece mentira que hayan pasado 20 años desde su debut fonográfico “Motions Of Desire”, el disco de la manzana que se erigió como un gran referente para el prog melódico moderno dentro del revival escandinavo del nuevo milenio, pero es que el tiempo pasa, y, de todas maneras, la gente de MAGIC PIE demuestra tener un entusiasmo genuino con miras a esta nueva fase de su carrera. El guitarrista Stenberg fungió de productor para el disco que hoy nos ocupa, mientras que el trabajólico músico e ingeniero de sonido Jacob Holm-Lupo estuvo a cargo del proceso de mezcla; Rich Mouser realizó la remasterización. Veamos ahora los detalles de su contenido. 


El repertorio de “Maestro” empieza con la monumental maratón ‘Opus Imperfectus Pt.1 – The Missing Chord’, suite que dura casi 18 ½ minutos. Una majestuosa fanfarria de teclados que se sitúa a medio camino entre los paradigmas de ARENA y PÄR LINDH PROJECT, el ensamble instala sus recursos de sofisticada robustez sobre una razonablemente compleja ingeniería rítmica. La primera sección cantada se asienta dentro de un bloque prístinamente lírico que se emparenta con la línea de trabajo de SPOCK’S BEARD, lo cual abre la puerta a una fluida alternancia entre pasajes ágiles y otros ceremoniosos. El señorío de los solos y riffs de guitarra se asocia con el dinamismo de la batería para sostener el versátil organigrama instrumental, aunque son patentemente los teclados quienes llenan más espacios a lo largo de los desarrollos multitemáticos. Algunos pasajes más aguerridos coquetean con el estàndar del prog-metal; cabe destacar, en general, el cuidado de los diversos  perfiles  melódicos que surgen a lo largo del camino. La hilera de motivos instrumentales que se inicia alrededor de la frontera del minuto 11 marca una pauta alternada de devaneos con el prog-metal y el jazz-rock Esta sección opera eficazmente como un electrizante contrapeso frente al epílogo introspectivo de esta tremenda suite, el cual se enriquece bastante con los estilizados arreglos vocales con los que se emite el mensaje final. Tras este gran viaje musical, emerge ‘By The Smokers Pole’, una llamativa balada cuyas vibraciones evocadoras se dejan cubrir por un entramado sereno. Éste empieza muy etéreo y más adelante se suelta en un fulgor melódico guiado por el nutrido solo de guitarra. ‘Name It To Tame It’ exhibe una pesadez renovadora para el esquema grupal sobre un efectivo medio tiempo, casi emparentándose con URIAH HEEP y DEEP PURPLE. Más adelante, algunos arreglos rítmicos basado en síncopas progresivas y algunos artilugios melódicos del sintetizador incorporan factores extravagantes a una canción que ya tiene claro que quiere volar más allá de las fronteras expresivas sostenidas en los tres primeros minutos. Todo vuela, en efecto, hacia una dimensión más compleja mientras la segunda mitad de la canción muestra todo su señorío sin tapujos de ningún tipo. Un cénit decisivo del disco. 
 

‘Kiddo…’ es una miniatura de poco más de 2 minutos que es básicamente una balada folk-rockera que preserva los elementos más emotivos de la suite con la que se abrió el álbum. De esta manera, la instalación de su última nota abre camino inmediato al arribo de la muy marchosa canción ‘Someone Else’s Wannabe’, la cual suena inicialmente como si una canción a medio terminar de los MARILLION de 1984 hubiera sido rescatada y remodelada por un colectivo de músicos de los RAINBOW de los 80 y los SPOCK’S BEARD de fines de los 90. La banda se siente cómoda realizando este trayecto por el terreno del hard rock melódico mientras sazona el centro melódico con ornamentos de teclado. A lo largo de lcamino, sendos solos de órgano y sintetizador incrementan dinamismo inherente al núcleo temático, lo cual realza el potencial de estilización progresiva hacia el que el grupo vira en los dos últimos tercios. Aunque hay evidentes aires de familia con ‘Name It To Tame It’, aquí predomina la sensación de que hay una síntesis de los pasajes más extrovertidos de la suite inaugural. Cuando llega el turno de ‘Everyday Hero’, nos topamos con una canción que perpetúa el acento de vivacidad portado en el primer tercio de la canción precedente, aunque con un espíritu más liviano. Si imaginamos a unos THIN LIZZY que coquetean simultáneamente con DREAM THEATER y GENESIS, pues a eso mismo suena esto. Un cambalache muy bien estructurado, cabe decir. Los últimos 4 ¼ minutos del repertorio están ocupados por ‘Opus Imperfectus Pt.2 – Maestro’, la coda de la suite que lo abrió. Se retoma un poco del esplendor  ceremonioso con el que aquella terminó, pero aquí  se impone una masiva reacción de la faceta más muscular del grupo: no faltan los elegantes solos de sintetizador y guitarra mientras el núcleo central exhibe su garbo intrínseco. Todo esto fue lo que los veteranos maestros de MAGIC PIE nos brindaron con los 49 minutos y pico de música encapsulada en “Maestro”, una manifestación solvente de su resucitada creatividad musical que recomndamos de buena fe para cualquier buena fonoteca dedicada al rock progresivo de todos los tiempos.
 
 
Muestras de “Maestro”.-

Tuesday, December 02, 2025

BIOSCOPE: la consagración compartida de Thorsten Quaeschning y Steve Rothery


 
HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy tenemos la estupenda oportunidad de hablar de un proyecto que ha llamado mucho la atención desde el momento de su anuncio: BIOSCOPE, el dúo conformado por Steve Rothery (a quien conocemos mayormente por MARILLION, junto a su propio proyecto THE WISHING TREE) y Thorsten Quaeschning (veterano alemán de la vanguardia electrónica que actualmente funge de líder de TANGERINE DREAM). “Gentō” es el nombre del disco de este dúo, el cual se publicó el pasado 22 de agosto por vía del sello alemán Ear Music, tanto en Cd como en vinilo; también hay una edición especial de CD con Blu-ray. Es Quaeschning quien invita a Rothery a investigar en la electrónica contemporánea para darle un renovador punche rockero a los enfoques de predominante línea prog-ambient que conforman el repertorio de “Gentō”. Quaeschning se hace cargo de los sintetizadores y secuenciadores, y Rothery hace lo propio con las guitarras: se les une Alex Reeves a la batería.* Todos los temas aquí contenidos fueron compuestos y producidos por Quaeschning y Rothery; a ellos se les unió Andy Bradfield para las labores de producción y mezcla en los legendarios estudios Abbey Road. 


El repertorio de “Gentō” comienza con la suite tripartita ‘Vanishing Point’: la última parte de ella dura poco más de 10 ½ minutos, erigiéndose como el ítem más extenso del disco. ‘Part 1’ inicia las cosas con un acento tribal en las secuencias armónicas y rítmicas mientras los guitarreos van asentando una atmósfera elegante y evocadora. Así las cosas, ‘Part 2’ se encauza a paso firme por esta estrategia expresiva mientras la señorial agilidad inherente a la composición se afianza convincentemente. Los fraseos de la guitarra de Rothery empujan al desarrollo del enclave sintetizado a incrementar su colorido sónico en los pasajes más intensos, estratégicamente ubicados tras un sección serena de clara motivación cósmica. La Tercera Parte sirve para que elementos de space-rock se inserten sólidamente en el entramado sonoro mientras la batería usa algunos grooves de inspiración jazz-rockera dentro de la arquitectura musical en curso. El vitalismo abierto que se explayó con un aura tan aristocrática en la Parte anterior se remodela aquí con un recurso de sutileza que sirve para que el dúo desarrolle un ambiente crepuscular signado por lo contemplativo. Es el cierre perfecto para la suite inaugural del álbum. Estamos prácticamente en e terreno de los TANGERINE DREAM de la fase 1980-82 con algunos elementos añadidos de los OZRIC TENTACLES de inicios del nuevo milenio. ‘Gentō’ sigue a continuación para desarrollar nuevos subterfugios de esplendor sónico, siendo así que las secuencia sintetizadas tienen un filo más ácido: así las cosas, la guitarra decide empezar sus excursiones con retazos sobrios que casi se ubican en un perfil bajo. Una vez definido el esquema rítmico, se revela un swing razonablemente complejo mientras la amalgama de teclados y guitarra va aumentando el tormentoso efluvio de murallas etéreas hasta que ésta se diluye en un cálidamente estruendoso minimalismo flotante. Las dos Partes de la suite ‘Kinetoscope’ ocupan conjuntamente un espacio total de más de 12 ½ minutos. Todo empieza con lo que parece ser un regreso al hálito evocador de ‘Vanishing Point’ que se instaló sobre un groove tribal. El lirismo es más intensivo, estando los sintetizadores posicionados en un rol dialogante con la guitarra. La Segunda Parte es un poco más cáustica: las atmósferas mayormente se desvanecen mientras la guitarra ocupa un rol un poco más asertivo dentro de un bloque sonoro cibernético.


La suite justamente titulada ‘Bioscope’ también es tripartita. La Parte 1 delinea y elabora un ejercicio de luminosa extroversión psicodélica que se encuadra fluidamente dentro del persistente esquema de trabajo electrónico-ambiental. Las precisas puntuaciones de la guitarra acentúan el llamativo núcleo melódico de este enclave musical que parece establecer conexiones entre los TANGERINE DREAM de los primeros 80 y los PORCUPINE TREE de los dos primeros álbumes. La Parte 2 activa un incremento de la agilidad para establecer una nueva musculatura al esquema sónico del ensamble, lo cual sirve para realzar el factor progresivo dentro de lo que ya se está afianzando como un viaje space-rockero. La tercera y última Parte se orienta hacia un candor melódico que parece insertar algunos aires sinfónicos a lo que queda de este trayecto particular. El tránsito hacia la serenidad contemplativa proyecta una luminosidad sosegada donde los guitarreos se elevan cuales nubes otoñales y los sintetizadores gestan una orquestación ensoñadora. Los últimos 5 minutos del repertorio están ocupados por ‘Kaleidoscope’, una canción plenamente rockera que se orienta hacia un hipotético híbrido entre los MARILLION de la etapa 2001-04 y los PORCUPINE TREE de la fase 1999-2000, añadiéndose algunos mecanismos extrovertidos de eso que se suele llamar post-rock. Los sintetizadores están ahora para aportar matices garbosos a la alegría reinante. Con la doble columna de los riffs guitarreros y el gentilmente ágil swing de la batería, se sustenta un genuino despliegue de fulgores matutinos: más allá del amanecer, el cielo deja manifestarse a un esplendor vigoroso para el cierre del álbum. Todo esto fue lo que se gestó en “Gentō” en los cuarteles de BIOSCOPE, la asociación de Thorsten Quaeschning y Steve Rothery que realizó una labor de consagración del prog-ambient con una majestuosidad especial, tan sistemática en su paleta sonora como evocadora en lo concerniente al esparcimiento concreto de los colores de dicha paleta. Bastante recomendable para cualquier buena fonoteca dedicada a la vanguardia contemporánea.


Muestras de “Gentō”.-  
Vanishing Point, Part III: https://www.youtube.com/watch?v=LFPiqEa4j5g  


* He aquí los créditos completos de los instrumentos y artefactos utilizados por estos dos socios. Steve Rothery: guitarras Blade y Reverend, guitarra E-bow, efectos Neural DSP Quad Cortex, Eventide H90, Meris Enzo, Hologram Microcosm, TC Infinite Sustainer, Strymon Big Sky MX, Free The Tune Future Factory, EHX Pitch Fork, Roger Linn Adrenalinn, Analogman Mini Chorus, Analogman Prince Of Tone y Rotosphere, efectos electrónicos JC 120, Pitcher Shadow Amplifier, Groove Tubes Trio, Fryette Power Amplifier, Kingsley Juggler y Hughes And Kettner. / Thorsten Quaueschning: sintetizadores ARP Odyssey, Solina y 2600, Prophet 08, Doepfer y D.S. Modular, Korg MS20 y Wavestation, Manikin Electronic Memotron, Marienberg Modular, Argon 8M, Moog Minitaur, Sirin, Voyager, Mutable Modular, Novation Peak, Roland JD800, Jupiter 8, System 8 y V-Synth, Tasty Chips GR01, Vermona Modular, Waldorf Microwave y Quantum, secuenciador Manikin Electronic Schrittmacher, caja de ritmos Soma Pulsar 23], , efectos Hologram Microcosm, Stryman Big Sky, Magneto, Mobius, NightSky, Starlab y Timeline, y Z Vex Effects Lo-Fi Junky, instrumentos de Software Ableton Live, Steinberg Cubase y Softube Console 1 + Fader.

Monday, December 01, 2025

Los dos fractales triádicos de BIZIRIK en medio del tropel prog-vanguardista



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
BIZIRIK, el proyecto del magistral Stickista chileno Cristián Larrondo, tiene un nuevo ítem fonográfico en el mercado: se trata de “Trío Ceremonia / Trío Orates En Vivo”, un disco que recoge una actuación en vivo, nada de extraño según el título. El aspecto especial está en la mención de dos tríos, y es que, en efecto, el evento musical recogido en este disco contó con la participación de dos ensambles cuyo denominador común es Cristián Larrondo tocando el Chapman Stick. El Trío Ceremonia se completa con Julio Vilches [batería y Wave Drum] y Mario Pizarro [teclados]; el Trío Orates se completa con Antonio Arceu [batería] y Felipe Moreno [guitarra eléctrica traspuesta]. Publicado el 14 de septiembre último en formato exclusivamente digital, “Trío Ceremonia / Trío Orates En Vivo” contiene cinco temas interpretados en la Sala SCD (Plaza Egaña, Santiago de Chile), el 29 de agosto de 2025. El maestro Larrondo se hizo cargo de la mezcla y la masterización del disco, así como de su diseño gráfico.
 
Los dos primeros temas del disco están a cargo del Trío Ceremonia: ‘Matadero Imperial’ y ‘Kenos’. La pieza inaugural se introduce con una secuencia electrónica desde la que muy pronto se abre paso un cuerpo central pesado que está marcado por una pauta sofisticada en clave jazz-progresiva. Es como una confluencia entre GORDIAN KNOT y los STICK MEN con ligeros ribetes de los OZRIC TENTACLES. De esta manera, la parsimonia general asume una oportuna aureola vitalista. El índice temático del segundo tema es más tirado hacia lo contemplativo mientras ostenta un swing más grácil. El factor jazz-rockero se acentúa eficazmente mientras el núcleo melódico exhibe su garbo inherente. El Trío Orates entra en acción con ‘Improvisación’,  haciendo frente al enclave arquitectónico del ensamble precedente con la gesta de un enclave muscular abierto a las exploraciones prog-psicodélicas. El nervio plasmado en este jam se sostiene mayormente en las ácidas puntuaciones del bajo mientras la batería va cimentando e incrementando gradualmente el swing en curso. Los fraseos de la guitarra van oscilando entre lo cósmico y lo tenebroso mientras el clima general se asienta bajo una atmósfera Crimsoniana (al estilo del nuevo milenio). ‘Ventolera’, composición original del cantautor Víctor Jara, también es ejecutado por el Trío Orates. Esta vez, el ensamble actuante se deja llevar por el lirismo esencial de la canción para traducirlo al lenguaje del rock-fusión con inquietudes progresivas. Hay una mezcla perfecta de calidez y enérgica osadía. Casi es como volver en el tiempo a aquellos días de MAR DE ROBLES. 
El Trío Ceremonia vuelve al ruedo para la realización del popurrí ‘Tropel Alienígena / Tropelista’ para cerrar el evento con la máxima exhibición de fulgor posible. El entramado de los instrumentos es vivaz y muy bien focalizado, realizando una declaración de principios sobre la esencia más íntegra de la faceta extrovertida de BIZIRIK. La primera parte está orientada hacia un fulgor celebratorio; tras un interludio abstracto, la segunda emerge con un foco de neurosis vitalista con talante solemne. 

Como conclusión, “Trío Ceremonia / Trío Orates En Vivo” es un testimonio claro y directo de lo fabulosamente solvente que es la voz artística de BIZIRIK como versátil entidad progresiva. Destacado con creces dentro del gran escenario del rock vanguardista chileno actual, realmente vale la pena seguir la pista de este proyecto del maestro Cristián Larrondo: BIZIRIK encarna un posicionamiento muy revelador dentro de la avanzada hispanoamericana.
 
 
Muestras de “Trío Ceremonia / Trío Orates En Vivo”.-
Improvisación: https://bizirik.bandcamp.com/track/tropel-alieni-gena-tropelista-tr-o-ceremonia
Tropel Alienígena / Tropelista: https://bizirik.bandcamp.com/track/tropel-alieni-gena-tropelista-tr-o-ceremonia

Saturday, November 29, 2025

BEAT: el cuarteto perfecto para la resurrección del legado de KING CRIMSON 1981-84



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA. 

Hoy nos complace celebrar la iniciativa de los maestros Adrian Belew, Tony Levin, Steve Vai y Danny Carey de resucitar el peculiar legado progresivo que realizó la legendaria banda KING CRIMSON en la década de los 80. Esta sorpresiva iniciativa se concretó en 2024 con una gira estadounidense a la cual siguieron actuaciones en Japón, México y América del Sur. Siendo históricamente una banda británica, en ese tiempo su alineación estaba repartida a partes iguales entre ciudadanos británicos (el guitarrista Robert Fripp y el baterista-percusionista Bill Bruford) y estadounidenses (el guitarrista-vocalista Belew y el bajista-Stickista-sintetista Levin). El cuarteto que reactivo este legado Crimsoniano decidió llamarse BEAT, como el segundo disco de esa época, justamente a sugerencia de Fripp. Los socios estadounidenses Belew y Levin tuvieron la fortuna de que el legendario Vai (quien emergió en la gran escena rockera antes de cumplir 20 años como integrante de la banda del inmortal FRANK ZAPPA a fines del año 1980) y Carey (estelar baterista de TOOL) se dieran abasto para completar este cuarteto destinado a hacer las cosas de manera destellante. A fines de septiembre pasado, el sello Inside Out Music, en co-producción con Sony Music, publicó el testimonio de un concierto en The United Theater On Boradway de Los Ángeles, California, el cual tuvo lugar el día 10 de noviembre de 2024. Los formatos de 2 CD + Blu-ray y 3 LP + Blu-ray aparecen con el título de “Neon Heat Disease Live In Los Angeles”, pero también existe una edición especial de 3 CD + Blu-ray, publicado bajo el conciso título de Live. En este último caso, el tercer CD recoge temas aleatoriamente seleccionados de otros conciertos de esa gira estadounidense, siendo “Strange Spaghetti” su título autónomo.


La ilación de las primeras canciones del evento rinde honor directo al álbum “Beat”. Con un par de silbatazos comienza ‘Neurotica’: como no podía ser de otra manera, el incendiario puntapié inicial cuyo intenso vigor se explaya masivamente sobre complejas variantes rítmica. En medio de todo el caos engañosamente arquitectónico en curso, Belew muestra cuán bien mantenido está su registro vocal. ‘Neal And Jack And Me’, que dura 6 minutos y pico, prosigue por esta senda exhibiendo una poderosa agilidad que no había sido debidamente explotada en su versión de estudio. Ya en la gira de entonces, el cuarteto de Belew, Fripp, Bruford y Levin se daba mañana para ampliar su desarrollo temático y ésa es la plantilla de medición para esta gira. Con un tenor más popero, ‘Heartbeat’ aligera las cosas mientras da rienda suelta a un lirismo relativamente sencillo. Bien es verdad que las armonías de guitarra y las líneas de bajo aportan algo especial más allá del pop directamente fácil. ‘Sartori In Tangier’ exhibe un marchoso ejercicio de jazz-rock psicodélico con un Vai que ya está dando muestras de lo bien que se le da sacar lustre a su Yo Frippiano; él inicia y finaliza la serie de solos de guitarra con punzante gallardía. Son varios los momentos de lucimiento individual de Vai que sirven para guiar al impulso incendiario del cuarteto. En la dupla de ‘Industry’ y ‘Larks’ Tongues In Aspic (Part III)’ que más adelante cierra el el volumen 1 y en ‘The Sheltering Sky’ (segundo tema del volumen 2), esos destaques del buen Steve se elevarán a niveles estratosféricos. La dupla antes mencionada exige robustez rotunda e inquieta, primero, en un contexto mecanicista, luego, sobre un groove contundentemente ágil. En lo referente a ‘The Sheltering Sky’, el vigor de Vai está al servicio de las texturas exóticas y misteriosas que exigen los ambientes agitados de esta excursión psicodélica con raigambre fusionesca. Volviendo a la secuencia concreta de este registro en vivo, la secuencia de ‘Model Man y ‘Dig Me’ transita desde el pop-rock sofisticado con neurótica fineza hacia la deconstrucción invasiva y absorbente según como KC iba operando en el último año de esa etapa aquí celebrada. Belew aprovecha esta ocasión para volver a usar la vieja guitarra multicolor de la gira de 1984. Con ‘Man With An Open Heart’, el pop-rock se retoma con una mayor dosis de agilidad. Una oportuna emisión de coqueto fulgor antes de la tormenta intensiva a explayarse en ‘Industry’ y ‘Larks’ Tongues In Aspic (Part III)’. Los juegos abstractos del primero de estos temas mencionados son simplemente alucinantes.



El segundo volumen se abre con la ritualística canción ‘Waiting Man’. El inicio viene de la mano de Carey con un ritual de percusiones tonales electrónicas de estilo balinés al cual se le une después Belew. Los delineamientos básicos de la canción se van completando con las adiciones armónicas del Stick de Kevin y la guitarra de Vai. El cuerpo rockero vibra posteriormente con sólido vigor: el solo de Belew, masivamente centrado en el feedback, refuerza ese vigor mientras la canción preserva su robusta agilidad. Tras el turno de la magnífica ‘The Sheltering Sky’ (probablemente, el cénit del evento), emerge ‘Sleepless’, otra exhibición de neurótica agilidad que, en esta ocasión particular, se aferra a su propio gancho para emanar un aura fulgurosa. El dinamismo de la dupla rítmica es compacta y oportunamente urgente. ‘Frame By Frame’ es uno de los muchos himnos emblemáticos de ese primer año del cuarteto de los 80. Los complejos grooves que se desarrollan mientras se refuerza el entramado instrumental se llenan masivamente con los intrincados nexos de las dos guitarras y el Stick. Totalmente paradigmático. El momento indudablemente más conmovedor del evento llega de la mano de la hermosa balada ‘Matte Kudasai’, un cautivador ejemplo de cómo se registra un cándido romanticismo en clave de blues jazzeado. El ensamble perfila todas las sutilezas exigidas por la esencial delicadeza de la composición mientras Belew evoca ruidos de aves con los efectos de guitarra en los parajes oportunos. Todo al pie de la letra, todo hecho por los músicos para que la etérea belleza del centro melódico devele su desnuda pureza ensoñadora. Con la dupla de ‘Elephant Talk’ y ‘Three Of A Perfect Pair’ vuelve al frente la faceta de sofisticado nervio con enclaves arquitectónicos apoyados en fractales perennemente escalonados. Una mención especial para el modo en que Belew usa una taladradora para gestar peculiares efectos en su solo de guitarra para la canción titular del álbum de 1984. Cuando emerge la gloriosa ‘Indiscipline’, es el momento para el lucimiento de la poética percusiva de Carey en los preámbulos de esta explosión de neurosis contemplativa. Esta canción es nuestra favorita de esta etapa de KC y queda registrada como una emblemática cruza de psicodelia progresiva con avant-jazz al más puro estilo Crimsoniano. Además, Vai vuelve a realizar otra gesta rockera para sus dos solos. 


‘Red’ es el guiño al legado de KC de la etapa 72-73: Belew envía palabras de reconocimiento a Robert Fripp y Bill Bruford en la presentación de esta canción inaugural del que por un tiempo había sido el canto de sirena de KC. En el ya lejano año 2004, esta pieza había sido parte de los bises de la gira de GR con Vai, Joe Satriani y el mismísimo Robert Fripp: ahora, en BEAT, Vai ocupa el rol estrictamente armónico de Fripp para dejar los solos al buen Adrian. Todo termina con el fragor celebratorio de ‘Thela Hun Ginjeet’, una canción adecuada para finiquitar el evento con garra contundente, la cual derrama imparablemente su espíritu extrovertido. Esta canción es prácticamente un taller de cómo usar simultáneamente recursos de la new wave y el hard rock para trascender a ambas etiquetas en una danza del fuego posmoderna. En el Blu-ray hay tres entrevistas a los cuatro músicos que datan de antes, durante y después de la gira estadounidense: en la última se nota que hay una sensación de orgullo artístico por haber logrado revivir una época especial de KING CRIMSON con suficiente espacio para las expresiones espirituales de los nuevos integrantes y algunos detalles especiales para ciertos nuevos arreglos. El volumen de “Strange Spaghetti contiene varios detalles interesantes.Versiones sólidas de ‘Neurotica’, ‘Industry’ y ‘Frame By Frame’, un abordaje de ‘Indiscipline’ con ciertas partes de batería más robustas, un ‘Thela Hun Ginjeet’ con mayor cantidad de llamas en su hoguera sónica. Todo esto es lo que tenemos con este testimonio de la perfecta resurrección del legado de KING CRIMSON en los 80 que el colectivo de BEAT perpetra con vigor, creatividad y asertividad. “Live” y Neon Heat Disease Live In Los Angeles” son dos ítems muy reveladores del tipo de energía creativa que invirtió el colectivo de BEAT sobre los escenarios. 


Muestras de “Live”.-