Tuesday, April 19, 2022

El divino pandemonio vanguardista de la BANDA ELÁSTICA

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy tenemos la gratísima ocasión de presentar a “Pandemonium”, el más reciente trabajo fonográfico de la BANDA ELÁSTICA, uno de los ensambles más notables y curtidos dentro de la vanguardia radical mexicana. Este disco, el cual se centra mayormente en unas observaciones satíricas de diversos aspectos infernales de la pandemia que hasta ahora asola al mundo desde inicios del año 2020, fue inicialmente publicado en el blog de Bandcamp del propio grupo a mediados de marzo de 2021; fue solamente a inicios del presente año 2022 que la asociación de los sellos Luna Negra y Discos Tiradero concretó la publicación física en CD. 17 piezas en total (nada menos) son las que conforman el repertorio de “Pandemonium”. Se trata del séptimo disco de estudio de este ensamble surgido en los 80s para elaborar una osada propuesta donde confluyen el avant-jazz, el RIO, la fusión contemporánea y la música concreta de formas libres. Los músicos permanentes de principio a fin en el presente álbum son Guillermo G. Phillips [guitarras, guitarras sintetizadas, guitarra raspada, koto de pedal, pollos, grabación de sapos, mad organ y lámina con arco], Guillermo Portillo [saxofones alto, barítono y soprano, y flautas], Sósimo Hernández [bajo eléctrico y contrabajo] y Luis Miguel Costero [batería, tabla y set de cajón y platillos]. Entre los dos Guillermos se repartieron las labores de iniciación de los temas que luego se fueron desarrollando hasta alcanzar sus formas definitivas tal como fueron grabadas en el disco que aquí reseñamos. Los demás músicos que aparecen ocasionalmente son Julián González Frank (batería), Marcos Miranda (clarinete alto, jinashi, flauta bajo, gymbarda y percusión de boca), Dave Barrett (saxofones tenores y altos), Dante Pimentel (banjo y voces) y Alejandro Folgarojas (saxofón alto). Las sesiones de grabación tuvieron lugar en diferentes localidades: Morelia, San Miguel Allende, Cancún, Coyoacán, Ciudad Jardín y Caterva Estudio. El diseño gráfico del disco estuvo a cargo de Exagerardo, incluyendo unas pinturas de Alejandro Folgarolas y el antes mencionado Dave Barrett. Phillips compartió con Dante Pimentel y Francisco Javier González Elizondo las labores de producción, mezcla y masterización de este disco, con una ulterior remasterización digital realizada por Mr. Paco-Lucas. Bueno, veamos ahora los detalles estrictamente musicales de este divino pandemonio vanguardista que nos trae la gente de la BANDA ELÁSTICA.


El inicio del álbum viene de la mano de la dupla de ‘Free Con Tapabocas’ y ‘Sapos Y Ellos’: el primero de estos ítems es un lúdico ejercicio de free jazz con pausas estratégicamente ubicadas que conforman un cuadro intensamente disruptivo; el segundo, por su parte, establece una densa y perturbadora cruza entre la faceta deconstructiva de JOHN ZORN y los HENRY COW de la etapa 75-76. En este último caso, tenemos un ejemplo de cómo opera el surrealismo sonoro cuando muestra sus fauces más lúgubres mientras se deja arropar por una aleatoria fastuosidad. Acto seguido emerge ‘Otros Sapos’, pieza centrada en un esquema electroacústico donde el ímpetu deconstructivo de la pieza precedente se deja capitalizar por una dosis extra de señorío. Los efluvios imparables de las percusiones hallan una contraparte muy eficaz en las capas de teclado, y en medio de ambos recursos se desatan los demás instrumentos. ‘La Chica De Ipandemia’ es el título apropiado para el cuarto tema del álbum, pues éste se enmarca en un ejercicio de Latin jazz de raigambre brasileña. Los delirantes fraseos de la flauta son los principales proveedores de fuerza de carácter para el ensamble grupal. La triada de ‘Virus Redentor Ying’, ‘Virus Redentor Yang’ y ‘Virulencia’ sirve para que el grupo siga explorando aventuras sónicas con el buen pulso habitual. El primer tema de este bloque se centra en una serie de retazos abstractos que se emplazan dentro de una atmósfera engañosamente bucólica que, en realidad, deja entrever un aire de peligro; el segundo tema ostenta una soltura más relajada sin dejar atrás la tensión propia del free jazz; la triada culmina con un ágil despliegue de vibraciones jazz-progresivas que se sitúan a medio camino entre el Canterbury y el RIO, dos minutos y medio de puro deleite festivo con su oportuno toque de extravagancia. ‘Booper Virus’ regresa de lleno a los juegos de abstracciones aleatorias sobre la base del free jazz, pero con una ingeniería rítmica reconocible a partir de la influencia de la experimentación fusionesca que emergió a fines de los 60s. Las maquinaciones de la flauta y el saxo barítono dirigen el desarrollo de los colores principales, siendo así que la guitarra también sale al frente en ocasiones. Cuando llega el turno de ‘Plegaria Miasmática’, el ensamble explora su faceta ceremoniosa dentro de su estrategia de libre improvisación colectiva.

‘Pandemic Ballad’ se instala sobre un groove de blues jazzeado para empezar a organizar un nuevo ejercicio de deconstrucciones; la atmósfera circundante es una mezcla de misterio solipsista y nebulosidad otoñal. La batería luce diversas texturas a través del swing sosegado que arma y refuerza a lo largo del camino. ‘Microorganismos En Pugna’ instaura una cruza entre las vibraciones ceremoniosas del tema #9 y el vigor aventureramente cadencioso del tema #8. Esta pieza incluye uno de los solos de saxo más exaltados de todo el álbum. ‘Virus Acuático’ es el tema más largo del repertorio con su duración de 7 minutos y medio. Todo este espacio sirve para que los músicos den rienda suelta a las dimensiones más vivaces de su ideología de formas libres, siendo así que los ambientes contemplativos y las atmósferas envolventes arman la urdimbre donde las intervenciones instrumentales van fluyendo (incluyendo a los ruidos de mareas). Vale decir que se da aquí un cierto coqueteo con el krautrock. Hay un empuje tremendamente cinematográfico en la trama surrealista que diseña este viaje musical. ‘Nueva Normalidad’ consiste en un ejercicio de RIO que, a contrapelo de varias piezas anteriores, se focaliza en una jovialidad rotunda e inapelable. El swing, aunque tiene algo de complejidad, resulta bastante llevadero; por su parte, la flauta parece cantar su felicidad, como si estuviese haciendo una fiesta para sí misma y esperase que los demás instrumentos se le unan. Hay que hacer una mención especial para los dos solos de guitarra que emergen en el último tercio, son simplemente fenomenales. Con la dupla de ‘Covidengue’ y ‘Concheros de Tlön’, la banda sigue explorando matices propios de sus inquietudes avant-jazzeras: el primero de estos temas instaura una ambientación sosegada a la cual añade tonalidades bastante gráciles; por su parte, el segundo se orienta hacia lo fusionesco dentro de un enfoque deconstructivo y con la inclusión de bastantes matices folklóricos. ‘Stalker Virus’ se enfila hacia un armazón inestable de sonoridades densamente agresivas, exhibiendo un filo osado por vía de la confluencia de todos los partícipes. El final del repertorio llega de la mano de ‘Fase 7’, un evocativo ejercicio de atmósferas envolventes alimentadas por guitarreos Crimsonianos y sostenida por un groove de tipo nu-jazz; algo flotante y enigmático para hacer contrapeso a lo expuesto en el penúltimo tema. 


Todo esto fue el divino pandemonio avant-progresivo que nos ha brindado el colectivo de BANDA ELÁSTICA: “Pandemonium” es una obra magnífica que exige del oyente empático una atención inusitada y un ingenio imaginativo para que se dé una inusitada y aventurera convergencia entre creador y receptor. BANDA ELÁSTICA es una entidad mexicana que da gigantescos indicios de vigente creatividad con este nutrido catálogo de nuevas composiciones. Disco totalmente recomendable. 



8 comments:

Unknown said...

Se agradece tu dedicada y profunda escucha a un producto que se resiste a ser escuchado. Resulta una guía crítica en lo contextual y en lo escencial muy útil para la comprensión del discurso.
Guillermo González Phillips, Banda Elástica.

César Inca Mendoza Loyola said...

Gracias por tus gentiles palabras, maestro Guillermo.
Siempre aspiro a que mis descripciones y explicaciones, intuitivas como son, concuerden con las ideas que los músicos tenían en mente al grabar los discos que reseño.
Una vez más, muchas gracias.

Atte.
César Inca

Unknown said...

Estimado César Inca, nos renuevas el impulso creativo con tus palabras y atención al Pandemonium. Es difícil encontrar a las personas no "casadas" con sus propias músicas. Este "Folklor Imaginario" requiere de aventureros sonoros como tú. Tus comentarios son agua fresca y fluida en éste ambiente artístico acartonado que ya encontró su paradigma: el comercio, el dinero. Gracias pues, compañero de viaje.

Unknown said...

Estimado César Inca, nos renuevas el impulso creativo con tus palabras y atención al Pandemonium. Es difícil encontrar a las personas no "casadas" con sus propias músicas. Este "Folklor Imaginario" requiere de aventureros sonoros como tú. Tus comentarios son agua fresca y fluida en éste ambiente artístico acartonado que ya encontró su paradigma: el comercio, el dinero. Gracias pues, compañero de viaje.

Unknown said...

Lo precedente escrito por Guillermo Portillo

Proyecto SinFin said...

Habrá que escucharlo. Con buenos músicos todo se puede esperar.

César Inca Mendoza Loyola said...

Gracias a todo el mundo por sus gentiles y estimulantes comentarios.
Realmente se aprecia que valoren de tal manera mis apreciaciones subjetivas aquí vertidas.

Bendiciones para todos.
César Inca

foto1313 said...

Gracias por el pasaje escrito y datos importantes del registro sonoro en un mundo que cada vez se consolida como parte fundamental de la modernidad líquida.