Friday, July 30, 2021

1980 en 2007



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy se da la ocasión de hacer una retrospectiva del único disco que publicó el grupo francés instrumental 1980, a la sazón, un cuarteto cultor de una modalidad ecléctica de prog-metal inclusiva de elementos del jazz-rock, el metal extremo y el math-rock, haciendo gala de su complejidad técnica mientras crea climas potentes y aguerridos para cada una de sus composiciones. El susodicho cuarteto originado en la bella localidad de Aviñón en el año 2003 estaba conformado por Pablo Daninos [teclados y efectos electrónicos], Armand Feret [guitarras de 6 y de 7 cuerdas], Mathieu Bonardel [batería] y Benoit de Coster [bajo]. “1980” es el único registro que legó el grupo a la escena prog-metalera antes de disolverse, un disco que dura poco más de 35 minutos; su publicación tuvo lugar en el año 2007 por vía del sello Trendkill Recordings. Fue el guitarrista Feret quien se hizo cargo del arte gráfica de este disco homónimo, el cual ya es considerado como una rareza de colección para los coleccionistas de rock metalero y experimental de las últimas décadas; como dijimos antes, éste es el único legado fonográfico que el grupo dejó al separarse en el año 2012. Aunque el grupo tenía un público de culto en el underground de varias ciudades francesas, el hecho es que sus actividades eran cada vez menores, lo cual llevó a la inercia y el desgaste. Bueno, a continuación repasaremos los detalles del repertorio contenido en el disco que hoy nos ocupa.


‘Intro’ es una breve aventura de parcas exploraciones en efectos de sintetizador y capas que emulan el espesor ceremonioso del órgano de fuelles, siendo su principal función la de abrir la puerta a la emergencia de ‘Sagaie’, la primera pieza formal del álbum. El inicio de ésta es tormentoso y aparatoso, bien sustentado sobre un compás complejo y arropado por unas vibraciones robustas de talante oscurantista. De todas formas, la pieza en cuestión varía drásticamente hacia un delicado juego de síncopas donde se fusionan el math-rock y el metal de talante oscurantista, un cambio de registro que pronto permitirá también el ingreso del swing jazzero como otro ingrediente de plena sofisticación musical. El propósito de todo este enredo sónico es asegurar que el regreso de la originaria garra metalera pueda explotar el máximo punto de su potencial de fastuosidad. ‘O Me Oh’ es el tercer ítem del disco y su estrategia consiste en seguir ahondando en la pesadez sofisticada del tema precedente tras pasar por un señorial prólogo en clave jazz-rockera: el amanecer sonaba a algo así como PLANET X en su faceta cálida y el esplendor del día se proyectó hacia el paradigma de MESHUGGAH, alborotando las cosas con incandescente musculatura. ‘Meshuggreich’ sí explora fehacientemente los factores más sutiles del cosmos musical de 1980 en una grácil ostentación de equilibrio durante la elaboración del cuerpo central y la atmósfera general: alternando cuando no combinando pasajes y grooves propios del math-rock (a lo DON CABALLERO de la fase 2000-2006), del metal experimental a lo MESHUGGAH y del jazz-rock, los instrumentos van interactuando en el dibujo de un paisaje candoroso de luminosidades progresivas. Durando poco más  de 5 ¾  minutos, ‘Amicalment Votre’ nos sorprende en el punto de arranque con un drástico contrate entre el frenesí arrollador de la tríada de guitarra-bajo-batería y las bizarras disonancias flotantes del sintetizador, pero una vez instalado el cuerpo central, disponemos de otro ejemplo de ingeniosa confluencia entre los paradigmas de DON CABALLERO, UPSILON ACRUX, CYNIC y MESHUGGAH. En un pasaje ulterior, el juego de contrastes del breve prólogo reaparece, no por mucho tiempo, pero el suficiente como para  rehacerlo con incrementada majestuosidad: se trata, al fin y al cabo, del preludio a la sección más rabiosa de la pieza que instaura un clímax concluyente realmente salvaje.

Durando poco más de 10 ½ minutos, Il Se Fait Tard Mon Ami, Il Faut Rentrer’ trae el cierre para el fehacientemente sinuoso y arrollador viaje musical plasmado a lo largo y ancho de este álbum. Su incandescente vitalismo se centra particularmente en la incesante ilación de pasajes prog-metaleros con otros jazz-rockeros, usando riffs y progresiones armónicas como colores dentro de una amalgama de paisajes diversos. La mayor parte del tiempo, el bajo se dedica a llenar espacios musicales de la guitarra, mientras que la batería se centra en la muy complicada misión de sustentar los diversos cambios de ambiente y de groove con impoluta fluidez. Algunas secciones nos sorprenden porque se proyectan hacia una ambientación cósmica progresiva que nos remite a un híbrido entre las fases 73-74 y 81-84 del amplio paradigma Crimsoniano. Es en estos momentos que el cuarteto demuestra que también se maneja muy bien con lo psicodélico, aunque, técnicamente hablando, esos pasajes cumplían mayormente la función de preparar el terreno para un jam jazzero de tenor etéreo. Tras un par de minutos de silencio, el grupo regresa al frente para elaborar un clímax neurótico en clave de metal experimental con unos recursos cibernéticos que hilan una maraña math-rockera de nervio desgarrado e ímpetu futurista. Los recortes que van apareciendo en las instancias finales brindan un aura deconstructiva al asunto. En conclusión, 1980 y “1980” son dos nombres que deben estar anotados con puño firme en nuestras agendas de exploraciones melómanas del primer decenio del nuevo milenio. Muchas gracias a este colectivo francés por lo que nos dio en su momento, sin importar si fue mucho o poco cuantitativamente hablando; realmente vale la pena redescubrir su pequeño pero voraz legado musical.


Muestras de “1980”.-
Il Se Fait Tard Mon Ami, Il Faut Rentrer: https://www.youtube.com/watch?v=og8lunnHyl0 

Wednesday, July 28, 2021

ST. TROPEZ: el breve vuelo de un excelente proyecto italiano de space-rock progresivo

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy presentamos un legado perdido y recobrado de la etapa final de los 70s dentro de la escena progresiva italiana: nos referimos a “Icarus”, un ítem que recoge las composiciones del colectivo ST. TROPEZ, el cual fue fundado por el maestro Ciro Perrino tras la disolución de CELESTE. Este proyecto duró entre fines del año 1977 y fines del año siguiente, dejando tras de sí bastante material grabado en los Ortica Studios de San Remo. La línea de trabajo que Perrino proyectó para esta nueva fase de su carrera estaba a mundos de distancia del sinfonismo pastoral del primer disco de CELESTE y del jazz-prog ambiental de los pocos meses que la banda duró tras la publicación del mencionado disco. Más preocupado ahora por tocar teclados electrónicos y componer con ellos, él decidió que ST. TROPEZ debía cultivar una propuesta musical donde confluyeran los discursos del space-rock, el jazz-rock y la vanguardia electrónica de aquel entonces, con alguno matices ocasionales de sinfonismo añadidos al cuadro sonoro. Perrino, además de aportar el canto masculino, se hacía cargo de los sintetizadores EMS Synthi AKS, Mini-Moog, y ARP 2600, el órgano Eminent, el piano eléctrico Fender Rhodes, el Eko Rhythmaker, algunas intervenciones a las flautas traversa y dulce, la marimba y el glockenspiel, y ocasionalmente, el vocoder Korg, la batería y las percusiones. El resto del ensamble estaba continuamente conformándose, durante la duración de ST. TROPEZ, por Alex Magazzino [guitarras, bajo y voz], Lady Mantide [canto femenino], Giorgio Battaglia [bajo], Francesco “Bat” Dimassi [batería], Enzo Cioffi [batería], Silvano Cecchini [bajo] y Mimmo De Leo [batería]. No habiendo logrado concretar un contrato de grabación en su momento, recién en el año 1992 pudo “Icarus publicarse en CD con un repertorio de 10 temas, por vía del sello Mellow Records. Pero en este año 2021, Ciro Perrino logró realizar (también con la cooperación de Mellow Records) una reedición de CD (con 11 temas) y otra de doble vinilo (con 12) en el presente año 2021. El doble vinilo viene en tres formatos: color negro; transparente, y; colores alternados verde y amarillo. Cabe señalar que los temas extra son diferentes en ambas ediciones nuevas, así que hay un beneficio melómano en obtener las dos ediciones a la vez. El origen de ST. TROPEZ, como dijimos antes, tuvo lugar tras la disolución de CELESTE. En el tercer trimestre de 1977 existió un trío llamado SNC donde Perrino empezaba a explorar este nuevo camino de exploraciones electrónicas bajo el pseudónimo de Monsieur de Mirvel, con la compañía de Monsieur de Curval (guitarras y voz) y Madame de Mistival (voz, percusión y piano eléctrico). Este ensamble dio muy pocos conciertos, pero sirvió como semilla para el surgimiento de ST. TROPEZ, cuya identidad musical se formó muy pronto mientras los bajistas y baterías iban y venían. Lo más concreto que surgió de esto fue la continuación de experimentos electrónicos de Perrino, los cuales le inspiraron para realizar su álbum conceptual “Solare” en 1980. Pero ahora concentrémonos en el repertorio de ST. TROPEZ. 

  


Ocupando un espacio de 11 ¼ minutos, ‘Noccioline, Caramelle, Gelati’ inicia las cosas con un despliegue sutilmente suntuoso de cadencias electrónicas ornamentadas con elementos tropicales tanto por parte del compás sintético como por parte de la marimba. Dentro de este encuadre sonoro late continuamente un aura de juguetona inocencia. Cuando se detiene la base rítmica computarizada alrededor de la frontera del quinto minuto, emerge un interludio flotante y lánguido que anticipa la inminente emergencia de un segundo cuerpo signado por un talante solemne y cristalino, algo así como un híbrido de PINK FLOYD y ELOY con ornamentos Gonguianos. Las soberbias florituras de la guitarra dan un empuje apasionado al asunto, obligando a la batería a utilizar también unos ornamentos alborotados. El solo final de sintetizador es sencillo, pero capaz de activar una energía renovadora para el epílogo. Un gran inicio de álbum que abre camino a una pieza aún más notable que se titula ‘Segnale Limpido’. Ésta se mete más de lleno dentro de las cascadas del space-rock, ostentando una personalidad señorial y añadiendo algunos ornamentos de flauta a las capas de sintetizador sobre las que se habrá de asentar el desarrollo temático. Ahora estamos en el terreno de STEVE HILLAGE bajo un ropaje a lo TANGERINE DREAM (época 75-76). Hay una magia cósmica que sabe ser colorida mientras mantiene algunas punzantes vibraciones a través del sortilegio melódico en el transcurso de la primera parte, mientras que la segunda abre campo a la expansión de los sintetizadores se expanden dentro de un majestuoso diagrama donde también hay sitio para retazos de guitarra y percusión tonal. Un cénit del álbum, no nos cabe duda al respecto. ‘Il Laghetto Del Cigno’ se caracteriza por establecer una remodelación a lo GONG (etapa 73-74) de un jam creado sobre un swing jazz-rockero a medio tiempo que, con otros arreglos, no hubiese estado fuera de lugar en un disco de WEATHER REPORT. Esta vez, la guitarra y el canto femenino alternan posicionamientos protagónicos mientras los sintetizadores se encuadran dentro de la provisión de ornamentos envolventes. De lo más muscular de este repertorio. ‘Nella Cascata’ sigue una estrategia muy parecida a la del tema precedente, pero esta vez su expresividad es más notoriamente etérea, incluso con un factor Floydiano añadido que nos suena más cercano al patrón de AGITATION FREE. ‘Bollito Misto’, por su parte, exhibe un ágil y cautivador ejercicio jazz-progresivo con estilizaciones melódicas propias del prog sinfónico: algo así como el punto intermedio entre IL BARICENTRO y APOTEOSI.



La sexta pieza toma la posta de la muy alegre ‘Bollito Misto’ y justamente da título al álbum; de hecho, ‘Icarus’, con sus más de 8 ½ minutos de duración, establece otro momento culminante dentro del disco. El ensamble regresa de lleno al cobijo de la influencia de parte de los TANGERINE DREAM de la etapa 75-76 para combinarlo con delicados desarrollos temáticos gestados por los teclados que obedecen a la pauta prog-sinfónica. Un grupo como NOVALIS o LE ORME hubiese estado orgulloso de haber compuesto una pieza seductora y mayestática como ésta... Pero no, se trata de un momento en que el ensamble de ICARUS adopta un temperamento imperial y le da una excelsa plenitud, una gran confluencia entre lo bombástico y lo reflexivo. ‘Re Del Deserto’ es el tema más extenso del repertorio con su espacio de más de 12 ¼ minutos, y cómo no, también instaura un paraje particularmente destacado dentro de la floresta musical de ICARUS. Recogiendo elementos de GONG dentro de una arquitectura jazz-rockera y creando una cruza entre el space-rock y el sinfonismo para el manejo del esquema compositivo en curso, este ítem explora la faceta más propiamente extrovertida del ensamble. Aquí no se está buscando repetir la suntuosidad esencial de la pieza homónima, sino que más bien se está jugando con sucesivos bloques rítmicos llamativos con los cuales los teclados pueden completar el groove con grandilocuente algarabía. El primer bloque se centra en lo funk-jazzero, el segundo se centra en un tempo de 10/8 para proyectar al ensamble hacia un dinamismo psicodélico rebosante de sofisticado fulgor. ‘Verdure Saltate’ regresa de lleno al sendero del jazz-prog, esta vez con una dirección Canterburyana que nos remite (al menos, en parte) a los SOFT MACHINE de la etapa post-Wyatt y a HATFIELD AND THE NORTH. Las variantes temáticas están marcadas por un espíritu jovial y vivaracho. ‘Luna In Vergine’ persiste en esta línea de trabajo con pulso firme, aunque tal vez con un espíritu un poco más ligero. De todas maneras, la soltura que caracteriza a los arreglos instrumentales revela a un ensamble que sabe conectar sus piezas individuales dentro de un excelso plan musical. Estos dos temas contienen algunos de los solos de guitarra más brillantes del álbum. ‘Il Lato Sconosciuto’, en sus poco más de 4 ½ minutos, establece una vibrante cruza de space-rock y sinfonismo con algunos elementos jazzeros insertados en algunos parajes estratégicos del groove.



La dupla de ‘Tu Sei Il Pianeta’ y ‘Una Necessità Di Espandere’ completa el repertorio oficial del doble vinilo de “Icarus”, apuntando a un predominio tiránico de los sintetizadores. El primero de estos temas mencionados se centra en recuperar la solemnidad introspectiva del primer tema del álbum mientras añade una dosis incrementada de relajada serenidad. El segundo de ellos es un grácil ejercicio de space-rock melódico que se enriquece de la sofisticada labor realizada por la batería. ‘Ecco Cosa Mi Prende!’ es el bonus track que se añade al CD en el final (sin contener a ‘Una Necessità Di Espandere’): se trata, básicamente, de una canción compuesta con un complejo espíritu sinfónico que nos suena un poco a BANCO DEL MUTUO SOCCORSO, pero arreglada radicalmente con un enfoque híbrido de space-rock y electrónica a lo JEAN-MICHEL JARRE. Todo esto es lo que se ha recuperado del legado de ST. TROPEZ. “Icarus” es una estupenda pieza de colección progresiva que nos revela un nuevo mundo dentro del rock artístico italiano de fines de los 70s. Como el vuelo del hijo de Dédalo, el trayecto de ST. TROPEZ fue breve y tuvo un ocaso repentino, pero de esa efímera temporada brotó toda esta bella música que, como dijimos hace un rato, es una genuina pieza de colección.
 
 
Muestras de “Icarus”.-
Segnale Limpido: https://ciroperrino.bandcamp.com/track/segnale-limpido
Icarus: https://www.youtube.com/watch?v=mrWifowlrkQ
Re Del Deserto: https://ciroperrino.bandcamp.com/track/re-del-deserto
Luna In Vergine: https://ciroperrino.bandcamp.com/track/luna-in-vergine


Monday, July 26, 2021

LA HORSA BIANCA: diluvio prog-psicodélico desde Ucrania

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy es el turno del grupo ucranio LA HORSA BIANCA y su disco más reciente, titulado “Diluvian Beat”, el mismo que fue publicado el 11 de diciembre del pasado año 2020. Llega un poco tarde esta reseña, es verdad. El personal de LA HORSA BIANCA está conformado por Eugene Manko [bajo, flauta, saxofones, corno, mellotrón, teclados, guitarra acústica, bouzouki, percusión y voz], Olga Ksendzovska [órganos, sintetizadores, piano y trombón alto], Kirill Gonchar [guitarra eléctrica], Andrew Brahin [guitarras, eléctrica y clásica] e Igor Avdeyev [batería y voz]. El disco que ahora reseñamos fue grabado entre setiembre de 2019 y octubre de 2020 en el estudio Digout de la localidad ucranoa de Kkarkiv, siendo así que Manko (el líder de la banda) participó en los posteriores procesos de mezcla y masterización. El repertorio de seis piezas consta de tres pares de temas: dos centrados en los tsunamis e inundaciones que incluyen letras de poemas (uno de Yuri Izdryk, 2019, otro de Bohdan-Ihor Antonych, 1936); dos viejos temas del año 2016, antes de que el grupo existiera, y que se centran en la dualidad calma-tormenta; y dos que aluden a imágenes de mareas y oleajes. Haciendo un poco de historia, la banda LA HORSA BIANCA se formó por iniciativa de Eugene Manko en julio de 2016, comenzando bien plantada en la línea del rock psicodélico para pronto pasar a un prog ecléctico donde la psicodelia se alterna con elementos de jazz-prog, krautrock y sinfonismo. El debut fonográfico tuvo lugar dos años después de su formación con “Somatic Schematic”, y al año siguiente el quinteto realizó su segundo álbum “Oneiric Numeric”, el cual recibió muy buenas críticas en blogs y e-zines especializadas en el género progresivo. La línea de trabajo de “Diluvian Beat” sigue en muchas instancias la senda sonora del disco predecesor, afinando detalles y reforzando el ágil eclecticismo que caracteriza a la esencia estética del grupo; su edición es exclusivamente digital. Como es habitual, Manko se hizo cargo también del arte gráfica. Bueno, veamos ahora los detalles de su repertorio.

‘Encyclica’ inicia el álbum con un aire extrovertido que se sostiene sobre un llamativo groove que permite a las guitarras armar un entramado fluido y al bajo dibujar una líneas bastante efectivas, todo ello mientras los teclados llenan espacios por doquier con sus capas y ornamentos. La muy gentil ligereza que late a lo largo y ancho del sencillo desarrollo temático de alas al sencillo encanto del mismo: es como algo extraído de uno de los dos primeros álbumes de KEVIN AYERS para que sea remodelado por los CARAVAN del segundo álbum. ‘A Missage’ es la segunda pieza del álbum y se erige como un cénit del mismo, instaurando un grácil ejercicio instrumental de exquisitas musicalidades jazz-progresivas donde la línea Canterbury se alterna con elementos sinfónicos de tendencia pastoral; estos últimos irrumpen en ciertos momentos estratégicos para contrarrestar sobriamente el empuje central que tienen esos otros más fastuosos. No se trata de una pieza muy impetuosa de por sí, pues su swing básico se mantiene en un medio tiempo, pero sí se nota la diversidad cromática del arsenal instrumental actuante mientras el esquema melódico va avanzando. Otro instrumental titulado ‘The Mouse Principle’ sigue a continuación para establecer un espíritu dinámico y resuelto sobre un esquema rítmico relativamente complejo. Su vitalismo retro nos lleva a esos tiempos de CRESSIDA y QUATERMASS, con algunos factores extra provenidos del paradigma de los GENESIS pre-1973. El interludio solemne brinda un campo abierto para hermosos y envolventes diálogos entre una de las guitarras y el sintetizador, los mismos que se apoyan sobres unas flotantes capas de mellotrón. Para la sección epilogar, el ensamble se pone a elaborar una cruza de jazz-rock y psicodelia mientras el bajo sale al frente y una de las guitarras se centra en gestar trucos cósmicos a lo Gilmour. Los teclados aportan un aura sofisticada al asunto mientras el bloque integral se enfila hacia el golpe conclusivo. ‘Laws Of Slow Motion’ se asienta sobre un groove propio del blues-rock psicodélico con algunos matices inconfundibles de jazz-prog, algo así como un híbrido entre los PINK FLOYD de la etapa 69-71 y AGITATION FREE, más algunas tonalidades de los COLOSSEUM de los últimos años de su primera etapa. En su último minuto, emerge un sorprendente pasaje conclusivo de espíritu jovial sobre un compás de 5/4. Al igual que ‘The Mouse Principle’, esta pieza ostenta una vigorosa fuerza de carácter, pero tiene una personalidad distinta.
 
‘It’s Not But Damn’ es el tema más extenso del álbum con su espacio de 9 minutos. Se trata de un jam muy al estilo de GILA con elementos extra de la faceta más refinada de AMON DÜÜL II, un jazz-prog con fuertes raíces krautrockeras. En un momento climático que se desarrolla y refuerza en el intermedio, el bloque sonoro se torna particularmente intenso bajo la guía de una guitarra que asume un fulgor furioso e incandescente. Todo termina con ‘Сурми останнього дня (Trumpets Of The Latter Day)’, una pieza ceremoniosa con fuerte talante Floydiano en su esquema básico, pero que se ornamenta sabiamente con recursos señoriales que nos remiten, una vez más, al paradigma de AGITATION FREE. Esto hace que la solemnidad predominante en el desarrollo temático revista sus conmociones crepusculares de un fulgor frontalmente dstinguido. Esto es todo lo que se nos ofrece en “Diluvian Beat” desde los cuarteles de LA HORSA BIANCA, un ensamble ucranio que hemos descubierto un poco tarde, pero cuya discografía íntegra vale la pena investigar. En lo que concierne a este disco en particular, es un deleite muy solvente dentro de la escena progresiva de nuestros días. 


Muestras de “Diluvian Beat”.-
A Missage: https://lahorsabianca.bandcamp.com/track/a-missage
Laws Of Slow Motion: https://lahorsabianca.bandcamp.com/track/laws-of-slow-motion
Сурми останнього дня (Trumpets Of The Latter Day): https://lahorsabianca.bandcamp.com/track/trumpets-of-the-latter-day


Friday, July 23, 2021

El segundo tiempo de los maestros italianos del jazz-prog MÖBIUS STRIP

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
Hoy tenemos el enorme placer de presentar lo nuevo del cuarteto de jazz-rock progresivo italiano MÖBIUS STRIP, el cual se titula “Time Lag” y fue publicado el 12 de julio pasado… ¡Hace muy poco! Este cuarteto afincado en la bella localidad de Sora, en la provincia de Frosinone, está conformado por Lorenzo Cellupica [piano, órgano, sintetizadores y canto],  Nico Fabrizi [saxos tenor, alto y soprano, y percusiones], Eros Capoccitti [bajo y percusiones] y Davide Rufo [batería y percusiones]. Su línea de trabajo apuesta clara y directamente por un colorido vivaz y unas estructuras musicales versátiles que remodelan ingeniosamente el mencionado colorido. Las sesiones de grabación del disco que ahora reseñamos tuvieron lugar en el MStudio Center, siendo así que Fabrizio Migliorelli estuvo a cargo de la ingeniería de sonido, la mezcla y la masterización. En algunos pasajes de “Time Lag” aparece una larga lista de invitados: Fabio Gelli a la trompeta; Romeo Venditti al trombón; Simone Marcelli a la guitarra; Giacomo Serino a la trompeta; Massimo Izzizzari a la guitarra, y; el ensamble coral de Caterina Sebastiano, Debora Camilli y Andrea Martini. “Time Lag” sucede al primer álbum, simplemente titulado “Möbius Strip”, por 4 años y unos meses, siguiendo por la misma línea de trabajo mientras la arropa con una dosis notoriamente mayor de cromatismos. La portada del álbum es un dibujo de Francesco Tersigni. Bueno, veamos ahora los detalles del repertorio.
 
‘Chand Baori’, que dura poco menos de 9 minutos, da el puntapié inicial con un despliegue de colorido y gracilidad que captura la atención del oyente de manera inapelable. En efecto, tras un prólogo sigiloso, el tándem de bajo y piano articula las bases para el groove general mientras el saxofón lidera el desarrollo temático. Todo suena muy afín a los WEATHER REPORT de la fase 75-78 con una dosis acrecentada de vigor en la labor de la batería en algunas secciones esporádicas donde brota el esplendor esencial del paradigma jazz-rockero, especialmente para la emergencia del segundo solo de saxofón. Antes de ella, el momento de lucimiento para el piano resulta particularmente sublime. ‘Iblis’ Hybris’ sigue a continuación para explayarse en el primer brote de vigor extrovertido dentro del álbum. Exhibiendo afinidades con vibraciones y atmósferas del Latin jazz, el grupo reitera sus afinidades con WEATHER REPORT mientras añade elementos de la exuberancia característica de los discos solistas más emblemáticos de Chick Corea, y de paso, también tiende puentes con el legado de sus legendarios compatriotas de PERIGEO. También hay espacio para algunos pasajes más serenos, los cuales funcionan muy bien a la hora de añadir una variante de placidez en medio de la extroversión reinante, la cual se redondea perfectamente con su tajante y asertivo golpe final. ‘Mateka’s Speech’ nos remite al otro lado del Océano Atlántico con sus guiños a los paradigmas de BRAND X, NOVA y los SOFT MACHINE de la etapa 73-76. El nivel de fulgor extrovertido es un poco más comedido que el que emergió en la pieza precedente, pero todavía se siente fuerte esa cadencia vivaz que empodera a los MÖBIUS STRIP a la hora de vestir a la alegría de elegancia señorial. El cuarto tema del álbum se titula ‘Old Tapestry’ y es el más extenso del mismo con sus 10 minutos y pico de duración. A pesar de ello, el grupo decide, a diferencia de las tres piezas precedentes que estaban marcadas por variantes temáticas bien definidas sin quitar el centro el cuerpo principal, centrarse en los grooves y darles vueltas por un buen rato, ya sean éstos refinadamente sobrios o frontalmente vivarachos. El piano es el principal instrumento que guía el desarrollo de las diferentes atmósferas. La sección epilogar ostenta una exquisitez majestuosa y superlativa. En líneas generales, esta pieza establece un sólido punto intermedio entre las tradiciones del Canterbury y del jazz-fusion. La secuencia de los temas segundo al cuarto ha concretado un cénit decisivo del disco.
 
La dupla de ‘Möbius Cube’ y ‘A Theme For The End’ ocupa los últimos 14 minutos y pico del repertorio. ‘Möbius Cube’ expresa lo más cercano a la estilización melódica de tipo progresivo que hallamos en el álbum, tal vez algo cercanas al patrón de HAPPY THE MAN, aunque resguardada por las vibraciones evocativas propias de la faceta más sistemáticamente lírica de WEATHER REPORT. La primera sección se centra en cadencias reflexivas donde el bloque instrumental gira en torno a los oleajes del piano, mientras que la segunda sección vira drásticamente hacia una breve expansión de vitalidades expresionistas. La última sección retoma la atmósfera de la primera pero con una remodelación más enérgica. Por su parte, ‘A Theme For The End’ se enfila hacia las aristas más experimentales de la banda, las cuales muestran cercanías con FROGG CAFÉ y la banda compatriota MOOGG. Definitivamente, en el entramado sonoro donde se congregan los arreglos vocales, el ensamble de metales y los ornamentos de guitarra dentro del vivaz y variado armazón compositivo creado para la ocasión, se impulsa una combinación de cándido júbilo y dadaísmo travieso. El grupo hizo bien en utilizar este momento culminante del disco para brindarle un exquisito broche de oro, como debe ser. En conclusión, “Time Lag” es una obra magnífica de jazz-rock-fusion con convincentes tintes progresivos, un digno sucesor de ese hermoso álbum debut de los MÖBIUS STRIP de cuatro años atrás. Este segundo tiempo musical del grupo ha sido un momento de reforzamientos y afianzamientos para la estrategia de grooves mágicos y colorido frontal que conforma el esquema artístico del grupo mismo. Totalmente recomendable, totalmente encomiable la labor de expansiva creatividad que ha plasmado el colectivo de MÖBIUS STRIP.
 
 
Muestras de “Time Lag”.-
Iblis’ Hybris: https://mbiusstrip1.bandcamp.com/track/ibliss-hybris
Old Tapestry: https://mbiusstrip1.bandcamp.com/track/old-tapestry
A Theme For The End:  https://mbiusstrip1.bandcamp.com/track/a-theme-for-the-end

Tuesday, July 20, 2021

Las 11 nuevas soluciones de SKE para los enigmas del avant-prog del nuevo milenio

 
 
HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
Hoy estamos de plácemes porque tenemos en nuestras manos el nuevo disco de SKE, proyecto italiano gestado y dirigido por el músico italiano Paolo “Ske” Botta. Este nuevo disco se titula “Insolubilia” y salió al mercado en el día 11 de este mismo mes de julio de 2021, sucediendo por 10 años al disco de debut “1000 Autunni” (reeditado en 2018 como “1001 Autunni” como álbum doble con un volumen extra en vivo en el año 2018). La publicación física de este disco es una labor independiente de Botta. Paolo, autor de todos los temas de “Insolubilia”, toca un copioso arsenal de teclados: órgano Hammond, Mellotrón, pianos eléctricos Wurlitzer y Fender Rhodes, sintetizadores ARP Odyssey, OSCar, Farfisa Synthorchestra, E-mu, Nord Eklectro3, Elka X705, Boog, Rolad RS202. También toca algunas percusiones básicas y concretas. Pero no solo eso, también cuenta con una nutrida lista de invitados. A ver... Pietro Bertoni (trombón y eufonio); Luca Calabrese (trompeta); Alessandro Cassani (bajos con y sin trastes); Jacopo Costa (percusiones tonales, címbalo, campanas tubulares y tímpanos); Massimo Giuntoli (armonio); Tommasso Leddi (mandolina); Martino Malacrida (batería); Nicolas Nikolopoulos (flauta); Francesco Zago (guitarras eléctricas y acústicas); Vitaly Appow (fagot); Valerio Cipollone (clarinetes); Maria Denami (voz); Maurizio Fasoli (piano de cola); Guillaume Gravelin (arpa); Elia Leon Mariani (violín); Pierre Wawrzyniak (bajo); Evangelia Kazoni (bajo); Thea Ellingsen Grant (voz); Lars Fredrik Frøislie (clavicordio); Simen Ådnøy Ellingsen (saxos soprano, alto y barítono); Tiziana Azzone (theorbo); Mélanie Gerber (voz); Fabio Pignatelli (bajo); Keith Macksound (bajo). Una parnaso de colaboradores procedentes de las filas de YUGEN, ISILRUS BANE, PRESENT, CAMEMBERT, CICCADA, FIVE STOREY ENSEMBLE, NOT A GOOD SIGN, LOOMINGS, WOBBLER, STORMY SIX, FEM, etc. Fuera de este proyecto suyo SKE, Botta es activo participante en YUGEN y NOT A GOOD SIGN. La propuesta musical exhibida en “Insolubilia” es un avant-prog melódico que incluye profusos elementos de sinfonismo, jazz-prog, psicodelia y fusión contemporánea. El material aquí recogido fue grabado entre febrero de 2020 y febrero de 2021 (Botta no se distrajo del clamor de sus musas en medio de esta pandemia), utilizándose varios estudios para este proceso: South Central Ceppine, Foschia, Noise Factory, Ganascia, Bestinelli, ArtAlone, Dontcare, Purple House, Vozdokh, Homestudio, Upstairs, LFF, Eigenstudio, Cheese, Timechild, Harpustudio, Rattle Free Recording y Viale Enrico Fermi. Por supuesto, esta larga lista de estudios responde al hecho de que sus colaboradores enviaban sus aportes en archivos de audio.  


El disco que aquí reseñamos está inspirado en las paradojas lógicas (de hecho, uno de los temas contiene una exposición de las paradojas del filósofo Zenón de Elea, y otro nos remite al estagirita Aristóteles). Bueno, yendo ahora a los detalles de su repertorio, nos topamos con que la pieza encargada de inaugurar el repertorio es ‘Sudo’, la cual se centra en el asentamiento de un ágil ejercicio de cadencias progresivas donde se fusionan los mundos de GENTLE GIANT, FAR CORNER y KING CRIMSON, o sea, una algarabía de atonalidades y tensiones que se sustenta solventemente sobre una ingeniería rítmica refinadamente juguetona. Acto seguido llega el turno de ‘Insolubilia I’, tema que instaura una atmósfera mucho más solemne, bien adentrada en un lirismo que se sitúa a medio camino entre lo introspectivo y lo perturbador. Aquí resuenan los ecos del primer álbum de SKE, aumentados por aires de familia que conectan la labor del ensamble con los paradigmas de RATIONAL DIET, CAMEMBERT y THINKING PLAGUE, más algunas sazones de los HENRY COW de los dos primeros álbumes. Además, con la labor tan explícitamente muscular de la guitarra y los sintetizadores en los pasajes más aguerridos, la pieza adquiere un nervio especialmente electrizante. Nos topamos con el primer cénit del álbum... uno de muchos. Así las cosas, llega el turno de ‘Tor Cia’, una miniatura que explora matices cósmicos con una oportuna dosis de densidad en la atmósfera circundante, logrando así preparar el terreno para el arribo de ‘Insolubilia II’, una bella pieza que despliega su envolvente sortilegio a través de una etérea ilación de escenas melódicas perpetradas bajo un manto híbrido de chamber-rock y prog sinfónico. Es como el inaudito encuentro entre las galaxias de GENESIS, BANCO DEL MUTUO SOCCORSO y RASCAL REPORTERS, añadiéndose algunos recursos pastorales (merced a las maderas y el theorbo) que enriquecen sublimemente la ya de por sí profusa majestuosidad melódica en curso. ‘Lo Stagno Del Proverbio’ ocupa un espacio de poco más de 3 minutos y se encarga de ahondar en la faceta introspectiva del ensamble, siendo así que el eufonio y el piano dirigen la mayor parte del esquema melódico, con un interludio que emerge para plasmar unos ornamentos etéreamente dadaístas. Otros ornamentos de mellotrón y címbalo aportan sugerentes recursos de señorial extravagancia.  


Las piezas ‘Akumu’ y ‘La Nona Onda’ conforman un continuum de imponente esplendor musical, durando una 6 minutos y pico y la otra, 7 minutos. El rol de ‘Akumu’ es el de elaborar una mezcla de space-rock y jazz-prog, un poco al modo de una cruza de FONDERIA y QUANTUM FANTAY. Por supuesto, algunas irrupciones de ornamentos atonales nos remiten al discurso del RIO, pero es de lo más cálido del álbum, y siendo su groove general tan llevaderamente ágil, esa calidez fluye naturalmente bajo la opulencia integral que la arropa. Por su parte, el rol de ‘La Nona Onda’ consiste en desarrollar un nuevo ejercicio de chamber-rock vitalista donde la densidad está al servicio de la expansión irrefrenable de diversos recursos de majestuosidad. Encontramos aquí parajes marcados por un swing jazz-rockero que se alternan con otros centrados en una suerte de serenidad palaciega contaminada por vibraciones cósmicas, así como otros momentos focalizados en lo sinfónico con muy delicados armazones sombríos (al estilo escandinavo, por así decirlo). Tampoco faltan algunas irrupciones disonantes de carácter Zappiano a través del filtro particular de SKE y YUGEN. Las secciones donde el encuadre de primera guitarra y batería empuja al bloque sonoro integral conducen a la pieza a un magnífico clímax conclusivo. Definitivamente, aquí hay otro cénit inapelable del álbum. La emergencia de ‘Scogli 4’ sirve para dar rienda suelta a la academia modernista dentro de una ambientación casi cinematográfica, como si se estuviese brindando un fondo musical a las primeras sombras que van surgiendo a lo largo de un crepúsculo evocador. La secuencia numéricamente descendente de ‘Insolubilia V’, ‘Insolubilia IV’ e ‘Insolubilia III’ marca la conclusión épica del repertorio del álbum en una adecuada exhibición de magnificencia eclécticamente progresiva. El primero de estos temas sigue claramente la senda del primer Insolubilia, con el matiz adicional de que el contraste entre los pasajes extrovertidos y los introvertidos es más marcado. La sección epilogar desarrolla una serie de excelsos claroscuros exultantes, un clímax que suena como una cruza entre los UNIVERS ZERO de los dos primeros discos y los KING CRIMSON del “Lizard”, aterrizando en una ensoñadora coda al piano eléctrico. Otro momento culminante del álbum y ya van... ¿cuántos?


‘Insolubilia IV’ es un intermedio onírico que destila una candidez mágica de fuerte talante onírico, el cual es ornamentado con arreglos de vientos y percusiones tonales que nos remiten parcialmente al modelo del “Incantations” de MIKE OLDFIELD. Esto viene muy bien antes de que ‘Insolubilia III’ ponga el broche final al disco. Esta pieza exhibe una laboriosa y diestra síntesis entre sinfonismo y jazz-prog, esta vez poniendo a la exuberante tensión del chamber-rock al servicio de la cordialidad melódica y la focalización en atmósferas gentiles. Los pasajes más filudos ostentan una vivacidad donde se cruzan los mundos de GENTLE GIANT y GOBLIN. He aquí el gran final que merece este gran disco. Todo esto fue “Insolubilia”, un catálogo de once geniales soluciones a los diversos enigmas que guarda la avanzada progresiva italiana de nuestros tiempos. SKE se ha lucido a lo grande con este álbum, al cual designamos como uno de los más excelsos que se han hecho en el país de Leonardo da Vinci y Federico Fellini en el presente año 2021. Definitivamente, se trata de un ítem totalmente recomendable dentro de una colección mínimamente buena de música progresiva del nuevo milenio. Así como “1000 Autunni” estableció un nuevo enfoque para el prog actual, “Insolubilia” establece un gran paso adelante dentro de la evolución artística de Paolo Botta.



Saturday, July 17, 2021

AZIOLA CRY: un concepto irónico arropado por una grandilocuente propuesta metal-progresiva

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

En esta ocasión presentamos al trío instrumental estadounidense AZIOLA CRY so pretexto del reciente lanzamiento de su disco de estudio “The Ironic Divide”: más exactamente, el pasado 26 de marzo, por vía del sello The Laser’s Edge. El colectivo de AZIOLA CRY está asentado en Illinois, Chicago, y está conformado por Jason Blake [Warr Guitar], Mike Milaniak [guitarras] y Tommy Murray [batería]. Su línea de trabajo es una modalidad experimental y ecléctica de prog-metal, juntando mentes y voluntades forjadas por sus propios talentos individuales y por sus respectivas veteranías. Haciendo un poco de historia, AZIOLA CRY comenzó a inicios del nuevo milenio bajo la iniciativa de Blake, quien quería encontrar un espacio particular para sus composiciones fuera de las esferas habituales del rock metalero. Con el guitarrista Mike Milaniak y el baterista Tim Stickradt se completó el bloque grupal, el cual grabó el disco “Ellipsis” en el año 2005 y, dos años después, el EP “Ghost Conversation”. Tras la partida del baterista original, Murray entró en escena para ocupar su lugar, siendo así que entre tiempos en que cada integrante no estaba ocupado con otros proyectos, se pudo gestar, completar y publicar este segundo trabajo de larga duración tras varios años de hiato. Bueno, veamos ahora los detalles del repertorio contenido en “The Ironic Divide”.


Durando poco más de 9 ½ minutos, ‘And Cowards’ da inicio al álbum con todo, realizando exploraciones arquitectónicas de atmósferas y grooves que, básicamente, instauran una cruza entre los paradigmas de FATES WARNING, CANVAS SOLARIS, TOOL y los STICK MEN (en su faceta más aguerrida). Las puntualizaciones y énfasis están puestos en las bases armónicas a la hora de encuadrar el desarrollo temático del cuerpo central. Un interludio que surge a poco de pasada la frontera del tercer minuto vira hacia una dinámica un poco más aligerada, aunque las vibraciones macizas siguen muy en pie. Un segundo interludio, bastante breve, apela a una atmósfera parsimoniosa que hace que el resurgimiento del imperio de la lógica prog-metalera en clave arquitectónica lo haga sobre un swing más constreñido. Mientras tanto, la guitarra brinda un solo alucinante cerca del cortante clímax conclusivo. ¡Estupendo inicio de álbum! ‘Hollow Reflections’ sigue a continuación para exhibir, en su primera mitad, un retrato musical de sobriedad contemplativa con fundamentos jazz-progresivos, los mismos que asimilan trazas de la psicodelia neurótica de esencia Crimsoniana. La guitarra dibuja solos sutiles y delicados en ciertos pasajes estratégicos. Para la segunda mitad, el trío realiza un drástico viraje hacia una musculatura contundente empujada por una extroversión estilizadamente machacona y signada por una atmósfera moderadamente sombría. Para el epílogo, regresa el motif original, redondeando eficazmente la faena. El ítem central del disco es la suite homónima, la cual dura 21 minutos y pico y está dividida en cuatro secciones ‘Premonitions’, ‘A Torment Of Reason’, ‘Distort Persona’ y ‘One Final Collapse’. ‘The Ironic Divide’ empieza con un impulso bien articulado sobre un compás inusual a medio tiempo, lo cual permite que los aspectos machacones del groove se realcen contundentemente, así como una potenciación de las variantes ocasionales que van surgiendo. Poco antes de la frontera del sexto minuto y medio, el nervio rockero y el groove se incrementan, exigiendo así a los instrumentos a realizar ornamentos más ampulosos. Alrededor de la frontera del décimo minuto, un breve interludio de Warr Guitar anuncia una exploración Crimson-Tooliana de atmósferas misteriosas que coquetean marginalmente con lo siniestro, aunque más bien se trata de una tensión nebulosa que, en algún pasaje estratégico, se suelta. Una vez terminado este tiempo de vibraciones crepusculares llega otro de fulgores inquietos y robustos con los que el trío articula y fortifica un culmen prog-metalero alimentado por matices math-core. De paso, hay un fabuloso solo de guitarra que emerge en la frontera del minutos 19.
 

Tras la tremenda suite llega el momento del cierre del disco, y éste llega de la mano de ‘Scars Now Rest Where Once Bore Wings’, tema que dura poco menos de 12 ½ minutos. Su base expresiva reside en una actitud ceremoniosa marcada en niveles equitativos por una estructuración de traqueteos ingenieriles y una exploración de climas densos. Más adelante, todo se dinamiza de una forma notoria para llevarnos a un terreno cruzado de CANVAS SOLARIS y EXIVIOUS, con algunos elementos de la faz más agresiva de GEPH. La batería a veces usa ornamentos a lo Neal Peart cuando el enclave grupal procura elevar su estrategia musical a una instancia particularmente sofisticada. Cuando regresan los aires ceremoniosos, éstos recogen el impacto de la fortaleza sistemática que sustentaba a la sección precedente. Para los últimos minutos, el trío gesta una ambientación extrovertida que se enmarca en una soltura particularmente luminosa, sin sacrificar un ápice de sus ambiciones progresivas. Todo esto fue “The Ironic Divide”, un formidable trabajo que reactiva la escena actual del prog-metal experimental. La gente de AZIOLA CRY se ha lucido a lo grande y por ello merece nuestra atención, así como nuestra total recomendación para todos los apreciadores y coleccionistas de las vertientes más filudas del discurso metal-progresivo. A pesar del título irónico que ostenta, esta obra es genuinamente una concreción de inspiradas y grandilocuentes musicalidades dentro del rock artístico.



Friday, July 16, 2021

AMOUR: el amor al ideal del rock progresivo desde un rincón de Bélgica



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy nos complace presentar al grupo belga AMOUR, un trío conformado por Denis Geerts [batería, percusiones y teclados], Oliver Heyter [bajo] y Samuel Grégoire [guitarras], por motivo de la publicación de su segundo disco “Hyperborea”: más exactamente, este disco salió al mercado el día 30 de abril del año 2021... Hace ya varios años. Este ítem sucede por dos años al disco de debut “The Virtues Of Patience”, el cual ya pautaba el enfoque de psicodelia eclécticamente progresiva que el trío asumió como posición musical desde su fundación en la bella ciudad valona de Namur. La banda absorbe creativamente las influencias de los paradigmas del prog-metal, el post-rock y el noise-rock, además de la psicodelia progresiva de vieja escuela, dentro de un esquema sonoro que usualmente acentúa lo muscular y lo denso, y es justamente en “Hyperborea” donde este enfoque encuentra y concreta una garra renovadora, llevando a la pauta estética plasmada en aquel primer disco hacia un nuevo nivel de madurez estilística. Repasemos ahora los detalles de su repertorio. 


Durando poco más de 7 minutos y medio, ‘01.01.1997’ pone inicio a las cosas, ostentando un prólogo minimalista encubierto bajo una neblina de sigiloso misterio, el mismo que, al disiparse, deja campo libre para la expansión de un cuerpo central centrado en vibraciones post-metaleras al estilo de unos RUSSIAN CIRCLES. Dicho cuerpo central utiliza también algunos elementos stoner dentro del armazón del groove y las secuencias de riffs que sustentan los diversos motivos encauzados. En los dos últimos minutos, la pieza adquiere una dosis extra de vitalidad que le permite concluir su núcleo expresivo con grácil vigor. La pieza homónima, que dura casi 13 ¾ minutos, se erige como la más extensa del repertorio, instaurándose como un medio para expandir eficaz y enérgicamente la misión estética de la banda. ‘Hyperborea’ comienza con un aire similar al prólogo de la pieza de apertura, solo que esta vez el aura misteriosa se apoya en un groove más parsimonioso. Así las cosas, cuando el punche rockero se termina imponiendo, el entramado sonoro se deja delinear por una ácida ceremoniosidad que permite al talante minimalista de la composición abrir espacios a esquemas atmosféricos. Poco antes de llegar a la frontera del quinto minuto, el asunto se torna extrovertido y macizo, ciertamente volcado hacia el prog-metal con ribetes stoner, y además, algunos ornamentos de teclado que añaden una sutil exuberancia al asunto. Este momentum realza su espíritu pletórico cuando entra a tallar un muy vivaz solo de guitarra, un solo breve pero muy relevante para la situación concreta. La siguiente sección consiste en un ejercicio de post-rock suave; poco a poco, aquí se elabora un recurso lírico que realza la espiritualidad introvertida del momento, pero también atiza las llamas para reavivar el fragor rockero. Lo que suena ahora es como un encuentro entre los mundos de MOGWAI y AUTOMATISM llevado hasta una dimensión fastuosa con miras hacia un cierre contundente: aporta mucho en eso la sucesión de sendos solos de órgano y guitarra, así como la retoma de recursos atmosféricos. ‘On Vous Aime’ tiene el rol de soltar las agitaciones rockeras más contundentes de la banda: pesadez visceral con añadidos aires prog-metaleros, apuntando todo a un epílogo genuinamente salvaje. Siendo la pieza menos sofisticada del álbum, cumple con la necesaria misión de encender una gran hoguera de furia rockera tras las exploraciones plasmadas en los dos temas precedentes.


‘Cirrostratus’ es el tema encargado de cerrar el disco, siendo así que su estrategia expresiva se siente emparentada con la del tema que abrió el álbum en el sentido de que empieza con un prólogo flotante y se enfila poco después hacia una dimensión más aguerrida. En este caso, el nervio rockero que emerge en cierto momento ostenta una sofisticación muy afín a la que signó a la pieza homónima. El empleo de compases inusuales en la mayor parte del tiempo permite a la banda hacer gala de sus más lúcidas intuiciones arquitectónicas dentro del paradigma progresivo; también es de destacar el empleo de convulsiones híbridas de post-rock y space-rock en la forja del intenso y volcánico epílogo. La mencionada pieza homónima y esta última conforman, según nuestra perspectiva, los momentos decisivamente culminantes del repertorio que acabamos de repasar. A fin de cuentas, todo esto es lo que el colectivo de AMOUR nos brindó con “Hyperborea”, un álbum que en poco más de 37 minutos da cabales muestras del tipo de energía musical que se puede esperar de la nueva hornada de bandas progresivas y afines a lo largo y ancho del mundo. Muy recomendable. 


Muestras de “Hyperborea”.-

Thursday, July 15, 2021

Los suecos KUNGENS MÄN nos traen nuevas aventuras prog-psicodélicas

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

En esta ocasión echamos un vistazo al underground psicodélico sueco para reencontrarnos con el fornido ensamble de space-rock progresivo KUNGENS MÄN y su nuevo trabajo fonográfico, el cual se titula “Den Nya Skivan” (el título se traduce como el nuevo disco en español, así de simple). Este ítem fue publicado en formato de vinilo el pasado 8 de febrero por el sello Cardinal Fuzz, tanto de forma individual como encarnando el último ítem de una caja de 5 discos titulada “Innanför Boxen”, la misma que incluía algunos viejos discos del grupo en cuestión. La alineación efectiva de KUNGENS MÄN para este disco consiste en Hans Hjelm [guitarra], Mattias Indy Pettersson [batería], Mikael Tuominen [bajo de 6 cuerdas, guitarra, percusión y voz], Magnus Öhrn [bajo], Peter Erikson [sintetizador] y Gustav Nygren [guitarra]. Anecdóticamente, este último músico no aparece en el primer tema del álbum que hoy reseñamos. El material recogido en “Den Nya Skivan” fue grabado en un par de sesiones realizadas en el estudio Moderskeppet de Aspudden (al sur de Estocolmo) en el año 2019, siendo así que Tuominen se hizo cargo de la ingeniería de sonido y la mezcla durante la post-producción. Otro miembro de la banda, Öhrn, se hizo cargo del arte gráfica. Bueno, veamos ahora los detalles específicos del repertorio contenido en “Den Nya Skivan”.


Durando poco más de 13 minutos y erigiéndose como la pieza más extensa del álbum, ‘Basfällan’ da inicio a las cosas con una musculatura y unas vibraciones space-rockeras muy ágiles, algo que es fervientemente favorecido por el empleo de un esquema rítmico de tenor motorik por parte de la batería. Por supuesto que este factor implica una cercanía al paradigma de NEU!, pero la exuberancia cósmica de los guitarreos centrales y el punche del bajo son realmente los elementos vitales del mecanicista desarrollo temático, y esto hace que haya más afinidad con el paradigma de los HAWKWIND de la fase 71-73. Hay una especie de esplendor juguetón que sostiene al recurrente motif con la finalidad de mantener su gancho; eso mismo permite que el crescendo de fuerza expresiva que se proyecta a lo largo de los tres últimos minutos genere un clímax efectivo. Tras esta exhibición de jovialidad machacona llega el turno de ‘Andra Hjälpen’, un tema que comienza con un tenor muy diferente, uno centrado en el misterio y el solipsismo desde un enfoque pletóricamente cósmico. La combinación de fraseos espartanos de guitarra con tarareos en falsete y capas flotantes de sintetizador generan un aura ceremoniosa dentro de una atmósfera psicodélica signada por arrebatadas ensoñaciones lisérgicas. Cuando se refuerza el cuerpo central, el mantra recurrente marcado en simultáneo por los aires exóticos de dos de las guitarras y por el cántico evocador de un donaire hinduista catapulta al bloque sonoro general hacia un ejercicio de agitaciones mágicas. Esto se traduce en una cruza entre psicodelia krautrockera y acid folk que nos remonta a los legados de GILA y AMON DÜÜL II. A pesar de su talante netamente relajante, esta pieza sabe ostentar una genuina fuerza de carácter, y por ello gesta un momento culminante del álbum. ‘Uppskjutet Uppskjutet’ tiene la misión de volver parcialmente a la lógica de pulsaciones machaconas de ‘Basfällan’, pero esta vez se hace patente el empleo de una estrategia más sofisticada a la hora de concretar el desarrollo temático y revestirlo de un vitalismo renovador. Hay más espacio para el lucimiento de solos de guitarra y la irrupción frontal de los punzantes efectos tanto del sintetizador como del bajo distorsionado; también hay en la batería un uso más controlado del vigor mecánico que se le exige en este contexto.
 
‘Hamra Med Slutna Ögon’ cierra el repertorio con una actitud de recepción del garbo enérgico y dinámico procedente de los pasajes más extrovertidos de los temas precedentes, llevándolo hacia un área centrado en cadencias solemnes. Éstas tienen un cierto elemento de densidad, pero manejado con una sobriedad bien perfilada con el propósito de no abortar el vigor rockero que late y se agita a través del armazón de las dos guitarras. Esto suena a una especie de retazo de los GURU GURU de los dos primeros discos que ha sido drásticamente remodelado por un contubernio armado por integrantes de RED KITE y de PAPIR. Aquí hallamos la labor más sofisticada del baterista dentro del álbum, centrada en una combinación de empuje tribal y grooves jazzeros dentro de un encuadre genuinamente rockero. Mientras se acerca el fade-out, la ingeniería sónica se va vaciando paulatinamente, lo cual asienta un adecuado espíritu crepuscular para el cierre. La gran culminación del disco, no nos cabe duda al respecto. Todo esto es lo que se nos ha brindado en “Den Nya Skivan” desde los cuarteles del ensamble sueco KUNGENS MÄN, un catálogo de nuevas aventuras prog-psicodélicas que se caracterizan por sus notables dosis de musculatura y distinción. Este álbum de aventuras prog-psicodélicas garantiza que los KUNGENS MÄN se mantengan en un lugar preferencial dentro de la élite del underground escandinavo. 
 
 
Muestras de “Den Nya Skivan”.-


Monday, July 12, 2021

¡Todos quietos parados! Hay un nuevo disco en vivo de THE ARISTOCRATS en el mercado

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

El supergrupo anglo-germano-estadounidense THE ARISTOCRATS se hace presente en el mercado musical del presente año 2021 con el disco en vivo titulado “FREEZE! Live In Europe 2020”, el cual registra momentos de actuaciones que tuvieron lugar en las ciudades españolas de Bilbao, Sevilla y Murcia en febrero de 2020, justo antes de que el mundo implosionara como lo hizo y nos dejara en la situación de distanciamiento social sistemático que aún tenemos encima. La jocosa portada, obra de Tom Colbie, es una poderosa muestra gráfica de aquello que emergió y que hasta ahora nos hace añorar varias cosas. Bueno, el hecho es que este trío conformado por los monstruos Guthrie Govan [guitarras], Marco Minnemann [batería] y Bryan Beller [bajos] ha publicado este estupendo registro en vivo por vía de su propio sello BOING! Music LLC., tanto en CD como en vinilo doble, a inicios del pasado mes de mayo. Justo porque en los años 2019 y 2020 el grupo estaba promocionando su disco de estudio “You Know What…?”, todos los temas que aparecen aquí menos uno pertenecen al mismo. La excepción en este caso es la retoma de una vieja composición de Minnemann para el primer disco de la banda (el homónimo de 2011), que se expande ampliamente con un solo de batería para que la pieza vaya dedicada a la memoria del maestro Neil Peart. Pero dejaremos otros detalles relativos a esta pieza para después: la producción del disco estuvo en manos del grupo mismo, siendo así que la mezcla de sonido estuvo a cargo de Forrester Savell y la ulterior labor de masterización fue realizada por Dimitris Karpouzas. Ahora, repasemos el repertorio de “FREEZE! Live In Europe 2020” en su orden correspondiente. 


El primer tema de este registro es ‘D Grade Fuck Jam’, el cual también abría el álbum “You Know What…?”. El groove jazz-funky sobre el cual se sostiene el jam central es manejado con la suficiente musculatura como para sostener los vitalistas fraseos y efluvios de la guitarra, incorporando algunos momentos estratégicos para que la soltura reinante se revista de sofisticación. A continuación sigue ‘Spanish Eddie’, precisamente el segundo tema del álbum promocionado en aquel entonces: se trata de una expresión de jazz-rock señorial y extravagante que nos remite por igual a la MAHAVISHNU ORCHESTRA y a los inolvidables ATTENTION DEFICIT, usando climas aflamencados en la base y los ornatos ulteriores de su cuerpo central. En algún momento, el groove se torna explosivo con el fin de dinamizar la garra y prepararnos para el clímax conclusivo. Las exigencias técnicas son mayores aquí que en el tema de entrada, por lo que ahora, el vitalismo esencial del trío adopta un fulgor más intrincado. Era una de las piezas más notables del disco de estudio de 2019 y ahora es un punto culminante del presente disco en vivo. Con la dupla de ‘When We All Come Together’ y ‘The Ballad Of Bonnie And Clyde’, el ensamble transita desde una celebración del tex-mex a través de un filtro jazz-rockero a una exhibición de jazz-prog rebosante de incandescente punche. El primero de estos temas se regodea en sus propias vibraciones joviales, mientras que el segundo instaura una fosforescencia marcada con brío sofisticado y lozanía rotunda. Tal vez tenemos en ‘The Ballad Of Bonnie And Clyde’ uno de los mejores solos de Goven en todo el disco. El quinto ítem del álbum es ‘Get It Like That (Dedicated To Neil Peart)’, un ejercicio grácil de jazz-prog que comienza con un despliegue de grácil candor para luego derivar hacia un reggae psicodélico signado por un efecto cósmico en los fieros guitarreos. El swing no tarda mucho en derivar hacia un blues-rock mientras el bajo elabora unas magníficas florituras. Y llega el momento de un espléndido solo de batería que emerge alrededor de la frontera del sexto minuto y medio: extenso, vibrante, versátil. Hay algunas citas del clásico instrumental de RUSH ‘YYZ’ en el mencionado solo. Ya cuando el trío se rearma sobre el escenario y se da un momento de interacción entre el grupo y el público, el terreno está preparado para que emerja el explosivo final. Por supuesto que el principal referente de la ovación del público tras el solo y al final de la pieza es Minnemann, presentado por uno de sus compañeros como un alienígena.  

Con una duración de casi 11 minutos, ‘Last Orders’ cierra el repertorio con una exposición de dos secciones bien diferenciadas entre sí, una introvertida y apacible, apuntando un aura melancólica, y otra más aguerrida donde el grupo aprovecha el incremento del vigor expresivo para elaborar unos ornamentos interesantes. La guitarra y el bajo saben cómo compenetrarse mientras preservan sus recursos individuales de soltura expresiva, todo ello mientras la batería oscila entre lo sutil y lo extrovertido en la preservación del persistente swing en clave de blues-rock. Hay un momento de extrema calma que se va reforzando hasta pocos segundos después de atravesar la frontera del octavo minuto, momento en el cual el trío se enfoca en un viraje hacia un groove genuinamente grácil. Dura poco tiempo pero es lo suficiente para dejar una huella relevante en la estructura de la pieza antes de la calma final. Y esto fue todo lo que nos brindó el excelso trío THE ARISTOCRATS con “FREEZE! Live In Europe 2020”, un disco en vivo entrañable y exultante que da muestra, como sus otros discos y vídeos en vivo, de lo genial que es la química grupal que brota de las interacciones creativas de estos tres señores. Hoy por hoy, desde el año pasado, cada uno de ellos está ocupado con nuevos proyectos (discos con otros colectivos, sesiones como invitados, composiciones para bandas sonoras, diseño de sonido, etc.)*, pero no perdemos la esperanza de que el siguiente trabajo de estudio de THE ARISTOCRATS tarde poco en hacerse realidad, a despecho de la pandemia. Mientras tanto... ¡todos quietos parados para disfrutar de este estupendo ítem!

* Más información en esta entrevista publicada a fines de mayo pasado en la página web de Metal Symphony: https://www.metalsymphony.com/entrevista-aristocrats-freeze-live-europe/