HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
Hoy
nos toca volcar nuestros ojos y oídos a la escena progresiva italiana para
centrarnos en el grupo PHOENIX AGAIN y su más reciente disco que lleva el
título de “Unexplored”. Las raíces de este grupo se remontan tan lejanamente
como los inicios de la década de los 80s. El ensamble a cargo de la gestación y grabación de este nuevo
disco está conformado por Antonio Lorandi [bajo y voz], Silvano Silva [batería,
percusiones y voz], Sergio Lorandi [guitarras eléctricas y acústicas], Andrea Piccinelli [teclados], Giorgio Lorandi [percusiones y voz] y Marco Lorandi [guitarras eléctricas y voz]. Parece, con solo leer estos créditos, que esta banda es poco menos que una empresa familiar, y en cierto sentido es así porque los orígenes del grupo al que comentamos en esta ocasión se remontan a los inicios de los 80s cuando los hermanos Claudio, Antonio y Sergio Lorandi (voz/guitarra solista, bajo y guitarras, respectivamente), en asociación con el baterista Silvano Silva, formaron el grupo PHOENIX bajo las influencias de PINK FLOYD, GENESIS, KING CRIMSON y VAN DER GRAAF GENERATOR. Antes de separarse a fines de los 90s, ya el grupo había evolucionado hacia algo más centradamente sinfónico, pero no lograba nunca un contrato de grabación propiamente dicho. El grupo decidió reunirse y recomponerse en el año 2007 tras la muerte de Claudio, lo cual hizo a la banda rebautizarse como PHOENIX AGAIN y dedicarse a ella con especial fervor. Publicado a inicios de mayo último por el sello Black Widow Records, “Unexplored” sigue a los dos álbumes predecesores “ThreeFour” (2011) y “Look Out” (2014); veamos ahora los detalles de su repertorio.
‘That Day Will Come’ abre el disco, una canción robustamente
instalada sobre grooves y esquemas rítmicos complejos (mayormente en 7/8)
mientras los ágiles motivos instrumentales destilan un sutil aire arábigo.
Ya para las partes cantadas, la intensidad extrovertida deja paso a aires más
calmados, pero se trata de un recurso momentáneo. Luego sigue el instrumental ‘Silver’
(salvo algunos tarareos ocasionales, todo sonido es puramente instrumental),
una pieza que prosigue por los caminos de estrategia melódica sofisticada desarrollada
sobre complejas armazones rítmicas que ya se había iniciado solventemente con
el primer tema y que ahora llega a una renovada plenitud. De este modo, el
disco conquista rápidamente su primer cénit
de expresividad progresiva, y lo mejor es que este punto culminante se perpetúa
con la llegada del siguiente tema, ‘The Bridge Of Geese’. También instrumental,
comienza con una ceremoniosidad otoñal bajo la p6auta de las escalas de guitarra
acústica mientras las capas de sintetizador ornamentan el asunto con un aura
cósmica. No mucho más adelante, el ensamble en pleno da rienda suelta a su
recurrente mezcla de sensibilidad melódica
y estilizada musculatura. Esta pieza que dura poco menos de 6 ½ minutos hubiera
llenado de orgullo a bandas como PREMIATA FORNERIA MARCONI o IL CASTELLO DI
ATLANTE… pero es de PHOENIX AGAIN, así lo dictaron las Parcas. ‘Whisky’ vira
hacia un medio tiempo con bastante presencia guitarrera, lo cual significa que
la pieza en cuestión está diseñada para que la banda muestre su nervio más
rockero – con medidos matices blueseros – dentro de su ideario progresivo. También
se nota un realce de la dupla percusiva en varios parajes del entramado sonoro.
Abriendo la segunda mitad del repertorio, el breve tema ‘Close To
You’ comienza con sonidos de pasos antes de que la guitarra acústica abra
camino a un motif sereno e introspectivo. Un bellísimo interludio cuya envolvente
sobriedad nos viene bien para seguir adelante con los próximos ejercicios de
pura fastuosidad progresiva que habrán de completar lo que queda del repertorio
de “Unexplored”. En su primera mitad, ‘Valle Della Luna’ utiliza esta idea de
fastuosidad de una manera luminosa a través del empleo de atmósferas etéreas
que permiten que se dé una pulida fluidez en el encuentro entre los sinfónico y
lo fusionesco. La guitarra acústica, que en ‘Close To You’ se encerraba en su
propia melancolía, ahora emerge saltarina mientras las capas y orquestaciones
de teclado sutilmente van intensificando su presencia. De este modo, la segunda
mitad de ‘Valle Della Luna’ se proyecta hacia una reconstrucción de los
ambientes predominantes de las piezas #1 y #3. Los solos de guitarra y de sintetizador
que entran a tallar aquí están entre los mejores de todo el disco. Una breve
remodelación del primer motif sirve como efectivo epílogo. La dupla de ‘To Be
Afraid – Ansia’ y ‘Great Event’ se encarga de cerrar el repertorio del álbum. ‘To Be Afraid – Ansia’ comienza como una
cálida balada sinfónica que no se halla muy lejana de los estándares de LE ORME
y GENESIS, para luego virar hacia un recurso de pomposidad lírica al estilo de
CAMEL mientras designa aperturas al retro-prog sistemático de unos KARMACANIC. En fin, ‘Great Event’ prosigue por la línea de trabajo marcada por
un dinamismo típicamente sinfónico al modo de CAMEL, haciendo que el motif
central se regodee grácilmente en su candor inherentemente romántico.
Es una pena que la pieza en sí dure solo 2 ¼ minutos, pues su gancho es
bastante llamativo, pero todavía queda algo más tras dos minutos de silencio:
una coda pastoral marcada por guitarras acústicas, clavicordio y percusiones
que nos remite tanto al fulgor delicadamente palaciego de unos PFM como a la
faceta bucólica de ANTHONY PHILLIPS. Así llegamos a completar la experiencia de
“Unexplored”, un disco bastante bonito que nos ha de motivar a prestar atención
a PHOENIX AGAIN como una interesante alternativa dentro del sinfonismo
nostálgico italiano de nuestros tiempos.
The Bridge Of Geese: https://phoenixagain.bandcamp.com/track/the-bridge-of-geese
Valle
Della Luna: https://phoenixagain.bandcamp.com/track/valle-della-luna