Thursday, May 16, 2024

VYÖNI: en el trifinio de la actual escena progresiva noruega



HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA. 

El trifinio o tripunto es un punto de convergencia entre las fronteras de tres referentes geográficos; también es la inspiración para el título del disco de debut de VYÖNI, proyecto progresivo del multiinstrumentista y compositor noruego Kim-Frode H. Wøhni. Dicho proyecto cultiva un ecléctico encuentro entre prog psicodélico y sinfónico, post-rock, jazz-rock y ambient. El disco en cuestión se llama 
“The Tripoint” y fue publicado el pasado 24 de abril, tanto en formato digital como en vinilo, por vía del sello Loftysound Recordings. Wøhni
 se hace cargo de las guitarras, el bajo, el sintetizador, la batería, el piano eléctrico Fender Rhodes, el mellotrón, el clavinet, el vibráfono, el violín,  el saxofón, la programación de ritmos y las grabaciones de campo. O sea, todo lo que suena aquí. Siendo el autor exclusivo de todo el material aquí contenido, él también se hizo cargo de la producción y la mezcla, pero las labores de masterización estuvieron en manos de su ilustre compatriota Jacob Holm-Lupo (sí, el mismo de WHITE WILLOW, THE OPIUM CARTEL, etc.), en el Dude Ranch Studio. Todo lo que dijimos sobre el trifinio en la primera frase de esta reseña tiene mucho que ver con el título de este disco porque Wøhni es natural de la localidad de Kirkenes, cerca de un área donde se acercan las fronteras de Noruega, Suecia y Finlandia. El título también puede remitirse a la noción del encuentro de las tres tribus, o sea, la confluencia de gentes de ascendencia noruega, sami y kven. Como vemos, el maestro Wøhni se ha tomado muy en serio el concepto para trabajar en “The Tripoint”, el punto de partida de VYÖNI, un proyecto que, esperamos, rinda bastantes frutos en el futuro próximo. Repasemos ahora los detalles estrictamente musicales de este manifiesto progresivo para la avanzada rockera de nuestros tiempos.


Durando poco más de 6 ½ minutos y erigiéndose como la pieza más extensa del repertorio, ‘Way Up North’ da el puntapié inicial a las cosas con un prólogo aleatorio movido por inquietos ornamentos de batería que, al fin al cabo, abren la puerta a un cuerpo central sereno e introspectivo que se sitúa en una senda intermedia entre los paradigmas respectivos BURNT BELIEF y TORTOISE. Hay un lirismo operativo a lo largo y ancho del groove general y los sosegados fraseos de guitarra que dirigen el esquema melódico; en el último tercio se arma un efectivo crescendo en base a las capas de mellotrón y la creciente presencia de los riffs de guitarra, siendo así que todo aterriza en la serenidad inicial. Sigue a continuación ‘Steep Mountainside’ y lo hace exhibiendo una dosis razonablemente aumentada de musculatura en la ingeniería sónica donde los instrumentos actuantes se enfilan hacia la gestación de atmósferas grisáceas. Éstas se estructuran a través de juegos sutiles con vacíos y bases armónicas razonablemente parcas, lo cual hace que el entramado sonoro se muestre como un ejercicio de post-rock con notables matices jazzeros. El furioso pasaje final añade una cierta majestuosidad al asunto, redondeándose la faena con una misteriosa nebulosidad guitarrera. ‘Tales From The Ferries’ regresa al lirismo sereno que signó a la pieza #1 mientras le añade un colorido extra: el motif central ostenta un esquema melódico bastante cautivador. Recibiendo algunos ecos de este señorío otoñal, ‘Homecoming’ emerge con la misión de remodelarlos con una dosis comedida de musculatura rockera, creando así un paisaje musical donde la neblina se deja alumbrar sólidamente por un sol que, aunque no llega a borrar la dominante atmósfera de nostalgia, sí la agita para que llegue a exteriorizar algo de la furia interna que se resiste a expresar por completo. Cuando llega el turno de ‘Trip To Kilpis’, el disco conquista una de sus cimas expresivas, abriendo espacios a interesantes solos de guitarra y dejándose llevar por un groove crecientemente enérgico: este mismo groove asume una magnificencia típicamente progresiva en el ecuador, algo que marca decisivamente al espíritu de la pieza como un todo. En la secuencia de estos dos últimos ítems hay ciertas huellas de una remodelación Floydiana de MOGWAI y el legado del tercer álbum de la legendaria banda sueca RAGNARÖK en algunos pasajes.

La pieza homónima y la que le siguen asientan dos cénit decisivos para el álbum cuando éste ya se encuentra cerca del final. ‘The Tripoint’ establece un decisivo ejercicio de sofisticación jazz-progresiva que sabe asentarse muy bien en un área intermedia entre la faceta más relajada de SARCOPHAGUS NOW  y los SOFT MACHINE de 1976. Los parajes más serenos parecen intercalar recursos de misterio en medio del reinante señorío, lo cual nos remite nuevamente al estándar de BURNT BELIEF. También se destaca el que tal vez sea el mejor solo de guitarra de todo el disco en algún momento de la segunda mitad. ‘Shaky & Stirred’, que así se llama el tema siguiente, prosigue por la senda trazada por el tema precedente y le brinda un giro más cinlinado hacia lo introspectivo, manteniendo impoluta la aureola de refinado y delicado preciosismo heredada de aquél. ‘Heating The Sauna’ cierra el repertorio y lo hace desarrollando una síntesis entre los grooves predominantes en los dos temas precedentes y la faceta más reflexiva de algunas piezas precedentes. El aspecto filudo de algunos guitarreos brindan un vigor especial al sosegado swing que mayormente se basa en el estándar del post-rock. Las cortantes vibraciones emanadas de las últimas notas de la guitarra crean un final bastante impactante para la pieza y el repertorio. Todo esto es lo que hay en “The Tripoint”, un catálogo de elegantes y envolventes piezas que surgen del taller musical de VYÖNI para brindarnos un deleite melómano de casi 45 ½ minutos. Hay que seguir la pista a este proyecto para ver qué nos tiene deparado el horizonte de futuros contingentes para lo que eventualmente surja de allí en el inescrutable transcurso del siempre misterioso mañana.



Tuesday, May 14, 2024

La quinta excursión de PHOG por la foresta de rock prog-sinfónico francés


 
HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
Hoy viajamos un poco atrás en el tiempo hacia el primer día de octubre de 2022 para toparnos con “Forêt Noire”, el quinto y hasta ahora último trabajo de estudio de PHOG, el proyecto progresivo del multiinstrumentista y compositor francés Philippe Ogier. Él se hace cargo de las guitarras, el bajo, los teclados, la flauta, el ukulele y la programación de ritmos a lo largo del álbum que ahora nos ocupa. La dupla de sus discos de 2020 y 2021 (“This World…” y “El Castillo”, respectivamente) instauró un cénit muy inspirado para la proyección de la visión musical de Ogier, y en lo referente a la misión específica de “Forêt Noire”, ésta consiste mayormente en proseguir por la excelente y refinada senda del segundo de los discos que mencionamos más arriba. Como es habitual dentro del cosmos musical de PHOG, el enfoque creativo se centra principalmente en renovar y reforzar los estándares sinfónicos Camelianos, Yessianos y Genesianos, añadiendo matices fastuosos de cosecha propia. En estas nuevas composiciones se nota que hay una vitalidad colorida renovadora en el empleo de las orquestaciones y bases armónicas de los teclados en medio de la instrumentación íntegra. Revisemos ahora los detalles del material aquí contenido.
 

Los primeros 5 minutos del repertorio de “Forêt Noire” están ocupados por la pieza titulada ‘Talking Trees’, un preciosista y noble ejercicio de confluencias entre los GENESIS de 1976, los CAMEL de 1978 y los PINK FLOYD de 1975. Todo se inicia con unos breves tanteos de la guitarra que no tardan casi nada en instalar las bases para el motif central. La ceremoniosidad reinante en la arquitectura sonora se deja ornamentar por el arsenal de teclados y un minúsculo solo de flauta que se entromete en medio de los diversos fraseos de la guitarra. Para su último tercio, la pieza asume una renovadora intensidad expresiva que apunta hacia un fastuoso clímax conclusivo. Tras este despliegue de refinada belleza prog-sinfónica emerge un tema ambiciosamente desplegado en un espacio de casi 13 minutos: su título es ‘Hidden Seeds’. Todo empieza con un clima solemne que arropa una cálido esquema melódico donde impera lo reflexivo en una cruza entre el MIKE OLDFIELD de 1979-82  y (una vez más) los GENESIS de 1976. Alrededor de la frontera del cuarto minuto, el asunto vira hacia un recurso de entrañable jovialidad que nos recuerda a los primeros discos de ECLAT y EDHELS, aunque con un poco más de músculo; aún con una nueva variación temática posterior, el armazón sonoro se sigue afianzando dentro de una ingeniería gentilmente suntuosa, y ya cuando se regresa a la serenidad inicial, la solemnidad resultante ostenta un colorido nuevo. Notamos una mezcla de lo Floydiano y lo Yessiano en los recovecos melódicos del último cuarto de esta pieza; su epílogo cuasi-pastoral termina aportando una luminosidad fresca a la maraña instrumental. ‘Friendly Squirrel’ hereda ciertos recursos de preciosista pomposidad que signaron a la sección final de la pieza precedente, pero, en espíritu, su esquema melódico está más cercano a la gracilidad lírica propia del primer tema del disco. Se nota en las armonizaciones de bajo y teclados que se está creando una nueva forma de agilidad expresiva en el arreglo globalmente jazz.progresivo del desarrollo melódico.

 
La suite justamente titulada ‘Forêt Noire’ cierra el álbum, ocupando un espacio de cerca de 20 ½ minutos. Dada esta situación tan retadora, el maestro Ogier debe aprovechar el momento para sacar de sí las dimensiones más fastuosas de su visión musical. Todo comienza con un tenor sereno y mesuradamente esplendoroso al modo de un hermanamiento entre los CAMEL de 1979 y los PINK FLOYD de 1975, con algunos brotes de soltura expresionista que son típicos de PHOG en sí mismos. Los primeros fraseos de la guitarra dan un fuerte carácter musical a lo que se desarrolla en los primeros minutos, pero en una sección siguiente tiene que asumir un perfil menos predominante a fin de que emerja el enfoque bucólico y etéreo que se tiene diseñado para la ocasión. Ahora se impone una espiritualidad contemplativa que, a su vez, no tarda mucho en reacomodarse a un esquema de trabajo más preciosista cuando vuelve a entrar en acción la percusión programada en conjunción con las hermosas líneas de bajo. Los momentos de lucimiento de la guitarra acústica, a pesar de su brevedad, son eficientes a la hora de realzar el exuberante lirismo del momento. En el ecuador de la pieza, entra a tallar de nuevo la influencia Yessiana, lo cual significa que las atmósferas sónicas se van volviendo más fulgurosas y que hay ocasionales incrementos de intensidad en el esquema rítmico; en simultáneo, el talante contemplativo sigue siendo el mismo, perseverando en apelaciones a una aureola introspectiva que se deja arropar por velos aristocráticos. Para los tres últimos minutos y pico, la instrumentación asume un crucial viraje extrovertido que perfila de una manera nueva los recursos de absorbente preciosismo que han estado signando a la expansión multi-temática. Los ribetes serenos de las últimas notas aplican un oportuno punto final a la suite. Todo esto fue lo que había salido del taller progresivo de PHOG bajo el título de “Forêt Noire”; este disco es un estupendo muestrario de la belleza de la foresta del rock artístico francés de nuestros tiempos. Heredando parte de la majestuosidad del álbum precedente, este repertorio parece retratar un recorrido minucioso por todos los salones del castillo para luego disfrutar de  una larga tarde luminosa en los bosques aledaños. Aunque esta reseña es un poco tardía, nunca está de más recomendar su adquisición para cualquier buena fonoteca dedicada a la música progresiva de ayer y hoy. 
 
 
Muestras de “Forêt Noire”.-
Talking Trees: https://phog.bandcamp.com/track/talking-trees
Forêt Noire: https://phog.bandcamp.com/track/for-t-noire

Saturday, May 11, 2024

CELESTE: presente y futuro de una leyenda viviente de la música progresiva italiana

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
Llegan buenas noticias desde el escenario progresivo italiano porque acaba de salir el nuevo disco del veterano grupo CELESTE, el cual se titula “Echi Di Un Futuro Passato”. La fecha de publicación en el blog de Bandcamp de Ciro Perrino, el líder sempiterno del grupo, fue el pasado 4 de mayo. Para más adelante están programadas las respectivas ediciones en CD y vinilo. Perrino se hace cargo del mellotrón, los sintetizadores Solina, Eminent, Minimoog y ARP 2600, el órgano Hammond y el canto; la alineación de CELESTE se completa con Francesco Bertone [bajos con y sin trastes], Enzo Cioffi [batería], Marco Moro [flautas alto, en Sol y bajo, soxofones contralto, tenor y barítono, y flautas dulces] y Mauro Vero [guitarras acústicas y eléctricas]. Aparecen también algunos invitados: Marco Canepa (piano), Sergio Caputo (violín), Paolo Maffi (saxofones contralto y tenor) e Ines Aliprandi (canto). Perrino es el autor exclusivo de todo el material contenido en este disco grabado en los meses de enero y febrero del presente año 2024, en el Studio Mazzi de Borghetto S. Spiritu, bajo el mando de Alessandro Mazzitelli. En medio de todas estas tareas de creación y grabación de este nuevo material, el maestro Perrino ha estado ocupado con la preparación de un próximo disco solista y la reedición de viejo material de IL SISTEMA. La mezcla y la post-producción de “Echi Di Un Futuro Passato” estuvieron a cargo de Alessio y Andy Senis en los Studi Rosenhouse de Vallecrosia, en estos meses de marzo y abril; realmente este proceso final de gestación se hizo en un tiempo presuoramente aprovechado. La idea para la portada es de Mauro Degrassi y Massimo Mazzeo hizo el diseño gráfico. En líneas generales, no nos parece tan impresionante como los dos primeros que iniciaron esta segunda etapa de CELESTE, pero tiene muchos méritos estéticos por sí mismo: revisemos éstos a continuación. 
 
‘Pigmenti’ ocupa los primeros 8 ¾ minutos del repertorio y ya desde sus primeros instantes, donde se revela una delicada mezcla de suaves cadencias jazz-progresivas y gráciles colores pastorales, advertimos que se nos viene una exploración en la faceta más cálida de la introspección. Las aristocráticas florituras del piano que emergen poco antes del ecuador añaden más dosis de sofisticación al esquema melódico, el cual habrá de terminar con un aura razonablemente exultante con los solos alternados de saxofón y guitarra que surgen en la sección final. Sigue a continuación ‘Sottili Armonie’, el tema más largo del disco con sus más de 10 ¾ minutos de duración. Enraizándose en el paisaje musical pintado en la pieza precedente, Perrino y sus compinches se disponen a delinear y trazar una trayectoria de majestuosidad ensoñadora arropada bajo una atmósfera consistentemente solemne. El breve prólogo de piano asienta firmemente las bases de la ingeniería colectiva, la cual ahora da amplia prioridad al estándar sinfónico. Los CELESTE de los dos discos precedentes establecen nexos con sus geniales herederos HÖSTSONATEN. ‘Aspetti Astratti’ tiene un inicio cósmico signado por capas etéreas, el cual abre la puerta a un motif más ágil que reaviva el dinamismo jazz-progresivo con el que se inició el repertorio, esta vez, con una vivacidad renovada que nos remite a los PASSPORT de inicios de los 80. El saxofón se luce particularmente en medio del entramado grupal, aunque todavía prevalece una forja de ambientes bucólicos. ‘Attese Sottese’ es otra pieza de generosa extensión: dura 10 ½ minutos y su enfoque central está muy cercanamente emparentado con el del tema #2. El meticulosamente sereno esquema rítmico se permite elaborar algunos ornamentos mientras las maderas, las guitarras acústica y eléctrica y el saxofón llenan los espacios señalados por las refinadas orquestaciones de teclados y cuerdas. Éstas proporcionan el tamizado idóneo para el suelo que sustenta el mesuradamente suntuoso viaje colectivo. Hemos disfrutado de dos cénit seguidos del álbum. 
 
El encuadre melódico desarrollado en ‘Misteri Evoluti’ se sitúa en el centro del puente entre los grooves serenos del segundo tema y las cadencias sistemáticamente elegantes del primero y el tercero, una estrategia que gesta una muy llamativa estructura melódica merced al bien perfilado rol protagónico de la flauta. El epílogo de guitarra acústica cierra la puerta con cristalina delicadeza. Cuando llega el turno de ‘Madrigale’ – tema que dura poco más de 10 ½ minutos –, el ensamble se dispone a ahondar en el aspecto ceremonioso y solemne de su ideario folk-progresivo hasta lo más hondo de sus cimientos. La atmósfera general de los arreglos del sencillo núcleo melódico van oscilando entre el dejarse envolver por una neblina otoñal y el centrarse en la contemplación de un matutino nevado invernal. El candor del canto femenino realza la predominante aureola reflexiva de la composición. ‘Circonvoluzioni’ trae consigo el cierre del repertorio y lo hace completando el círculo integralmente dibujado por el repertorio con un regreso casi total a la atmósfera principal del tema #1. El aspecto nuevo aquí es que el aura crepuscular se nota más pronunciada, además de que el momentáneo canto femenino funciona como un sedoso sortilegio. El epílogo del saxofón solitario refleja muy bien el espíritu de agradecida despedida tras un exquisito viaje musical. “Echi Di Un Futuro Passato” es, a fin de cuentas, un manifiesto claro y distinto de cuánta fuerza tiene la visión musical de CELESTE para persistir como una poderosa voz dentro de la escena progresiva italiana de ayer, hoy y siempre. Es muy bueno que la idea de CELESTE se mantenga vigente con una consistencia de la que no pudo gozar en su primera etapa en aquella lejana década de los 70: con cada nuevo disco hermoso y refinado que surge del esfuerzo del maestro Ciro Perrino y sus compañeros de viaje, la revancha del tiempo se consolida más a favor de esta heroica banda, y “Echi Di Un Futuro Passato” no es la excepción. Muy recomendable.
 
 
Muestras de “Echi Di Un Futuro Passato”.-
Aspetti Astratti: https://celeste4.bandcamp.com/track/aspetti-astratti

Wednesday, May 08, 2024

Segundo volumen de la nueva visión paradisíaca de los japoneses MONO

 
HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Volvemos a visitar el país musical del grupo japonés MONO para ver qué ha estado haciendo en las pasadas jornadas navideñas del año 2023 y nos topamos con el EP “Heaven Vol. 2”, el cual fue publicado de forma exclusivamente digital en el blog de Bandcamp del grupo el 23 de diciembre de 2024. “Heaven Vol. 2” sucede a “Heaven Vol. 1” en la actual misión que tiene el grupo de publicar pequeños discos por cada Navidad. El cuarteto conformado por el guitarrista Takaakira “Taka” Goto (también principal compositor), la bajista-teclista Tamaki, el guitarrista Yoda y el baterista Dahm. Este EP que ahora nos ocupa fue producido por Jeremy DeVine (el jefe del sello Temporary Residence Limited) y el propio “Taka”, siendo así que las sesiones de grabación tuvieron lugar en el Studio Forty-4. Más bien, las pistas de batería se grabaron en el estudio The Union de Nueva York, en octubre de 2023. Los ulteriores procesos de mezcla y masterización estuvieron a cargo de DeVine y Rafael Anton Irisarri en el Black Knoll Studio, también en ese mes de octubre. Repasemos ahora el breve repertorio contenido en “Heaven Vol. 2”. 


Durando poco más de 7 ¾ minutos y siendo la pieza más extensa del EP, ‘Snow Ghost’ abre el mismo con esa mezcla de intensidad emocional y estilizado dinamismo cerebral que desde hace mucho tiempo es marca de la casa. El vigor contenido que se establece en la maraña de los instrumentos actuantes permite al aura reflexiva de la pieza instalar la atmósfera general con total comodidad. ‘Haunting Echo’ sigue a continuación con una exhibición de vibraciones luminosas que, sobre unas cadencias meticulosamente gráciles armadas por la dupla rítmica, se deja llevar por un fulgor cuasi-crepuscular, siendo éste el que define el carácter moderado con el que se ha de expresar la alegría intrínseca a la composición. Algunas líneas de bajo añaden un elemento extra de sofisticación al asunto, un factor que no hace sino aumentar el magnetismo consistente de la composición en sí misma. ‘Beloved’ cierra el EP con un aura de calma que logra cubrir algún tipo de inquietud melancólica mientras no llega a ocultarlo totalmente. Hay una fuerza intrínseca, que no extrovertida, reinando en la ingeniería sonora que se concreta con suma elegancia por obra y gracia de la amalgama de los instrumentos actuantes. Es un estupendo modo de terminar el EP ahora que el grupo ha anunciado que pronto lanzará al mercado su próximo trabajo de larga duración, el cual se habrá de titular “Oath”. Mientras tanto, “Heaven Vol. 2”, en menos de 20 minutos, nos deja el enésimo testimonio de la creatividad de MONO junto a su permanencia dentro de la élite de la vanguardia rockera de su país. ¡Pero es que esta banda cuenta desde hace mucho con un amplio renombre internacional! 
 

Segunda aventura del dúo canadiense-estadounidense THE FOREVER MOMENT


 
HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
Tenemos buenas nuevas de parte de THE FOREVER MOMENT, el proyecto conformado por el músico estadounidense Mark Cook (HERD OF INSTINCT, LIQUID SOUND COMPANY, T.A.P) y el canadiense Steven Leak. Se trata de la publicación de su segundo trabajo discográfico en el pasado 26 de abril bajo el título de “Splay”. Sucede por un año y nueve meses a su homónimo álbum de debut. Su propuesta musical se enfila por un híbrido fulguroso y evocador de electrónica, rock psicodélico de tenor atmosférico, prog-ambient y post-rock. Steven Leak se hace cargo de los sintetizadores Arturia Microfreak y Arturia Minifreak, los pedales Red Panda Tensor and Particle pedals, el TC Infinite Sampler, el Zoom Multistomp y grabaciones de campo; por su parte, Mark Cook ejecuta las Warr Guitars con y sin trastes, el bajo sin trastes, los sintetizadores Korg Minilogue y Monologue, la guitarra clásica, los pianos eléctrico y acústico, la batería y los sampleos. En un tema de este disco que ahora nos ocupa, el dúo contó con la colaboración del músico neerlandés Ottmar Soulier a los teclados, la trompeta y la percusión. El material contenido en “Splay” fue grabado en Arlington (Texas), Peterborough (Ontario) y los Países Bajos. El arte gráfica es de Steven Leak. Bueno, repasemos ahora los detalles estrictamente musicales del disco que hoy nos ocupa. 

 
El repertorio de “Splay” se inicia con ‘The Moon’s Concern’, una pieza que hace sentir las vibraciones serenamente ensoñadoras de su motif central. Las flotantes capas de sintetizador y las mágicas líneas de las flautas étnicas acogen e impulsan una espiritualidad contemplativa. Cuando entran a tallar las secuencias rítmicas de tenor tribal, la reinante magia adopta una sutilmente incrementada vivacidad que, a su vez, aumenta moderadamente el fulgor sónico. La subsiguiente dupla de ‘Sleeping Under Rough Blankets’ y ‘Speeding Grace’ se encarga de expandir la paleta sonora del dúo. El primero de estos temas mencionados apela a una densidad más determinante en base al empleo de atmósferas grisáceas y misteriosas sobre un parsimonioso groove. Lo que suena aquí es una cruza entre la faceta más intimista de HERD OF INSTINCT y la dimensión space-rockera que se ha venido vertiendo en los últimos discos de DJAM KARET. Los elegantes ornamentos del bajo sin trastes preparan el terreno para el ulterior lucimiento de la Warr Guitar. En cuanto a ‘Speeding Grace’, se trata del primer ejercicio de extroversión musical del disco, ostentando una refinada musculatura que va fluyendo grácilmente a través del desarrollo temático. Las bases y pequeños solos de sintetizador preparan el terreno para las prontas piruetas de la Warr Guitar; mientras tanto, la batería impulsa al dinamismo establecido por los instrumentos actuantes, erigiéndose finalmente en el centro de la coda en clave de free form. Todo un cénit del álbum. ‘This Now’ preserva esta línea extrovertida y la trabaja con una luminosidad más llamativa. Las armonías sintetizadas se comunican muy eficazmente  con los retazos de la Warr Guitar y los solos de teclado mientras la vivacidad del entramado sonoro sigue su curso. ‘Java Current’ establece un groove fusionesco para un esquema sonoro envolvente mientras su núcleo temático se siente muy cercananente emparentado con el del tema #3. La secuencia de estos tres temas ha concretado un enfoque vitalista para una creativa cruza de ambientes fusionecos y estructuras sonoras modernistas sobre vivaces cimientos progresivos.


Con su duración de poco más de 10 ½ minutos, ‘The Shining Multiples’ se erige como la pieza más extensa del álbum. Comienza con un largo episodio de exploraciones sónicas tremendamente abstractas que parecen evadir cualquier formalismo, pero es que, en realidad, se trata de una busca sigilosa de algún tipo de asentamiento. Una vez hallado y concretado el groove correcto, el asunto vira hacia un sereno jam jazz-progresivo alimentado por recursos inspirados tanto en el paradigma de los STICK MEN como en el legado de los TANGERINE DREAM de 1974-75. Las parcas notas finales del piano crean el epílogo perfecto. ‘Indra’s Net’ regresa de lleno a las texturas cósmicas como núcleo central, apoyándose en arquitectónicas amalgamas de capas cibernéticas cuya potencial densidad es matizada por una luminosa majestuosidad en el tramo final. ‘Ruthsong’ trae consigo el cierre del álbum y lo hace con una actitud contemplativa que se hermana con el paradigma de BURNT BELIEF y la faceta más etérea de los veteranos DJAM KARET. Los sobrios fraseos de la guitarra clásica y la sutil soltura de las bases armónicas del piano eléctrico se apoyan cómodamente sobre las capas de sintetizador y Warr Guitar. La dupla rítmica sostiene el armazón general con meticulosa delicadeza. Todo esto es lo que nos brindó la gente de THE FOREVER MOMENT con su nuevo disco “Splay”, una nueva muestra de la estilizada frescura que es capaz de brindar a las respectivas escenas vanguardistas de ambos países del Norte de América.... y de todo el mundo, también Totalmente recomendable. 
 
 
Muestras de “Splay”.-
Speeding Grace: https://theforevermoment.bandcamp.com/track/speeding-grace
Java Current: https://theforevermoment.bandcamp.com/track/java-current
The Shining Multiples: https://theforevermoment.bandcamp.com/track/the-shining-multiples

Sunday, May 05, 2024

El punto de vista de FRANÇOIS THOLLOT para la música progresiva francesa de inicios del año 2024

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
En estos días tenemos a nuestro alcance el nuevo disco del maestro francés FRANÇOIS THOLLOT, un tipo bastante proactivo dentro de la escena progresiva del nuevo milenio. El disco en cuestión se titula “Point Of View” y se publicó en su blog de Bandcamp el último día del pasado mes de febrero, sucediendo por cuatro meses y una semana a su antecesor “Maybe”. Lo que se aprecia en “Point Of View” es una nueva serie de excursiones vanguardistas donde confluyen instanciaciones del Zeuhl fusionesco, el esquematismo dodecafónico favorecido por el RIO y la particular elegancia jazz-progresiva del Canterbury, algo en lo cual THOLLOT se ha especializado fehacientemente desde sus días como líder del ensamble SCHERZOO. Lo más saltante de este nuevo disco es el rol prioritario que tiene el piano tanto en los centros nucleares de los temas como en los armazones instrumentales generales. Además, dentro de esta estrategia, THOLLOT se pone a explorar meticulosamente los rudimentos más explosivos de dicho instrumento a través de los habitualmente complejos diseños temáticos que se van sucediendo en la serie de siete piezas aquí contenidas; especialmente, la batería se empeña en diseñar esquemas rítmicos complejos de una manera obsesiva. En cuanto a los detalles técnicos, “Point Of View” no es la excepción en lo referente al hecho de que THOLLOT es el responsable exclusivo de todo lo que se ejecutó en la grabación de los temas y los ulteriores procesos de mezcla y masterización. Pasemos ahora al repertorio específico.
 
La dupla inicial de ‘Good Book’ y ‘Monster Traktor’ ocupa un espacio conjunto de casi 13 ½ minutos, dejando bien claras las pautas predominantes del repertorio general. ‘Good Book’ exhibe desde el primer instante un dinamismo jovial cuyo grácil colorido motiva un encanto peculiar a ser emanado de los recovecos atonales con los que se arma la ingeniería melódica. El hermanamiento de piano, sintetizador y órgano sabe muy bien cómo focalizar su instauración sobre el complejo cimiento rítmico. En cuanto a ‘Monster Traktor’, se basa en una composición de espiritualidad siniestra que, en base al encuadre dual de batería y piano, se deja penetrar por una agilidad jazz-progresiva que, en muchas ocasiones, nos recuerda a la faceta más señorial de unos NATIONAL HEALTH. Casi parece contra natura, pero ése es el híbrido aquí concretado. Si el primer tema del álbum era como un HAPPY THE MAN perversamente remodelado por los HENRY COW de 1975, el segundo fue como un ejercicio de agitaciones híbridas de DÜN y SOFT MACHINE (del año 1975) para una partitura perdida de los PRESENT de los 80. Asertiva como osada, la idea de iniciar el disco con dos piezas con tanto carácter resultó exitosa. El tercer tema se llama ‘Structures’ y ostenta un talante un poco más sobrio que cualquiera de los dos precedentes, pero, por otra parte, la exuberancia sigue siendo la misma. También hay una mayor robustez en los varios  grooves planteados por la batería. Notamos confluencias con KOTEBEL y LEMMINGS SUICIDE MYTH. La cuarta pieza del disco es la que justamente le da título. A lo largo de sus 6 minutos de duración, ‘Point Of View’ elabora un lúcido ejercicio de cromatismos jazz-progresivos al modo de unos HAPPY THE MAN alucinados con suriles toques de Zeuhl. Hay ciertas conexiones con el primer tema del disco, algo que no ocurre con ‘Destruct’, la pieza siguiente. Ésta delinea un aura notablemente más solemne para los arreglos de su desarrollo temático, poniendo a las florituras del piano más al frente que nunca. Los sonidos imitadores de percusión tonal añaden interesantes texturas armónicas al paisaje musical con miras a realzar el omnisciente fulgor sónico.
 
Cuando llega el turno de ‘Matrice’, es el momento de explorar parajes y atmósferas un poco más ceremoniosas que los que predominaron en los temas precedentes. Por otra parte, notamos aquí  unos coqueteos con lo lóbrego que tienen cierta afinidad con el vitalismo grisáceo del tema #2. Lo que impide que la tensión sea igual es el empuje calculadamente disperso de la batería. ‘Little Suite’ no es solamente la pieza más extensa del repertorio con su espacio de casi 10 ½ minutos, sino que también es el que le da cierre. La artillería instrumental con la que cuenta THOLLOT está al servicio de una ambiciosa ingeniería híbrida de sinfonismo, jazz-prog y vibraciones Zappianas. En varias ocasiones notamos cierta aproximación al paradigma de GENTLE GIANT (etapa 72-75), así como algunas lecciones aprendidas de ka majestuosidad de NATIONAL HEALTH y de los ZAO de 1975-76, siempre con esos retorcimientos armónicos que aportan un colorido bizarro al versátil dinamismo de la pieza. Los pasajes climáticos son varios, pero éstos no llegan nunca a saturar la ingeniería musical, la cual se sustenta sobre un bien pulido equilibrio entre lo intenso y lo cálido. 
Todo esto es lo que el infatigable maestro FRANÇOIS THOLLOT nos ha brindado con su nueva obra “Point Of View”, una muestra de la típica vitalidad que este señor ha convertido en paradigma suyo, apostando por algunos detalles nuevos para reactivar su maquinaria creativa donde lo refinado y lo extravagante se convierten en una sola cualidad bien compacta. Totalmente recomendable este disco, engrandece a la escena progresiva francesa en el primer tercio de este año 2024. 
 
 
Muestras de “Point Of View”.-
Good Book: 
https://scherzoo.bandcamp.com/track/good-book-2

Thursday, May 02, 2024

SUMDEUS: una interesante visión de la energía jazz-progresiva dentro de la escena rockera estadounidense

 

HOLA, AMIGOS DE AUTOPOIETICAN, LES SALUDA CÉSAR INCA.
 
Hoy viajamos a los EE.UU., más específicamente, al Área de la Bahía de California para descubrir a SUMDEUS, proyecto progresivo del guitarrista y compositor Rome Yamilov, músico residente en el país de Edward Hopper y Ray Brabdury, pero nacido en la localidad rusa de Óbninsk. SUMDEUS hizo su primera obra en el año 2012 y se ha mantenido publicando discos y EP con regularidad, manteniendo bien centrado su foco en el jazz-prog eclécticamente psicodélico. Yamilov tiene una interesante experiencia en la vanguardia estadounidense, no sólo con composiciones propias y una membrecía en el colectivo THE GREASELAND YOUNGSTERS, sino también haciendo un disco a dúo con el ilustre veterano Henry Keiser en el año 2022. El colectivo de SUMDEUS se completa con Tom Weeks [saxofones], Nima Hafezieh [teclados], Kazuto Sato [bajo y contrabajo] y Patrick Talesfore, Jr. [batería]. “Somedays” es el nombre del disco que este ensamble publicó el primer día de marzo del presente año 2024; aquí se muestra un vergel de jazz-rock, improvisaciones de núcleo psicodélico, space-rock y exploraciones inspiradas en la tradición del free jazz. El material contenido en “Somedays” fue grabado en los Sharkbite Studios de Oakland, con la ulterior mezcla siendo realizada en The Noise Shop, otro estudio de Oakland. La masterización estuvo a cargo de Robert Rich. Por su parte, el arte gráfica es de Nick Ross. Bueno, vamos ahora a los detalles del repertorio contenido en “Somedays”.
 

‘Nice Little’ inicia el rumbo de las cosas con una declaración de principios sobre la importancia de los jams a la hora de estructurar ideas musicales a lo largo del camino. La patente agilidad con la que se mueven los aportes de los diversos instrumentos resulta esencial para la configuración y la concreción de un entramado sonoro vitalista y festivo. Hay una alegría que motiva el armazón de fuentes expresivas para los sucesivos solos de saxo, sintetizador y guitarra sobre un swing genuinamente enérgico, el mismo que se intensifica en el último tercio. A continuación, llega el turno de ‘Big Pat’s Beat’, que tiene un groove un poco más reposado y un señorío más imponente, concretando una peculiar elegancia para la confluencia entre jazz-rock y psicodelia progresiva. El rol de los teclados es crucialmente protagónico. Lo que suena aquí es como un híbrido de NATIONAL HEALTH, WEATHER REPORT y EMBRYO con añadidos matices contemporáneos que se sienten afines a ZOPP. El asunto se enfila hacia temas cada vez más extensos al pues el tercer tema del disco dura alrededor de 16 ¾ minutos; su título es ‘Mirage’ y su función consiste en asentar una expansiva dilatación del fragor sonoro propio del ensamble dentro de un enfoque intensivamente fastuoso. Todo empieza con un intenso juego de formas libres con clara raigambre en el jazz experimental: las florituras del saxo, los retazos distorsionados de la guitarra y las indicaciones anarquistas de la batería triangulan el despliegue de surrealismo deconstructivo. A poco de pasada la frontera del octavo minuto, se delinea un groove elegante y exóticamente grisáceo que tiende puentes entre WEATHER REPORT y FIRE! con aumentados matices del SUN RA de 1978. A través de los constantes devaneos y virguerías del saxofón, en algún momento asume el protagonismo la guitarra, la cual despliega las que tal vez sean sus intervenciones más electrizantes de todo el álbum; es así que el bloque sonoro adquiere un nervio renovador mientras el esquema sonoro en curso va reforzando la senda tomada para estos últimos minutos. 

Hemos disfrutado de dos cénit espectaculares del álbum en sucesión directa, pero todavía queda la monumental maratón ‘The Confluence Of Creation’, la cual ocupa un espacio de casi 29 ½ minuto. Su misión es la de llevar las vibraciones masivamente épicas de la pieza precedente hacia una dimensión más misteriosa, haciendo que lo fastuoso retuerce algunos de sus potenciales fulgores. Esto es necesario debido a que el ensamble decide explorar con inaudita profundidad sus inquietudes más vanguardistas. Esto se hace muy claro a lo largo de la extensa primera sección que se adentra en territorio deconstructivo al modo de un SUN RA de la etapa 1970-74 contaminado por matices de los HENRY COW del tercer álbum y los legendarios ANNEXUS QUAM. Las aleatorias combinaciones e interconexiones instrumentales alternan la lógica de las expansiones libres con la de las ondas circulares crecientes, apelando a una espiritualidad inquieta y enérgica que no llega a hacerse ominosa pero que, al fin y al cabo, está en las antípodas del relax espiritual. Una lucidez de fulgores impredecibles va avanzando hacia la frontera del noveno minuto, cuando las tensiones se elevan hacia un área de explosiva neurosis. Esto es seguido, alrededor de la frontera del minuto 13, por unas texturas cósmicas que abren el camino para un solemne riff de guitarra que, a su vez, motiva un señorial ejercicio híbrido de krautrock a lo AGITATION FREE y avant-jazz afín al legado de KEITH TIPPETT. Para la sección epilogar, se genera un relajante jam de jazz-fusion de la vieja guardia. Como balance final, “Somedays” es un disco que merece ser apreciado como una exhibición de enérgicos y versátiles esquemas musicales para la gloria de la actual escena progresiva estadounidense. Recién descubrimos la obra de SUMDEUS y los diversos trabajos colaborativos en los que ha estado embarcado el guitarrista Rome Yamilov, y realmente estamos bastante sorprendidos con este mundo tan vitalista que se nos va revelando poco a poco. Esta obra de SUMDEUS para el año 2024 es totalmente recomendable en cualquier buena colección fonográfica dedicada al género progresivo.